Caminos sin señales, luces siderales, espectros flotantes que vagan incesantes, sólo es el humo, sólo es el reflejo de un amigo vagabundo.
Aún siento el viento, aún se acelera mi ritmo, no pierdo el tiempo porque parece escrito, sabes tú hacia donde voy?
Pareces estar dormido, en la cajuela aún hay espacio, en la música suena el reparto, como un disparo, como flores de verano.
Las luces pasan sin más, naranjas pintadas, rojas y verdes, amarillas y blancas, ya el lugar me da igual, ya las salidas y llegadas sin nada más que decir o hablar, al final me encuentro manejado, solos tu y yo, porque no te amo pero aún así te necesito, jamás te lo dije y aún así nunca te fuiste, mi viejo amigo el señor azul.
Sólo conduzco suave, sin mareas y sin transe, perdido en la incredulidad y sometido por la inestabilidad, parezco estar sedado, un poco confundido, porque ya no razono ni olvidó, ya no se a donde miro.
Sólo soy el ser humano que perdió tan vagamente, que sufre lo intermitente de las cosas de la gente, que intenta comprender de quienes hablan y a quienes ven es tan solo mi viejo auto, música jazz y un destino, porque ya para que regresar, sólo un cigarrillo mas porque hoy muere el viejo ser, que en paz descanse el viejo quien.
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Historias de una noche
RandomEn la noche, un joven que entre sus sábanas no concilia el sueño queda viendo hacia la oscuridad de su habitación, mientras mas la mira más su mente empieza a cuestionarse sobre si misma, sobre lo que pasa, y lo que pasará, su mente indaga en lo más...