METEOROS || •NAMJIN•

5

Jeon llevaba una hora fuera de la casa de los Kim, las llamadas iban directo a buzón y los mensajes no le llegaban a SeokJin, decidió marcar el número de Wang, el secretariado de NamJoon y pedir ayuda, este le pasó directamente a su jefe;

—Dime, Jeon, ¿qué se te ofrece? - dijo el moreno desde el otro lado de la línea

—Señor, lamento molestarlo, pero el señor Jin no me responde los mensajes y las llamadas entran directo a buzón, estoy fuera de su casa, pero no puedo entrar, el contrato decía que después del tercer mes podría tener más acceso a la privacidad del señor, pero en verdad estoy preocupado, él nunca había hecho algo así, siempre ha sido responsable y temo que pase algo malo...

—Cálmate Jeon, Jin debe de estar dentro, te daré la clave, así que revisa que todo esté en orden, cualquier cosa mantenme informado.

NamJoon le mandó un mensaje directo desde su teléfono con la clave de acceso, brío el portón y se dirigió a la puerta principal, en cuanto la ingresó una alarma sonó al ser desactivada, se quitó los zapatos y se dirigió de manera silenciosa por el pasillo, encontrando la sala de estar vacía, siguió caminando y abrió las puertas que estaban una frente a otra, nada, llegó a la cocina y tampoco había nada.

Decidió subir las escaleras y se dirigió a la que creyó era la recámara principal, pero esta estaba vacía, abrió una puerta frente a esta y la cama estaba pulcra, su desesperación aumentaba con cada habitación que encontraba vacía, solo una puerta quedaba al final de un pasillo, era su ultima esperanza, la abrió y no vio nada, pero sí se escuchaba ruido en lo que creía era el baño de la habitación, se acercó a ella y la abrió de golpe, encontrando a un SeokJin sobre el inodoro manteniendo arcadas.

—¡Señor! - se acercó el menor hincándose para estar a la altura de su jefe -¿Se encuentra bien, qué tiene?

—Vamos JungKook, deja de hablarme formal, no soy un... - cortó su regaño, pues una vez más vomitaba un líquido transparente y amargo.

—¿Qué tiene? Se ve demasiado pálido, lo llevaré al hospital.

—No creo que el el hospital puedan curarme la resaca, solo me daré un baño y nos iremos a la empresa y ya deja  de hablarme tan formal Jeon, ya te lo había dicho - intentó ponerse de pie pero sus piernas flaquearon y por poco cae, sin embargo JungKook fue más rápido y lo sostuvo de la cadera.

—No puedes ponerte de pie y quieres ir a la empresa, vamos, yo te ayudaré a bañarte y después descansarás - dijo Jeon caminando a la ducha y dejando su saco a un lado.

—La derecha es la caliente, puedes...

—No, el agua fría será más útil - lo cortó Jeon, tomó una toalla y se la extendió a Jin - desvístete y ponte la toalla sobre las caderas.

—¿Por qué siento que estoy siendo regañado por ti? - preguntó el mayor acatando la orden una vez que el menor se dio la vuelta para darle un poco de privacidad.

—Porque quizás sí sea un regaño, no contestaba mis mensajes y las llamadas no entraban, señor, estaba tan preocupado, menos mal que solo es una resaca.

—Ayer salí con NamJoon y no me percaté de en qué momento murió la batería de mi teléfono, lo primero que hice al despertar fue venir aquí, llevo una hora vomitando y ni siquiera he salido de este estúpido baño, siento haberte preocupado Jeon.

—Ese es mi trabajo señor, mantenerme al pendiente de usted, ya, vamos a ducharlo - dijo tomando a Jin de los brazos y guiándolo, abrió el agua fría y entró junto con Jin.

—Espera, lo haré yo solo, vas a mojarte todo.

—Eso no importa, ya estoy mojado, mejor démonos prisa, no me gusta el agua fría - Jin solo asintió y susurró un "gracias" junto a una leve sonrisa.

Salieron del baño, Jin con una toalla en las caderas y JungKook con la ropa empapada, el castaño le indicó dónde podía encontrar ropa interior y sus pijamas, el menor regresó con un conjunto celeste y unos bóxer, a Jin le dio vergüenza que viera su ropa interior, pero Jeon se veía tan serio y calmado que eso mismo le transmitía, estaba seguro que tomó la mejor decisión al elegirlo como su asistente.

—En el mismo cajón de dónde sacaste los bóxer, en el fondo hay un paquete nuevo, está sellado, estoy seguro que tengo un conjunto deportivo en el armario, cámbiate o te resfriarás, y no, no aceptó una negativa como respuesta.

Después de unos minutos, JungKook regresó con un conjunto color lila, le quedaba justo pero no le apretaba, estaba seguro que a su mayor le quedaba grande, pues Jeon era más fornido que su jefe.

—Te ves bien, Jeon, aunque un poco apretado, yo nado en ese conjunto.

—Gracias, ahora, debes descansar para que la resaca comience a pasar, iré a hacerte avena o algún caldo para que recuperes más rápido las energías - dijo quitando la colcha para que Jin se acostara nuevamente, lo arropó como a un niño pequeño y este solo sonrió en agradecimiento y sin darse cuenta se quedó dormido.

—¿Qué haces con la ropa de Jin? - una voz gruesa hizo sobresaltar al menor, de manera lenta giró encontrándose al esposo de su jefe, el señor Kim NamJoon.

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