Sakura 》Sasusaku

❀Dejarla ir✿

Pero solo necesitas la luz cuando se está quemando poco
Solo extraño el sol cuando comienza a nevar
Sólo sabes que la amas cuando la dejas ir

🌸

Utakata era un chico sin duda, en los dos días que levo de conocerlo todo lo que ha hecho es facilitarme la vida, siempre es como si estuviera leyendo mi mente y adelanta todo lo que yo hago.

—¡Buen día, jefa! —exclama entrando a la pequeña oficina que compartimos.

—Ya te dije que no me llamaras así. —contesto intentando no reír.

—Y ya te dije que, con todo respeto, seguiré haciéndolo. —declara sin borrar su sonrisa— Toma, te traje café. —me extiende un vaso que lleva escrito mi nombre con una flor.

—Gracias. —murmuro tratando de no sentirme tan halagada por el gesto— ¿Estás listo para la mejor parte de este trabajo?

—¿No es trabajar contigo? —pregunta en un tono muy parecido al coqueteo. Chasqueo la lengua y niego.

—No, pero esto... —señalo el carrito lleno de sobres y cajas— Si lo es. ¡Vamos!

Dejando nuestros cafés enfriar en el escritorio, empujo hacia la salida al pelinegro mientras él conduce el carro de mensajería. Verlo caminar desde atrás me recuerda mucho a Sasuke, el mismo tipo de cabello: lacio y despeinado, de hecho, ellos comparten un gran parecido, solo podría reconocerlos a distancia por los tatuajes, los cuales Utakata no tiene.

Ahora con Sasuke en mente recuerdo que no lo he visto mucho los últimos dos días, podrá ser porque me he enfocado en apoyar a Utakata y de cierta forma aprovechando la presencia de mi nuevo compañero para no pensar mucho en él y en lo que vivimos.

¿Qué estará haciendo?

¿Seguirá trabajando aquí?

¿Pensará en mi como yo pienso en él?

🌸

La puerta de mi oficina se abre y veo a Suigetsu y Neji entrando buscándome con la mirada hasta que me vieron recargado en mi sofá viendo entre las persianas, las cuales mantenía cerradas.

—Esto debe ser lo más patético que te he visto hacer. —se burla Neji de mí.

—¡Shh! Cierren la puerta o nos verán. —ordeno susurrando sin apartar la mirada de la ventana.

—¿Qué haces? —pregunta Suigetsu imitando mi pose— ¿A quién espiamos?

—¿Ya lo olvidaste? —la mirada perpleja de nuestro amigo peliblanco respondió en lugar de su boca— Piénsalo, ¿a quién más le interesaría espiar en este lugar?

Su boca formó una gran "O", entendiendo y gritando con toda la fuerza que sus cuerdas vocales le dieron: —¡A SAKURA!

De inmediato le arrojé un cojín a la cara sin fallar en mi tino: —¡Cállate! Seguro te escucharon hasta Colombia.

Entre risas ahogadas y quejas entre dientes, se acercaron y se  colocaron a mi lado para espiar justo como yo.

—¿Y por qué la espiamos? —susurrò mi amigo peliblanco.

—Hay un nuevo tipo. —murmuré von coraje.

—¿Tiene nuevo novio? —preguntó asombrado Suigetsu.

—Si somos técnicos, Sasuke y ella nunca fueron novios oficiales. —interfirió Neji y solo rodé los ojos— ¿Quién es el sujeto?

—Lo investigué y al parecer es pasante recién graduado; su nombre es raro, empieza con "U" y según los rumores de las chicas es "súper guapo". —mencioné con mi mejor imitación de chica— Lo que sé con certeza es que se la pasa como lapa con Sakura.