Narrador omnisciente.
Las puertas blancas del hospital se abrieron al par llevando una camilla directamente a cirugía, la paciente era una mujer de veintitrés años de identidad de Kang Yoon. No solo sus compañeros del foro, sino todo el mundo quedó en estado de shock al haber sido testigos de como los disparos sucedieron en la escena. Muchos reporteros estaban al tanto de su trabajo y compañera.
¿Familiar?, ¿Será la primera vez que un familiar llegué a reclamar lo que pasó?, ¿Se conocerá alguien cercano? Era la pregunta más solicitada. Los médicos estaban en la sala de cirugía, teniendo sus guantes de látex llenos de sangre, con sustento adecuado. Extrayendo la bala, por suerte, no perforó ningún órgano.
Kang Yoon se salvó.
Por otro lado, la puerta se abrió de golpe mostrando al pelinegro furioso, los periodistas al verlo se acercaron a él; ¿Cuál es su relación con ella?, ¿Están saliendo?, ¿Usted también vio en vivo lo sucedido? Entre otras preguntas, su única respuesta fue pedir que mantuvieran todo profesional, que su vida privada no tiene nada que ver con la amistad que han formando. Paso entre la gente dirigiéndose a la sala de espera.
No había nadie, ni un alma, o, eso pensó cuando vio una mujer entrar: la cabellera semi negra con blanco llamo su atención, la forma de vestir sencilla, sin embargo, al alzar su rostro noto el gran parentesco con la mujer que estaba siendo operada.
— Disculpa, ¿Quién es usted?— le pregunto, a lo cierto con ternura, curiosidad y presa.
Le sonrió— Mi nombre es Jeon Jungkook.
Narra Yoon.
La pesadez de mis ojos, el olor embriagante y un fuerte cansancio me hizo ver borroso. Pero, a mi mente llegaron todos los sucesos de la última vez que pude estar de pie, los abrí de golpe buscando y analizando el lugar en el cual me encontraba. Una habitación blanca, sábanas del mismo color y el sonido de pit de unos aparatos.
Estaba en el hospital.
Aunque, mi compañero, el camarógrafo. Me paralice al recordar cómo la sangre salía de su cabeza, escurría, mantenía sus ojos abiertos, después fuí yo.
Maldito, hijo de puta.
— Yoon— la puerta se abrió, dejándome ver a mi hermano ingresar, al verme me sostuvo de las manos— ¿Estás bien?
— ¿Qué haces aquí?, ¿Mamá, donde está?
— Tranquila, el hospital nos dio discreción, nadie sabe que somos familiares.
— SeHun, joder, ¿Sabes el peligro que se están exponiendo al estar aquí?— me queje. La puerta se abrió dejando a mamá ingresar.
Aunque, detrás de ella venía un hombre trajeado, su cabello amarrado de media coleta, dejando casi suelto. Al verme me sonrió, mostrándome esa sonrisa con su piercing en el labio.
— Cariño, has despertando, los doctores me han dicho que la operación ha sido un éxito. Solo debes recuperarte— mamá sonaba más que feliz, pero la ignoré, veía al hombre a su lado. Se dio cuenta de aquello— Oh, es amigo tuyo, me ha dicho que ha venido a verte.
— ¿Ya comiste algo?— le dije a mamá y negó.
— Hemos estado aquí contigo desde anoche, no he vamos a dejar sola, hermana— me tomo de la mano.
— Ya desperté, me duele un poco. Pero vayan a comer algo— mire a Jungkook— puedo estar bien sola unos segundos.
— Eres terca...— soltó una risa.
— Mamá.
— Bien, tú amigo está aquí. No pasa nada que te dejemos sola unos minutos— tomo a mi hermano— regresamos.
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Mi señor [JJK/MYG]+21✓
Fiksi PenggemarCuando nos sentimos atraídos por alguien, nuestro cuerpo produce norepinefrina. Cuanto más fuerte es la atracción, más se produce. Eso es lo que nos da ese inconfundible sentimiento de palmas sudorosas, corazón acelerado y pupilas dilatadas. Sin emb...