Diéciseis. Encuentro

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Capítulo dedicado a:

-Almi_ uncaldobienhorny que son las que mas votan y comentan

El día de la presentación había llegado, Rebecca me ayudaba a controlar mis nervios mientras nos vestíamos, había tenido que prestarle un vestido ya que ella no tenía ninguno y debíamos vernos mas presentables que nunca.

Una vez que nos pusimos los vestidos la miré y sonreí al notar su cara de incomodidad, se le veía demasiado adorable con el vestido rosa pálido pero aun llevaba el cabello hecho un desastre.

–Déjame ayudarte con el cabello –le dije acercándome a ella.

–Ojalá logres controlarlo, oye ¿Un color mas cursi no tenías o que? –dijo con sarcasmo.

–Tienes que adaptarte, si nos llega mas trabajo debes seguir usándolo.

–Mejor préstame uno azul.

Negué con la cabeza.

–El azul es el color de mi hermana, los míos son el rosa y el verde, o bueno lo eran hasta que comencé a usar pantalones.

–Bien, entonces si no te molesta, usaré el dinero para mandarme a hacer uno color rojo –dijo.

–No me molesta, pero el rojo en vestidos no está de moda.

–Azul entonces.

Nos fuimos una vez que terminé de acomodarle el cabello. Al llegar a la gran casa, nos dejaron pasar a un salón igual de grande y elegante, en donde ya habían varios hombres y mujeres muy arreglados para la ocasión, algunos ya tenían copas en las manos y los meseros repartían mas.

–¿Quién será toda esta gente? –me susurró Rebecca.

–Me parece que amigos y familia están celebrando el cumpleaños del doctor White.

–¿Cómo sabes eso?

–Lo dice ahí –señalé una pancarta que decía "feliz cumpleaños Dr. White", Rebecca comenzó a reírse fuertemente hasta que un hombre le clavó la fría mirada.

–Uy que mal carácter, vamos a prepararnos.

Subimos al pequeño escenario en donde habían varios instrumentos ya dispuestos, después de un rato se nos acercó un muchacho de un poco menos edad que nosotras.

–Hola, soy Arthur, mi padre quiere verme tocar con ustedes –dijo con pena.

–Claro, ¿qué tocas? –pregunté.

–El chelo.

–Bien, amigo, entonces toma asiento –dijo Rebecca y comenzó a explicarle al chico las canciones que tocaríamos.

Después de algunos minutos una mujer se acercó a indicarnos que podíamos comenzar, lo hicimos mientras el festejado ingresaba al lugar entre aplausos y vitores, seguimos con varias canciones mas mientras el festejado se paseaba saludando a sus amigos y familia.

Estaba demasiado inspirada cantando mi canción favorita del momento cuando vi que algunos mas entraron al salón, era un grupo de jóvenes, no les hice caso, pues en ese momento la misma mujer de antes se acercaba a decirnos que podíamos parar a descansar.

Nos bajamos a descansar y tomar algo mientras la gente pasaba al frente a dedicarle unas palabras y brindis al doctor. Me di cuenta que Arthur era su hijo,

Una vez que terminaron, comenzaron a repartir la comida y nosotros subimos de nuevo a continuar el show, vi como el doctor miraba con orgullo a Arthur cuando de pronto Gilbert se acercó a él estréchandole la mano.

Danielle de Avonlea Donde viven las historias. Descúbrelo ahora