𝗛𝗔𝗥𝗥𝗬 𝗣𝗢𝗧𝗧𝗘𝗥 || ❝𝑗𝑒𝑠𝑢𝑠 𝑒𝑠 𝑚𝑖 𝑣𝑖𝑟𝑡𝑢𝑑, 𝑦 𝑗𝑢𝑑𝑎𝑠 𝑒𝑠 𝑒𝑙 𝑑𝑒𝑚𝑜𝑛𝑖𝑜 𝑎𝑙 𝑞𝑢𝑒 𝑚𝑒 𝑎𝑓𝑒𝑟𝑟𝑜❞
[EN EDICION]
Donde Ruby Weasley debe elegir entre su gran amigo Harry Potter y su mayor enemigo Draco Malfoy, el cu...
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La noche apareció y ya se encontraban en el lago de Hogwats y miraron el castillo
—Bienvenido a casa.— sonrió Ron y Harry también.
Entonces de repente el auto empezó a enloquecer.
—¿¡Otra vez?— se quejó Ruby para después gritar con ellos ya que se acercaban aún más a la escuela. Ron intentaba tener el control pero no podía.
El auto dobló y empezó a bajar.
—¡Sube, sube!— gritó Harry.
—¡No está respondiendo!— Ron apretaba con sus pies y no lograba nada. Harry lo ayudó pero fue en vano.
—¡Arriba! ¡Cuidado con ese árbol!— señaló Ruby.
Ron sacó su varita y apuntó.
—¡Alto!— exclamó repetidamente pero su varita se partió y se horrorizó.
Gritaron al chocar contra el árbol y se quedaron estancados allí.
—¡Mi varita! ¡Mi varita mágica!
—Agradece que no sea tu cuello.— Harry rió al escuchar a Ruby. El auto se movió bruscamente.
—¿Qué pasa?— chilló el pelirrojo.
—No lo sé...
Entonces una rama gigante comenzó a golpear el auto. Gritaron de nuevo. Los vidrios se rompieron y el auto estaba aplastado en algunas partes. Por suerte el árbol después de eso los soltó y cayeron al suelo.
Pero parecía querer más.
—¡Arranca!— ordenó Ruby y Ron le hizo caso. Encendió el auto y se alejaron del árbol.
Suspiraron y las dos puertas se abrieron automáticamente. Soltó a Harry quien cayó al césped lejos del auto, luego a Ron y después a Ruby. El baúl se abrió y tiró todas las maletas. Harry se levantó rápido y el coche lanzó a sus manos la jaula de Hedwig y luego la de Scabbers.
—¡Scabbers! ¡Estás bien!— sonrió Ron.
Ruby se levantó y se sacudió la ropa. Cerraron las puertas del auto y se empezó a ir.
—¡El auto!— lo persiguieron y salieron hacia la parte trasera donde estaba el bosque. Se quedaron quietos mirando como desaparecía entre los árboles.
—...Papá va a matarme.— Ruby miró a su hermano preocupada.
—Y mamá también.— puso su mano en su hombro comprensivo.
—Tranquila, Ru. Diremos que fue culpa de nosotros tres y listo.— la calmó Harry mientras volteaban y caminaban hacia sus cosas.
—¿Nosotros tres? Solo ella.— llegaron a sus maletas y sus mascotas y los agarraron.
