After Dark.

Capítulo 19:Con los idiotas no se habla.

La noche con Rosalya, fue fantástica. Estuvimos hablando de cómo fue mi vida desde que tengo memoria hasta nuestro ultimo día del viaje. De todas mis inseguridades, problemas, parejas, adicciones. De todo hablamos, y toda la noche fue dedicada a mi y al embarazo de ella. También hablamos sobre la visita de amber en la playa. Ella tenía mucha más información que yo, ya que ella no estaba ignorando a todo el mundo.

A pesar de que Alex dijo que esa misma noche viajaban, cuando estaban volviendo, tuvieron que hacer una parada de emergencia a un pueblito cercano a la ciudad y se quedaron ahí a terminar las vacaciones. 

La mañana siguiente de mi pijamada con Rosa, llego mi mamá. Era la primera vez que le presentaba a mi madre una amiga de mi nuevo instituto. Y vi todas las miradas que le lanzo analizandola. ¡Por suerte no mencionamos nada del embarazo!. Ese día estuvo tranquilo y mi mamá no me preguntó mucho de mis vacaciones. Más bien, solo me pregunto sobre mi consumo y mi conducta. Nada de;"¿Cómo la pasaste?¿Estuvieron lindas las vacaciones?". Supongo que es mucho viniendo de mi madre.

Ahora estamos a un día de que inicien nuevamente las clases. Estamos de compras con mi madre y Rosa. Alex no se pudo integrar porque llegaron en la madrugada y se sentía muy agotado.

Le advertí a Rosa que a mi madre no le mencionara nada del embarazo. Ya que podía llegar a tirar un comentario hiriente y despectivo. Sacando eso de lado, se llevan muy bien. Me pregunto si se llevan mejor de lo que nosotras lo hacemos.

Ahora que lo pienso. Siento que con mi madre somos cercanas, pero creo que es solo porque antes ni nos tratábamos. Aunque no la siento como una madre,si no como una amiga. Una amiga con la autoridad de mandarte a un psiquiátrico.

—Lexi, pruebate ese. —Mi madre señala un vestido rosado con flores que está en la vidriera.

—El rosa no es mi color.

—¿Qué dices? Te quedará divino. Pruébatelo. —Rosa respalda a mi madre y me empuja al probador.

Genial. Descubrí que Alexy no es el único compañero de compras más insoportable que mi amiga podría tener.

Voy a hacer caso a lo que me digan,porque ambas me dan miedo molestas. Cuando salgo del probador compruebo que definitivamente no es mi color. Ni siquiera es mi estilo. Parece que voy a vender biblias.

—Es perfecto para la fiesta que se hará en la empresa.

—No estaba informada de ninguna fiesta.

—Ahora lo estás. Ya que el in...Tu padre nobte informó nada, lo estoy haciendo yo ahora.

Toma el vestido, y se va a pagar.

—Siento la tensión. ¿Aún no te ha mencionado nada respecto a eso?.

Niego con la cabeza frustrada al no saber cómo sacar el tema del divorcio. Es más que obvio pero por más obvio que parezca no podemos dejar que el tema esté demás.

Cuando me acerco a mi madre en el mostrador veo unos llaveros y uno de murciélago me llama la atención. Lo agarro y se lo alzo en la cara a mi madre con una sonrisa inocente.

—Y esto también.—Le da el llavero a la cajera.

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Otra vez volver a la rutina. Me despierto con un dolor de cabeza que me hace querer volver a mi dulce cama,pero no puedo. Aún hace algo de calor, así que solo me coloco unos mom's Jeans con una musculosa gris. Y unas sandalias del mismo color. Dejo todos mis rulitos al natural. Y salgo de mi casa sin nada en el estomago.

Siempre se me olvida agregar ese pequeño detalle a mi rutina, que es el desayunar.

Cuando llego al instituto lo primero que veo en la puerta, es a Castiel, quien también llega. Lastimosamente el me ve, y parece que está esperando a que llegue. Pero cuando estoy enfrente suyo, paso por su lado, saludando a Nathaniel que da la casualidad que estaba atrás suyo.