Sakura 》Sasusaku

❀24/seven✿

Todo el día, cada día, son unas vacaciones,
y estamos bien 24 horas los 7 días de la semana.
Todo el día, cada día, todo lo que tenemos que decir
es vive tu vida, 24 horas, 7 días a la semana.

🌸

Las ruedas del carrito sonaban por toda la oficina. Si te asomas por los pasillos podías notar una cabellera rosada yendo de un lado a otro a máxima velocidad. Entregaba la correspondencia a los trabajadores. De eso vivía, entregar el correo. Era una gran compañía en su país, donde jamás imaginó trabajar. En 'Japan Spotlight'. 

Había un gran movimiento cuando se trataba de correspondencia. Todos los días llegaban cientos de cartas, documentos, avisos legales o certificados con permisos y sugerencias para nuevos artículos, entrevistas o publicidad.

El edificio donde se ubicaba dicha compañía no era muy grande, solo seis niveles que se dividían según el área de trabajo. El primer piso era la recepción donde se encuentra Shizune e Iruka, encargados de marcar la hora de llegada de los empleados, visitantes, cobradores, entre otras cosas; también habían algunas oficinas que se utilizaban para atender a patrocinadores y a las personas que solicitaban trabajo. 

En el segundo piso se encontraba la cafetería con mesas, bancas y máquinas dispensadoras de golosinas y agua. La cocina estaba a cargo de Mei, una señora de procedencia japonesa y china por lo cual cuando se enojaba hablaba en chino sabiendo que nadie más le entendería; sin embargo sus sándwiches eran lo más delicioso: doble queso, pan tostado, jitomate, aguacate, jamón, tocino y, para su chica favorita, queso Philadelphia.

El tercer piso es donde verdaderamente sucedía la magia. Estaban los estudios, cámaras, luces, utilería y modelos. Lamentablemente la chica casi nunca pasaba por ahí porque su trabajo no le daba esas excusas pero de vez en vez en sus tiempos libres paseaba en ese piso.

El cuarto piso estaba dedicado a la edición de todos los videos. Muchas veces pasaba por ahí para dejar recados o servir café y entregar sándwiches con jugos.

Llegando al quinto piso y también su favorito. Es donde surgen las ideas, la fuente de toda la magia y también donde se ubica la oficina de la jefa. Todas las oficinas estaban divididas por cubículos y colores. Cada mañana Sakura dejaba en una mesa central sobres de colores que correspondían al color de los cubículos: rojo para los temas amorosos, azul para ropa y accesorios, verde para polémicas y amarillo para celebridades, solo por mencionar algunos. 

Finalmente el sexto y último piso: salas de juntas. Eran diversas habitaciones dedicadas a las reuniones financieras, evaluativas y convivios. Dos de las oficinas se encontraban vacías ya que recientemente la jefa había echado al vicepresidente de puntos de venta y a su secretaria. ¡Oh, claro! Y también en este piso se encontraba la oficina de Sakura Haruno, encargada de correspondencia y mensajería.

Volviendo a la actualidad, las ruedas del carrito sonaban alrededor de la oficina. Sakura tomó un paquete rojo y lo dejó en el escritorio de Sora. Dio vuelra al cubículo y dejó uno amarillo en el escritorio de Rae.

—¿Qué tienes para mi hoy, bonita? —escuchó decir a Choi alzando las cejas. Negó entre risas y le entregó un paquete verde.

—Treinta y cuatro sugerencias, dieciséis solicitudes y... —buscó un pequeño sobre en la parte inferior de su carrito— Tu recibo de luz. 

Él suspiró pesadamente y ella sonrió. Choi era uno de los más antiguos en el lugar, era esa clase de chico con el que puedes perder el control por una noche, ya sea en una fiesta o en convivios, pero a la vez tener una plática muy profunda y amena, claro que cuando se le pasaban los tragos la situación cambiaba y terminaba llorando.