Capítulo 03

699 83 6
                                    

Cuatro años atrás.

— ¡Maldita sea!, ¡Eres una maldita mesera, así que dame lo que quiero, hija de puta!

Mi cabeza estaba de lado, el sonido de la música, además del ambiente que estaba y que los borrachos estaban. Moví mi cabeza, la cual con aquel movimiento mi cabello caía sobre mi rostro cubriendo gran parte.

Tome la liga de mi muñeca amarrando mi cabello en forma de coleta.

El olor a cerveza y el asco de persona: sí algo que me es más desagradable es un hombre borracho es ver cómo acosa a una mujer. Su risa de hizo presente, no pude más. Tome el terrón de cerveza arrojando hacía su rostro, acción que lo sorprendió a él y a sus acompañantes.

Quebré el tarro para así lanzarle los pedazos de vidrio. Empezó a gritar de nuevo, estaba desperado. Me quité el mandil arrojandoselo.

— Si piensas que por estar trabajando voy a permitir que me toques, estás equivocado. Sí buscás sexo veté con una prostituta, idiota.

Salí de aquel bar donde considere mi trabajo, camine por las calles de la ciudad, mientras escuchaba un poco de música, entré a una tienda comprendo un poco de ramen, al pagarlo lo prepararé y me senté frente a la ventana viendo como la lluvía caía, los carros pasaban iluminado la calle.

Tome los palillos moviendo los fideos y tomar un gran bocado, con la sensación de lo caliente que estaba, porqué no niego que tenía algo de frío.

De repente, la vibración sobre la mesa captó mi atención, tome el celular viendo el nombre de quién me llamaba, solté un gran bocado de aire, dispuesta a responder.

— Hola mamá, ¿Cómo estás?— respondí con toda la alegría que quería darle.

— Yoon, mi amor ¿Por qué no me has llamado?

— Perdón mamá, la universidad y el trabajo de medio tiempo me han mantenido bastante ocupada— me justifique, no mentía.

— ¿Cómo va tu dolor de pecho?, ¿Vendrás a casa?

— Mamá, está lloviendo y lo mejor es que me quedé en el dormitorio. No quiero hacerte una molestia, ya bastante tienes con respecto a mi hermano.

— Tu hermano tan solo tiene 15 años.

— Mamá, de verdad. No puedo, yo...

— No quieres distracción, ¿Verdad?— sellé mis labios al morderlos.

Una lágrima salió de mi mejilla. La única persona que me ha visto siendo vulnerable es mamá, ahora, ella se encuentra en una mejor casa, una mejor vivienda y a mí, al tener una beca en una buena universidad mi único objetivo es salir y ser la mejor periodista de la ciudad.

He mercado mi caminó, deseó y sé perfectamente lo que quiero.

— Yoon, hija ¿Cuando dejaras de ser tan ruda y cerrada?

— Mamá— reí— solo tú tienes mi lado sensible, agradece.

— Te amo más que a nadie— escuché la sonrisa que me daba— solo sugería si querías venir. No te preocupes, te dejo y descansa.

Colgó la llamada, mire mi celular dejándolo sobre la mesa de nuevo, suspiré y terminé de comer. Esto era lo que podía tener, en ocasiones extrañaba la comida casera con sabor de hogar y amor. Llevé los fideos y al terminar de masticar, mire hacía la ventana.

Había un automóvil negro.

Presente.

— Jiwi— me puse de pie, caminando quedando frente a mí escrito con mis brazos y piernas cruzadas, aquela chica estaba de rodillas frente a mí.

Mi señor [JJK/MYG]+21✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora