Rivales - Marcanne

Capitulo 22

Septiembre

Un largo verano, sesenta y dos días en los cuales se habían divertido con sus amigos, y como no, Anne Boonchuy había interrumpido en sus pensamientos cada vez que podía.

Marcy había planeado olvidarla, pero, ¿Cómo hacerlo? Solo podía pensar en su beso, la atormentaba todos los días y en las noches soñaba con él. Sus labios, su sabor, su tacto, todo seguía en su memoria y lo añoraba aún más, pero sus amigos siempre le recordaban que Anne tenia novio y que, en todo caso, jugando con ella.

Marcy sabía que tenían razón, pero, la forma en que Anne la había besado, era diferente. Igual le alegraba que ahora su amiga Maddie no pudiese reñirla, ya que ella también estaba colada por la capitana del grupo de las plásticas, Ivy.

Cuando algunas de las dos caía en depresión siempre se consolaban entre ellas, Maddie durante el verano lloró varias veces y pasó la noche en casa de Marcy, las dos juntas mirando películas románticas y comiendo helado mientras se abrazaban. Marcy amaba a Maddie y Maddie a ella, sufrir de amor por unas idiotas había fortalecido aún más su amistad. Terri lamentaba el momento en que sus tres amigas cayeron rendidas por unos idiotas, Sasha no podía evitar hablar del defensa tampoco. Estaban en el carro de Percy, hablando tranquilamente, y listas para su primer día de clases. Maddie estaba nerviosa, pero tenia en claro que iba a ignorar rotundamente a Ivy.

—Te apuesto que al final del día, está hablando con ella—Le dijo Sasha a Terri y los dos apostaron.

—Pues perderán, no le voy a hablar. Está decidido, la superaré—Dijo Maddie muy decidida desde el asiento trasero, junto a Marcy, Sasha estaba de copiloto con su hermano.

—Descuida chica. Cuando tú superes a Ivy, será el mismo día que Marcy deje de babear por Anne—Dijo alegremente Percy, causando las risas de su hermana y Terri, las otras dos no estaban muy felices.

Marcy bufó, frustrada. Ella también tenía su lucha interna, ya que después de dos meses del beso compartido con Anne, la iba a volver a ver. No estaba segura de sí la castaña actuaría como si nunca hubiese ocurrido o se vengaría de ella, haciéndole la vida imposible. Llegaron hasta el estacionamiento y se bajaron del coche. Maddie dio un portazo, aún furiosa, mientras sus amigos reían de su reacción.

—Vamos. Maddie. No te enojes—Le decía Terri colgándose de su cuello y Maddie lo ignoró.

—Mars, ¿vamos entrando?—Preguntó su amiga con una cálida sonrisa, ignorando por completo a Terri, quién chillaba.

—Claro—Respondió Marcy y los cinco comenzaron a caminar hasta la puerta.

Ahora, Marcy tenía dieciséis años y estaba lista pera superar este año escolar, pero para lo que aún no estaba preparada, era para Anne. Y allí estaban.

—Mierda—Murmuró antes de detenerse a unos pasos de la entrada, Sasha siguió sus ojos y también la vio.

—Tendrás que pasar a su lado de todos modos—Le dijo en un susurro mientras los cinco veían a Anne.

Junto a los mesones de piedra estaba el grupo de Anne, allí estaba ella, hablando con una amiga y se veía increíble. Su cabello estaba suelto y un poco más largo y había dejado de amarrarse el pelo dejando su ver su hermoso pelo castaño al fin suelto. Llevaba unos jeans de mezclilla y una camisa gris manga larga que dejaba ver su abdomen. Anne sonreía alegremente y la cabeza de Marcy estuvo a segundos de sufrir un cortocircuito. Estaba hermosa y Marcy sentía las piernas temblar, la chica hablaba con una amiga sentada en la mesa y parecía no haberla visto aún.

—Cierra la boca, que estas babeando—Se burló Terri mientras Sasha y Percy se reían.

—Cállense—Les dijo, molesta, viendo como Maddie buscaba a alguien en el grupo, fue hasta donde ella y la tomó del brazo—No la busques, Maddie. Es mejor evitarla.