Taehyung y seokjin empezaron a salir cuando el omega tenía dieciséis años, cuando creía que no atraía la mirada de ningún alfa, y siempre se consideró afortunado porque Seokjin no era como ningún alfa que hubiera conocido antes.
En primer lugar, Seokjin siempre le dio su espacio y se encargo de cortejarlo correctamente, en lugar de encerrarlo a solas en algún momento y marcarlo a la fuerza. Seokjin le dio la posibilidad de elegir estar con él, cosa que casi ningún alfa hacía, porque ellos eran la cúspide de la pirámide social, por lo que tenían más derechos que los omegas.
En segundo lugar, también le respetaba y jamás le levantó la mano ni usado la voz alfa de forma déspota, no como ocurría con una gran parte de parejas actuales. Taehyung comprendía muy bien cual era su lugar, siendo el esposo ideal y madre perfecta, y mientras cumpliera con ese papel, Seokjin no tenía problema en permitirle lo que quisiera. Las únicas veces que Seokjin usaba la voz alfa era cuando Taehyung no podía controlar su lengua y soltaba lo que pensaba, sin considerarlo dos veces.
Por último, Seokjin era un padre preocupado de que nada le faltaba a los cachorros, permitiendoles caprichos de vez en cuando, aunque tuviera cierto favoritismo por Yoongi. Taehyung se sentía algo culpable de no haberle dado otro hijo alfa a su esposo, pero cuando hablaban de un cuarto bebé, el omega aludía siempre que no se sentía preparado. No luego de los mellizos y Jungkook.
Así que Seokjin, con todas esas cualidades, debía ser comprensivo y empatado con su familia ¿no?
–Necesito que me lo cuenten todo –dijo, una vez Jungkook se calmó en sus brazos, acariciándole el cabello desordenado y dándole un beso en la frente.
Jungkook hipó, en tanto Jimin se sentaba en el sofá y Yoongi hacia una mueca. Los mellizos poco se parecían, en especial porque Yoongi sacó la altura de Taehyung, mientras que Jimin era mucho más alto, pero era evidente que Yoongi era el alfa por su actitud exigente.
–Hoy tenía club de Taewondo –comenzó a explicar Jungkook, levantando su rostro mientra sorbia por su nariz–Así que fui y el profesor nos hizo entrenar en parejas. Me tocó contra Lee Juno el alfa que siempre me molesta, entonces...
Taehyung apretó sus dientes al reconocer el nombre. Lee Juno era un chico de dieciséis años que también estaba en el club de taekwondo, siendo uno de los mejores miembros aunque...
Se supone que los omegas no pueden entrar a esos clubes. Los omegas, según las leyes de la sociedad coreana son delicados, tiernos y frágiles, por lo que deben ser cuidados, evitar entrar a lugares y clubes en los que pueden ser dañados, y dedicarse solo a aprender tareas del hogar junto con la crianza de los hijos.
Sin embargo, existían algunas pequeñas excepciones: Jungkook en este caso, había demostrado un año atrás habilidades excepcionales para el taekwondo, pues el omega se intereso por aquel deporte y comenzó a practicarlo en secreto. Cuando fueron las pruebas para entrar al club, Jungkook fue increíble, llamando la atención del entrenador, y quien le permitió la participación en el taller, pero teniendo la autorización del alfa a cargo, en este caso. Seokjin.
Sin embargo, la respuesta de Seokjin fue un no rotundo.
–Jungkook es un omega –dijo en la cena, cuando Taehyung se lo contó (porque su hijo habló primero con él) –, taekwondo no es juego para él, se hará daño, y eso es peligroso .
–Jungkook es genial –replicó Yoongi, viendo la cara triste de su hermano menor –, El otro día le quite su leche de plátano y me tiro una patada para recuperarla, ¡fue genial papá!
ESTÁS LEYENDO
FOUR SEASONS
FanfictionDonde Tae es un omega típico que solo se dedica a su esposo y a sus hijos. pero su sueño de una familia feliz se rompe cuando ve que ha estado luchando por un amor que ya está rojo desde hace mucho tiempo. Esta obra fue creada en conjunto con @Solar...