Esmerald 𝑫.𝑴. -Traducción

OO5

Malfoy me agarró de las manos y me llevo al centro del salón de baile.

Malfoy colocó sus manos en mi cintura y lentamente nos balanceamos hacia adelante y hacia atrás.

Agarró mi mano y me dió la vuelta, tiro de mis brazos y los colocó alrededor de su cuello, antes de regresar sus manos a mi cintura, Malfoy atrajo mi cuerpo hacia el suyo.

Podía sentir el calor de su piel a través de nuestra ropa.

— ¿Es esa mi varita o estoy feliz de verte? — Bromeó.

No pude evitar soltar una risa y negar con la cabeza ante su comentario.

— No arruines el momento. — Rodé los ojos hacia Draco.

Luego apoyó su frente en la mía.

Sus labios estaban cercas de los míos, se veía tan suaves y aterciopelados, sentir su cuerpo presionado contra el mío se sentía tan mal, pero tan bien.

— Te ves maravillosa en ese vestido. — Malfoy sonrió mientras miraba mis labios.

— No tenías que comprarlo para mí, te lo devolveré mañana. — Le susurré también.

— Es tuyo para quedartelo Courtney.

— Gracias Draco.

Nos quedamos en silencio por un rato, bailando lentamente en círculos, el calor de Draco calmó mi cuerpo.

Por una vez, el latido de mi corazón era suave y tranquilo.

Por una vez en mi vida, estaba libre de preocupaciones y al facilidad.

Me sentí segura en el momento, enredada con Draco mientras lentamente dábamos vueltas en círculos.

La forma en que sus grandes manos sujetaban mi cintura con fuerza y cerca de su cuerpo hizo que las mariposas bailarán dentro de las paredes de mi caja torácica.

Nunca esperé estar bailando lento con Draco Malfoy.

Nunca esperé que nuestros cuerpos encajarán tan bien y bailarán a un ritmo perfecto.

El reloj marco cinco minutos antes de la medianoche, lo que provocó que sonara un fuerte carrillón en toda la habitación.

— ¡Mierda! — Dije separándome de el, el piano dejo de sonar y ambos miramos el reloj.

— ¿Qué? — Draco me preguntó.

— ¡No voy a regresar a tiempo! — Exclamé mientras corría para agarrar los zapatos de Hermione.

— Lo harás si atraviesas el pasillo de Slytherin, ¡Vamos! — Dijo Draco agarrando mi mano, ambos corrimos lo más rápido que pudimos.

Sus zapatos golpeaban ligeramente el suelo mientras me conducía por el salón de Slytherin.

Me dolía los pies descalzos cuando golpeaban el suelo frío, pero era mejor que usar los zapatos pequeños de Hermione.

Nos detuvimos en una puerta que conducía a un pequeño espacio abierto, el patio trasero.

— Atraviesa el patio y pasa por esa puerta. — Señaló Draco y hablo entre respiraciónes. — Sube las escaleras y gira a la derecha saldrás, una puerta debajo de las escaleras de Gryffindor.

— Pero hay un pie de nieve allí. — Dije entre jadeos por aire, señalando la puerta cubierta de escarcha.

— Aquí. — Draco susurró mientras se quitaba los zapatos.

Levanto mi pie derecho y deslizó el zapato en mi, Draco ató bien el cordón, luego hizo lo mismo con mi pie izquierdo, se quitó la chaqueta del traje y la colocó sobre mis hombros.

— Ahora vete, tienes dos minutos. — Me ordenó, asenti mientras salía corriendo por la puerta.

Salte a través de la nieve esponjosa, dios este chico tenía zapatos grandes.

Se sentía como si tuviera unos esquis atados.

Rompí la puerta y subí por las escaleras.

Tropecé en el último escalón y casi me caí de cara, golpeé bien mi antebrazo en los pisos de granito.

Me levanté rápidamente y seguí las indicaciones de Draco que me llevaron a las escaleras de Gryffindor.

También llegué a mi habitación cuando el reloj marco la medianoche.

Hermione ya estaba durmiendo, pateó los zapatos y tire el abrigo de Draco al suelo.

Me quite el vestido y me puse pijama antes de colgarlo en el armario, deje escapar un suspiro de alivio cuando me acosté en mi cama.

Que noche..

La lechuza dejo caer un papel sobre mi pecho.

— Lumos. — Le dije a mi varita.

¿Tu lo hiciste?

Sonrió un poco antes de escribir de nuevo.

Si, te devolveré el abrigo y loz zapatos por la mañana.

Le entrego a rosa la nota y se fue volando.

...

Empaqué la chaqueta y los zapatos antes de que Hermione despertará, los puse en la caja en la que venía el vestido y dejé una nota dentro antes de sellar la caja.

Gracias señor Malfoy.

Rosa se llevó el paquete y regreso rápidamente.

Desperté a Hermione y rápidamente nos vestimos para el día.

— Debes de haber vuelto tarde, no te escuché entrar. — Dijo Hermione mientras entrabamos a nuestra clase de pociones.

— Regresé alrededor de la medianoche, estaba durmiendo. — Dije mientras tomábamos nuestros asientos.

Hoy tuvimos al profesor Slughort en lugar de Snape.

A veces Dumbledore tiene deja a viejos maestros hacer apareciones en una clase.

— ¡Reunirse alrededor! — Nos indico que subieramos al caldero, todos se levantaron de sus asientos y se dirigieron hacia el centro de la sala.

— Hoy hueles mucho a flores y a madera de caoba. — Draco susurró mientras pasaba a mi lado.

Tragué saliva y lo observé mientras se dirigía al otro lado del grupo.

Lo único que nos separaba era el caldero que burbujeaba entre nosotros.

— ¿Puede alguien decirme que es esto? — El profesor Slughort pregunto a la clase.

...

Nota de la traductora: Los pies no es lo único grande que tiene 🌚.