El primer mes de clases tenía a Marcy loca. Le iba muy mal en ingles y pensaba que suspendería el próximo examen.
Sus días en el colegio ya tenían una rutina:
Llegaba saludando a sus amigas, veía a Anne y a su novio besuquearse toda la mañana, agarraba el mal humor. Sus amigos la hacían reír y por un momento lo olvidaba, volvía a ver a la parejita besándose en la tarde y el enojo aumentaba. Finalmente terminaba o en la biblioteca, o mirando a Sasha entrenar. Casualmente, estas eran las cosas que ocurrían exactamente todos los días, lo que menos disfrutaba era el besuqueo de los idiotas, pero creyó que ya debería de haberse acostumbrado.
Llevaba días viéndolos hacer lo mismo he ir agarrados de la mano, aún no comprendía por que seguía molestándole. Ya debería de haberlo superado, pero cada vez que los veía, sentía unas terribles ganas de golpear a Andrias en el rostro. Decidió ignorarlo, no era su problema.
En estos momentos se encontraba mirando a Sasha entrenar mientras estudiaba biología, pero en verdad no estaba del todo concentrada. ¿Cómo podría? Si Anne lucía deslumbrante, dando vueltas en el aire y alzando los pompones, era increíble cómo en tan solo un mes el equipo había mejorado tanto.
Anne Boonchuy. Aquel nombre que seguramente la atormentaría, los dos años que quedaban de escuela. La observaba, su piel era hermosa, su cabello brillaba y su sonrisa le alegraba el día. Sin quererlo, el pulso se le disparó. Era un fastidió cuando le sucedía. Desde el primer año que le ocurría aquello, pero parecía que cada día empeoraba más ¿Por qué? ¿Qué tiene ella que me haga sentir así?, se preguntó, pero no quiso responder con miedo a la respuesta, era absolutamente imposible.
Suerte que era el último día de la semana y no tendría que verla durante dos días, aunque sabía que era mentira, ya que Marcy se sentía ansiosa todos los lunes sabiendo que la iba a volver a ver. Después de un rato, el grupo de chicas se fueron hasta los vestidores, Anne lucía muy atractiva con las mejillas rojas y el cabello sudado revuelto. Esperó a Sasha, ellas irían a la pizzería cerca del instituto.
—¿A quien esperas?—Preguntó la voz de Sasha a su espalda y Marcy soltó una risa.
—A una amiga no más atractiva que yo—Le dio una sonrisa y Sasha hizo una mueca.
—Yo soy más atractiva que tú—Dijo ofreciéndole la mano, para ayudarla a levantarse.
Mientras conversaban y salían del campo, observó cómo Sasha quedó distraída mirando a Alex. Dios, esta chica si que babeaba por él. Solo esperaba que fuera atracción física, ya que así era algo más fuerte sabia que su amiga sufriría, y no quería que ella sintiera dolor.
Bajaron varias cuadras y al llegar a la pizzería vieron que en el aparcamiento habían varios coches, había un convertible azul que se le hizo muy familiar, pero igual Marcy entró con su amiga. El local tenía una pinta exacta a las cafeterías de los años setenta, fueron a las mesas rojas mientras sus amigos les hacían señas para que se sentaran.
—¡Marcy, aquí!—Gritó Terri y ella le sonrió, tomaron asiento y Marcy quedó junto a Maddie, Sasha estaba al lado de Terri y las cuatro comenzaron a hablar. Maddie debía de su batido y Marcy no dudó en robarle unos cuantos sorbos.
—¿Cómo fue la práctica?—Preguntó Maddie, un poco interesada en el tema.
—Bien, bien ¿Por qué, Maddie?—Preguntó Sasha, cruzándose de brazos, y observando a su amiga de forma acusadora.
—Por...nada—Abrió los ojos y comenzó a jugar con sus dedos.
—El punto, es que Sasha estaba babeando por Alex—Soltó Marcy para fastidiar a su amiga, Sasha se puso colorada.
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Rivales - Marcanne
RomanceMarcy Wu comienza la secundaria sintiendo las burlas de sus compañeros, entre un grupo de chicas que la fastidian conocerá a la popular Anne Boonchuy. Comenzará una rivalidad entre ellas, llegando a odiarse a muerte. O al menos eso es lo que ellas p...