Capítulo 20, Un nuevo aliento

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Capítulo 20

Un nuevo aliento

Con la gran luminaria a poco de desaparecer en el horizonte, Darbel terminaba de retocar la prótesis para Yhei en una fragua improvisada con una piedra amplia y plana junto a una fogata y protegido por un refugio hecho con arcilla roja por Felipe. No era el sitio idóneo para trabajar, pero al menos contaba con el espacio perfecto para calentar el mercario, darle forma con ayuda de su energía y finiquitar el trabajo con el martillo. La prótesis completa eran ocho piezas perfectamente articuladas, y esperaba que los dedos se terminaran de formar con la conexión neuronal y energética de Yhei, pues como el mercario antes de ser metal pertenecía al cuerpo de un ser viviente, conservaba cierta memoria celular lo suficientemente compleja como para permitirse un segundo moldaje, afianzándose de forma correcta al usuario, y llegando a adaptar la anatomía de este mismo si es que no se alcanzó un modelo exacto con la forja. Por esto mismo era que este material era tan codiciado por los forjadores, sin importar la raza, ya que si bien existían otros metales muy exitosos para reemplazar miembros mutilados, ninguno al nivel del mercario.

Darbel abrió la cantimplora y le vació lo que le quedaba de agua para terminar de enfriar las últimas piezas. A continuación ensambló la articulación del codo, la flectó y estiró para asegurarse que el movimiento fuese suabe y fluido, o tendría que con ayuda de una lima de metal o una piedra para afilar quitarle las muescas. Hizo lo mismo con la mano y los dedos, el brazo completo funcionaba a la perfección, tanto así que la articulación de la muñeca permitía flexión, extensión y las inclinaciones laterales, la rotación completa era otra cuestión, pues ese movimiento se afinaría una vez la pieza insertada en la carne y asimilada por el hombre.

Darbel salió de la fragua improvisada y se encontró con Felipe dejando que su caballo alado aterrizara en el antebrazo con el tamaño reducido, para recibir una esfera luminosa del hocico de la criatura con la mano desocupada que enseguida se la llevó a la cabeza y la absorbió al apoyarla contra su sien. Él cerró los ojos como si estuviese asimilando la energía que acababa de introducirse y segundos más tarde los volvió a abrir descubriendo al forjador contemplándolo con expresión desconcertada.

-Ah, Darbel. Veo que terminaste la prótesis.

-Sí... Ya está lista.

-Maravilloso. ¿Y qué tal quedó?

-Examínala por ti mismo -dijo Darbel extendiéndole el miembro artificial.

El caballo alado volvió a ser una simple figura de arcilla y tras guardarla en el saquillo se acercó para analizar el brazo hecho con mercario. Lo sostuvo con ambas manos y lo palpó en toda su extensión, también lo fue presionando en diferentes puntos como si estuviese buscando algún punto frágil en la pieza, punto que no llegó a encontrar. Movió las articulaciones, pese a que el brazo estaba hecho de metal ostentaba de movimientos suaves y fluidos. Sin duda la reputación del forjador quedaba manifestada en aquel trabajo tan formidable.

-Me sorprendes. Te tomaste muy poco tiempo para armar esto, y el resultado es impecable, una verdadera obra de arte.

-Coño, Yhei necesitaba esta vaina con urgencia, era lo mínimo que podía hacer por él. Además trabajar con mercario facilita enormemente las cosas.

-No me cave ni una duda. Bueno, en realidad no tengo la más mínima idea de los tiempos de forja con metal, mi arte se centra únicamente en las bellas estatuillas de arcilla.

-Claro -musitó Darbel sopesando la siguiente pregunta-. Felipe, una pregunta, ¿qué te metiste en la cabeza hace un rato?

-Ah, eso. Era un recuerdo efímero. Resulta que como puedo dar vida a mis criaturas con mi energía también puedo hacer exploración. Esto me conlleva un desgaste considerable, pues tengo que traspasar una parte de mi esencia espiritual a la criatura. Gracias a esto es que puedo hacer que cualquiera de mis creaciones me traiga encerrado en una esfera hecha de esa parte de mi esencia todo lo que vio en el recorrido, o al menos lo más relevante. Es algo un poco complejo.

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