ᴅɪꜱᴏʀᴅᴇʀ ⇝ᴊᴇᴏɴ ᴊᴜɴɢ ᴋᴏᴏᴋ

CAPÍTULO 28

Jihaein

─ ¿Todo bien cielo? ─ Tae me escanea detalladamente viendo mi expresión triste ─ ¿Pasó algo?

─ No, está todo bien ─ le aseguro.

Me mira no muy convencido pero al final solo decide creerme, la fiesta está en su punto máximo, la música, el baile, los gritos de las mujeres cada vez que Jimin entra a bailar no se hacen esperar.

Todos están felices...

─ No pensé que realmente me recibirían así ─ comenta mi ahora novio mirando todo a su alrededor ─ Se siente bonito ─ culmina dándome una de sus bonitas sonrisas.

─ Tú eres bonito ─ digo sonrojándome al instante y me arrepiento de haber dicho eso en voz alta.

Él por su parte se voltea y levanta una ceja mirándome fijamente ─ me pone muy nerviosa que haga eso ─ cuando está a punto de tomar mi rostro entre sus grandes manos un carraspeo resuena a nuestras espaldas, Tae se separa de mí y yo también hago lo mismo.

─ Oh lo lamento ─ aún sin dar la vuelta sé perfectamente de quién se trata ─ No quise interrumpirlos ─ la voz grave y un poco fastidiada de Jeon me tiene con las piernas temblando de miedo ─ Por favor pasen por aquí por favor.

Observo cómo el rubio de su amigo se adelanta a llevar a Taehyung mientras conversan de temas de la empresa, yo me quedo atrás con las manos sudorosas y las piernas tembleques, puesto que Jeon me está mirando como un depredador que está a punto a comerme ahí en ese mismo momento.

La profundidad con la que me observa me hace tomar respiraciones constantemente, aprieto las manos en el vestido cuando va acercándose, solo sonríe ya que hay muchas personas aún en nuestro entorno.

Me hace la señal de seguirlo y sin rechistar lo hago, camino detrás suyo tratando de distraerme cada vez que veo los cuadros que pasan a medida que cambiamos de ambiente. Uno en particular me llama la atención, se trata de un árbol de cerezos, bastante frondoso y aquí viene mi parte favorita, el precioso fondo con tonos naranjas representan perfectamente la belleza del atardecer, realmente es muy bonito, toda esa tranquilidad se va a volar cuando siento que está detrás mío, tan pero tan cerca que percibo claramente sus respiración que choca con mi coronilla, me tenso y sigo por aquel pasillo, que ahora que presto más atención está con muy poca iluminación.

Llegamos y la gran cantidad de personas ubicadas es sorprendente, logro visualizar a mi lindo Tae, está parado justo en el centro de todos ellos, luce sonriente conversando animadamente con unos jóvenes que por lo visto son los amigos de Jimin, se ríe de momentos y con esto nuevamente logro confirmar lo mucho que me gusta verlo así, un moreno bastante alto se toma el atrevimiento de rodear sus hombros y abrazarlo, él no dice nada solo mantiene su linda sonrisa cuadrada, otro chico de cabello morado empieza a reírse de forma peculiar haciendo que me contagie a mí también.

Su risa limpia vidrios.

Él se la está pasando muy bien con aquellos chicos, lo miro enternecida pero tan rápido como lo hago rápido borro mi tonta sonrisa al ver al pelinegro que yace recostado en una de las columnas bebiendo una copa de vino blanco, sus ojos no me quitan la mirada de encima y de paso se da el lujo de alzar la copa en mi dirección, la toma y termina lamiéndose los labios provocativamente a la vez que juega con el piercing de su labio inferior.

Ay no.

Rápidamente desvio la mirada y me entretengo mirando a una jovencita bastante linda, cabello rubio, cuerpo exuberante, curvas sinuosas y piel pálida, lo más curioso es que ella no quita la vista de Jungkook, sus ojos vivaces siguen cada movimiento que hace.