Capitulo 40

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El lunes estaban en el aparcamiento de la escuela escuchando los gritos emocionados de Maddie, la azabache recostada en el capo sólo podía sonreír.

—¡¿Comprenden?! Me invitó a una cita, una de verdad ¡No lo puedo creer!-? —Dijo feliz mientras se colgaba del hombro de Sasha, ella también parecía feliz por su amiga.

—Yo también tengo una cita con Alex—Confesó y los demás la felicitaron.

—Yo fui a visitar a Sprig en su casa—Pero claro que todos sabían que en parte estaba feliz porque había pasado tiempo con Anne.

—Terminaré viviendo con gatos—Se lamentó Terri por la falta de emoción en su vida amorosa.

—No creo, chica. Sabes, un chico del club de atletismo no quita los ojos de ti—Susurró Sasha y Terri le restó importancia.

—No importa, no quiero sufrir como ustedes. Ahorita estarán felices, pero hace meses lloraban como locas—Dijo y sus amigas le dieron la razón, el amor era una gran montaña rusa.

—¡Dios, Marcy! Aún no me lo creo—Le susurró Maddie a su amiga mientras las otras dos hablaban—.Lucía tan adorable mientras me lo pedía, estaba nerviosa y todo—Contó con la cabeza en las nubes.

—Supongo ¿Y a donde te llevará?—Preguntó, riendo por la emoción de su amiga.

—Dijo que era una sorpresa—Respondió emocionada.

—Puede que te sorprenda—Aclaró dejando a su amiga con la duda, pero cuando preguntó se hizo la desentendida.

Estuvieron todo el día perfecto, solo que Anne estaba molesta con Marcy por lo de la otra vez y se lo demostraba ignorándola, aunque a la azabache no le pasaba por alto que la viera de reojo. Andrias también la veía con enojo, pero la ignoraba mientras iba de la mano con su novia, aunque no los había visto besarse y Marcy estaba feliz. A la quinta hora estaba en el pasillo, yendo a clases, y escuchó a alguien que la llamaba, volteó tan brusco que le dolió el brazo roto, pero intentó disimular el dolor.

—Rarita, te estaba llamando ¿No escuchas?—Le dijo Ivy, aunque de una forma bromista, no había desprecio.

—Mira, señorita. Yo estaba distraída yendo hacía mi clase, creo que deberías hacer lo mismo—Le dijo revolviéndose la nuca con la mano.

—Y sobre todo yo te voy a hacer caso—Dijo rodando los ojos y tomando a Marcy del brazo, para apartarse de los estudiantes que caminaban por le pasillo—.Oye, tengo que decirte algo.

—Sí, ya vi, Maddie estaba muy emocionada hoy—El rostro de Ivy pareció iluminarse.

—En Verdad?

—No paraba de brincar, me recuerda aquella vez que se tomó cinco litros de cafeína—Dijo riendo y recordando ese día, fue muy divertido.

—Me imagino, pero ahora el problema es que hay un rumor, que dijo uno de los de primero—Sus ojos cafés estaban repletos de ansiedad y preocupación—.De que casi besas a Anne ¿Es cierto?

Marcy se sonrojó de pies a cabeza y eso fue la respuesta.

—Supongo que sí—Dijo un poco asustada.

—¿Cómo...cómo...quién?

—Hasta ahora sólo pocos lo sabemos, pero los rumores se riegan rápido muy rápido, Andrias podría enterarse—Dijo observando la cara pálida de la azabache, suspiró y estaba dispuesta a arriesgarse—.Mira, Wu ¿Tú estás enamorada de Anne?

Marcy no respondió, ya que escuchó unos gritos y vio con horror como los ojos de Ivy se abrían.

—¡WU!—Dios, Marcy ya iba a comenzar a odiar su propio apellido, eso pensó cuando escuchó la voz repleta de odio de Andrias.

Rivales - MarcanneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora