-¿No hay esperanza?-preguntó Pansy cuando estuvieron a solas.
-Los sanadores dicen que no le queda mucho tiempo-dijo Millicent en un hilo de voz-. Ya han probado con todos los remedios posibles. Nada ha funcionado.
-¿Cuánto?-preguntó Astoria triste.
-Un año, como máximo-dijo Millicent mientras las lágrimas amenazaban con salir de sus ojos nuevamente-. No es justo. De todas las personas que conocemos, ustedes y yo sabemos que ella no se lo merece.
-No hay nada que podamos hacer-dijo Pansy-, excepto acompañarla todo el tiempo que podamos.
Millicent abrazó a sus amigas.
-Gracias chicas, por su apoyo.
Ni siquiera Pansy tuvo corazón para intentar escapar del abrazo. Dada la situación, incluso ella lo necesitaba.
-Aquí estamos Millicent-le dijo entre sollozos-, y aquí vamos a seguir. Eso tenlo por seguro.
Millicent se secó las lágrimas.
-Lo sé. De verdad se los agradezco.
-Bueno-Astoria suspiró con desgana-. Tenemos que irnos. Hay clase de Pociones.
-Las veré allá-dijo Pansy-. Tengo que ir a la Biblioteca a buscar algo.
-Bueno, nos vemos.
Millicent y Astoria se dirigieron al salón de Pociones, pero iban tan distraídas que casi se chocan con Hermione.
-Fíjate por donde vas, sangre sucia-dijo Millicent, aunque sin el típico tono de desprecio.
-Esperen-pidió la castaña-. Las estaba buscando.
Por primera vez en varios días, Astoria y Millicent se olvidaron de sus problemas y voltearon a ver a la leona con curiosidad.
-¿A nosotras?-preguntó Astoria-¿Por qué?
-Bueno...
Hermione estaba algo nerviosa. No estaba acostumbrada a tener atenciones con las Slytherin, pero haría el intento.
-Tengan esto.
Las chicas se sorprendieron más. Hermione les estaba ofreciendo varios dulces y chocolates salidos de Honeydukes, una tienda de dulces de Hogsmeade.
-¿Qué es esto?-preguntó Millicent.
-Mis padres son dentistas en el mundo muggle, cuidan la salud dental de las personas-explicó Hermione-. Pero también dicen que a veces es justificable comer un poco de dulce. En especial cuando tienes problemas, te ayuda a olvidarlos.
-¿Tú crees esas cosas?-preguntó Millicent.
-Sólo ténganlos y ya-Hermione se los puso en las manos-. Yo sé lo que es estar en problemas y no ver la luz al final del túnel. Pero la hay, les prometo que la encontrarán. Sea cual sea su problema, se arreglará.
Millicent y Astoria miraron a Hermione, sin saber qué decir.
-Bueno, ¿dónde está Pansy? También le traje a ella.
-Se fue a la Biblioteca-dijo Astoria.
-Gracias-dijo Hermione agarrando los dulces que le había traído a la pelinegra-. Bueno, las veré después supongo.
Hermione se empezó a ir.
-Espera, Granger.
Hermione volteo hacia Millicent.
-Yo...-a ella también le costaba hacer eso después de años de enemistad con la castaña-. Gracias. No debiste, pero gracias.
-Sí debía-Hermione le sonrió un poco-. Nos vemos luego.

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Por accidente.
Fiksi Penggemar¿Qué tienen en común una Slytherin y una Gryffindor? ¡Acertaron! Nada. Hermione Granger y Pansy Parkinson están lejos de detestarse: se odian a muerte. Desde el primer día, Pansy le ha hecho la vida imposible a la princesa de Gryffindor por ser una...