Capitulo 20:La integración.

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Después de varias miradas fulminantes con Doña Delanay, y miradas cómplices con Rosalya. La clase al fin terminó.

Salimos casi corriendo para poder seguir hablando. Dejando un rato de lado el tema de Castiel, le pregunto que se dijo en el auditorio. Hemos decido ir a una zona apartada en el club de jardinería. A pesar que a Rosa no les gusta, es bastante tranquilo para hablar.

—Aun no ha podido terminar de tramitar el fucionamiento. Pero seguro, la semana que viene, ya estarán aquí los nuevos alumnos. Y nos explicaron que debemos integrarlos y bla bla. Deje de prestar atención en cuanto vi que Boris me prestaba atención. Por cierto, necesito que después me acompañes a hablar con la directora de mi condición. Y así poder librarme de una vez por todas de esa clase.—La peliblanca habla frustrada.

—Con esas palabras confirmo que solo te embarazaste para poder evitar su clase.—Le digo sacando un paquete de galletas de su bolso. Ella siempre tiene comida y yo siempre dispongo de ella.

—¿¡CÓMO QUE EMBARAZADA!?.—Nuestro amigo con pelo azul petardo nos sorprende y rápidamente tironeamos de el para que se calle. Se tropieza con las ramas del arbusto de donde sale.

—Alex, cállate.—Rosa exclama. Mientras tanto yo sostengo a mi amigo, tapándole la boca 
—Si que eres bocazas.

—¿Por qué me entero todo de último? No me siento querido. —Nuestro amigo se cruza de brazos y nos ve de forma triste.

—Si no estuvieras de comevergas con Zed y vieras más allá de él, te enterarias. —La cara de Alexy cambio a una de molestia y sorpresa. Mientras su cara se tornaba roja, La peliblanca aquí presente trataba de no reírse mientras se tapaba la boca.

—Ya no hablaré contigo.—Dice mirando fijamente a Rosalya y poniendo su mano izquierda enfrente mío, obstruyendo la vista hacia ellos.—¡ACASO ESTAS LOCA, ROSALYA!¿NO SABES USAR UN PRESERVATIVO O QUE?.

—¡Alexy por dios! No quiero que se entere todo el mundo.

—Deberías haberle pedido consejos a Zed. El si que sabe usar uno. ¿No, Alex?.—Mi tono venenoso pero a la vez juguetón parece colmar la paciencia de Alexy.

—Eso es de envidiosa, ya que nosotros duramos más de tres días.—Dice aún más venenoso. Rompe con su palabra al decir que no iba a hablar más conmigo, y se para más cerca de mi, hasta quedar cara a cara.

—¡Niños ya! Deben parar antes de que digamos cosas que nos hieran en serio. —Rosa pone un alto colocándose entre medio de los dos. 

—Hasta ahora es que me doy cuenta que naciste para ser madre. Eres la mamá del grupo.

—Le sale tan natural. Serás una buena madre.—Me apoya mi amigo.

—¿No se iban a matar ustedes dos?.

—Si nosotros nos amamos muchísimo. Estás loca.—Le digo, fingiendo demencia. Nos reímos por lo bipolares que podemos llegar a ser.

Estuvimos hablando durante todo el receso de todo lo que tuvimos que ir posponiendo por una cosa u otra. Le conté a Alexy como es que empezó todo con Castiel y termino. Con respecto a más detalles de mi vida pasada, no dije mucho, aparte de que no tuve muy buenas experiencias con hombres. No es que no confíe en mi amigo. Pero con rosa tengo mucho más confianza de abrirme que con Alexy.

—Por cierto, Alex. Antes que me olvide...¿Por qué amenazaron tu y Zeta a Castiel?.

El susodicho tose nervioso y justo en ese momento suena la campana para entrar a clase.

—Tenemos que ir rápido con Farres. Que se nos enfada.—Dice como si estuviera preocupadisimo por su clase, cuando siempre se termina durmiendo . Sale corriendo antes de que pueda seguir interrogando.

After Dark.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora