After Dark.

Capitulo 18:El intruso.

Me despierto, estirando mis brazos y retorciendo mi columna. Sorprendentemente estoy en un lugar cómodo. Al darme cuenta abro los ojos, encontrándome en mi cama. Se ve por la ventana que ya es de día. Rápidamente vuelven a mí todo lo que pasó anoche. 

¡Oh dioses! ¡Embarazada!.

Salto de la cama, buscando a Rosa. Iba a bajar las escaleras, cuando de reojo veo movimiento en la recamara de mis padres. Sorprendida de que estén en casa me aproximé viendo una cabellera Blanca y otra negra. A pesar que a diferencia de mi habitación se mantiene una gran iluminación gracias a las cortinas claras, en la habitación de mis padres está la cortina automática que aísla toda la luz solar, aún así se puede diferenciar las cabelleras de mis amigos.

—¿¡EMBARAZADOOOS!?.

Me aviento a la cama, encima de la pareja. Ambos se quejan y yo me paro arriba de la cama para poder saltar.

—¡Voy a ser tía!¡Voy a ser tía!.

—¡Ya para! ¡Le puede hacer mal al bebé!.

Salgo inmediatamente de la cama de un salto y me dirijo hacia rosa.

—¿Estás bien?¿Cómo pasó? O sea si se como pasó, pero¿Estamos felices?. —Aprieto sus cachetes y comienzo a darle besos por toda su cara.

—Para, Leigh se pondrá celoso .—Mi amiga sonríe e intenta apartar mi cara de la suya. Su novio del otro lado de la cama se ríe, mientras se levanta.

—Haré el desayuno mientras ustedes hablan.—De acerca a la peliblanca y le planta un pequeño beso en los labios y otro en el abdomen. Se retira y yo chilló.

—¡Rosa!¡No lo puedo creer!.

—¡Yo tampoco! Y si estamos felices. —Su voz suena eufórica y soñadora.—No me mal entiendas. No lo planeamos, pero al analizar los pros y contras,descubrimos que no nos desagrada la idea de ser padres.

—¿Y cuales serían esos pros y contras? Porque...¡Rosa! Los estudios son primordiales.

—Lo sé. Y no pienso suspenderlos. Este año terminaré como siempre y el año que viene veré otras alternativas. Después tomaré un año sabático, para tener las suficientes energías para empezar mi carrera en la moda.

—Lo tienes todo planeado.

Mi cabeza se inunda de pensamientos negativos respecto a este embarazo. Hay muchas cosas que pueden salir mal de su plan. Pero no quiero arruinar la ilusión. Y como su amiga en vez de tirarle los dueños abajo, debo pensar en alternativas por si el plan falla. Ella ha sido un Ángel en mi vida desde que llegué.

Al pensar en todo lo que hizo por mí no puedo evitar abrazarla. Ella se sorprende por la brusquedad del movimiento pero igual me corresponde.

—Estoy muy feliz por ti. —Mi voz suena apagada en su hombro.

—Por los dos. Querrás decir. —Leigh interviene en la habitación con una bandeja llena de comida y tres tazas de chocolate con leche. —Es un trabajo de dos.

—¿Y cuánto trabajo te tomo?¿Dos minutos? Ella tendrá nueve meses. ¡40 Semanas!. 

Leigh me mira indignado, llevándose una mano al pecho y hace como que quiere decir algo pero mejor se calla. Mientras que su novia y yo detallamos a carcajadas.

—Ahora me siento menos mal por asaltar tu alacena.

—Pues creaste a mi sobrino, así que ahora somos familia.

—Salud.—Rosa alza una de las tazas, y tanto el peli negro como yo, imitamos su acto.

Así pasamos toda la mañana, entre carcajadas y planes. Todo en la cama de mis padres. Creo que esta es una de mis mejores mañanas. Nunca me despertaré con tanta alegría y euforia, que me mantenga así el resto del día.