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Una ceremonia se celebraba en el más lujoso salón del hotel Cesar's, cada mesa estaba ocupada por las más prestigiosas familias de la industria hotelera y las más importantes que hubiera en Seúl.

—Kim NamJoon, ¿es su plena voluntad casarse con Kim SeokJin mediante su derecho como ciudadano de este país? -preguntó el juez que presidía la ceremonia.

—Sí - contestó sin más NamJoon

—Kim SeokJin, ¿es su plena voluntad casarse con Kim NamJoon mediante su derecho como ciudadano de este país?

En las facciones delicadas de castaño se veía la duda, giró la cara para ver a su padre y este asintió para que diera una respuesta afirmativa.

—Kim SeokJin, ¿es su plena voluntad casarse con Kim NamJoon mediante su derecho como ciudadano de este país? - repitió el juez.

—¿Qué rayos haces? Estuviste de acuerdo en esto, ahora acepta - NamJoon lo dijo en un susurro apenas perceptivo para Jin

—Sí, es mi voluntad.

—Por el derecho que el estado me concede, los declaro esposos, pueden besarse.

Ambos se quedaron quietos un momento, solo observándose, NamJoon tomó las mejillas de Jin posicionado sus pulgares en los labios y se acercó, los invitados aplaudieron, los padres de ambos chicos los veían conmovidos y sorprendidos, pues a vista de todos, era un beso dulce y sutil, pero lo que no sabían era que los dedos no permitían el toque de sus labios, así que era una farsa muy bien disfrazada.

Sí, NamJoon y SeokJin se habían casado para hacer a la empresa JJ-KIM la más importante y poderosa de todo Seúl, no era un matrimonio convencional, pues hace apenas un par de años la ley había otorgado el derecho al matrimonio homosexual, y los señores Kim no desaprovecharon la oportunidad de casar a sus hijos, SeokJin sabía su orientación sexual desde que tenía 11 años, pues había experimentado su primer amor platónico con su mejor amigo, YoonGi, cuando se confesó a los 15 años, Jin esperaba un puñetazo y que YoonGi se alejara, sin embargo no fue así, él le dijo que le atraían las mujeres y los hombres por igual, pero que a Jin lo veía como su mejor amigo, así que comprendió y le ayudó a Jin a experimentar cada etapa permitida en la adolescencia, así que YoonGi fue su primer amor, su primer beso, su primera follada y su primer imposible.

En cambio NamJoon se proclamaba heterosexual, en todo el bachillerato había tenido más de diez novias, pero una cantidad envidiable de mujeres con las que se acostó en cada oportunidad que se presentaba, ya fuera en una fiesta o en la misma institución educativa, era conocido por los profesores y directivos lo que hacía, pero nunca recibió represalias porque el señor Kim, su padre, era un activo donador para con la escuela y él era el mejor estudiante.

NamJoon se separó y aunque no hubo nunca un contacto más allá del toque de sus manos, Jin estaba totalmente sonrojado, sonrío para NamJoon pero este mantenía una cara seria y así se giró para recibir las felicitaciones de personas que no conocía, el padre de Jin se acercó y le dio el abrazo más fuerte que recordaba desde sus 13 años. Los padres de NamJoon lo abrazaron del mismo modo y le dieron la bienvenida a la familia, los tres mayores estaban felices, pues no sólo habían afianzado la posición de la empresa, sino que habían podido convertirse en familia, el sueño de cuatro amigos visto hecho realidad solo por tres.

Y así, como algo inofensivo y alegre para los demás, se iba a convertir en un calvario para Jin.





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