Dead Language | Wandanat

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In medio Virtus

No paraba de reír, trataba de avanzar su trabajo, pero simplemente su novia no la dejaba, no se quejaba al respecto, la había tenido algo abandonada haciendo exámenes y presentaciones para sus últimas clases.

– Nat, sabes que cualquier otra noche no te molesto, pero es nuestra noche, ambas estamos libres para abrazarnos y darnos un poquito de amor – Emitió a horcajadas encima suyo, estaba completamente abrazada a ella aunque sentía como su novia veía por su hombro la laptop que estaba en la mesa del desayuno que le llevaba a la cama y tecleaba mientras reía ligeramente por lo que decía

– Pero, bella, yo te amo – Acarició su espalda con cuidado

– Préstame atención – Empezó a besar su cuello – Dormí una siesta para este momento – Susurró poniendo su rostro enfrente del suyo

– Déjame enviar unos últimos emails y soy toda tuya, bella – Besó su mejilla y volvió su atención a la computadora

– Ya eres mía – Sonrió besando su mejilla – Hazme caso... – Volvió a besar su cuello – ¿No me amas?

Natasha rio levemente, le encantaba cuando Wanda se ponía consentida y quería que todo se trate sobre ella, estaba tan enamorada y pérdida – Claro que te amo, bella – Suspiró terminando lo que hacía, pero no diciéndole aún

– ¿Mucho?

– Tanto que siento que mi corazón va a explotar – Afirmó apoyándose en la cabecera de la cama – Te adoro – Acarició su espalda baja con ambas manos – Nunca había tenido tanto en tan poco tiempo – Sonrió

– Ni yo – Mordió su labio inferior viéndola a los ojos – Me encanta estar al lado tuyo todos los días, adoro dormir contigo y escuchar tu voz antes que la de nadie más – Juntó su frente a la de ella – ¿Que quieres hacer esta noche, mi alma? – Suspiró – A parte de cenar y ver películas, pedí nuestro favorito, no me gusta eso de transformarnos en la pareja que se convierte en la masa amorfa hablando por ambas, pero me gusta a la vez

– A mí igual – Rio levemente ante lo rápido que hablaba – Pero el plan para esta noche está bien, me gusta sólo estar en la sala, que me des de comer en la boca, abrazarnos y besarnos un poco – Acarició los muslos de su novia – No quiero hacer nada más que no sea tenerte cerca – Afirmó

La comida llegó y se acomodaron en el sofá, Wanda le daba de comer a su novia en la boca mientras veían una película, cuando la salsa de soya se escurría por su barbilla, la castaña la lamía dejándole un beso, terminaron de comer y los besos volvieron a ser necesitados.

Natasha estaba a horcajadas sobre su novia, besando su cuello, sentía las manos de ella recorrerla y apretar justo donde quería, Wanda bajó las tiras de su negligé y aunque a veces la tocaba por debajo, dada la calentura del momento, sabía que esa vez sería diferente, la castaña no se estaba restringiendo ni un poco.

– Me encantas, Nat, no sabes lo mucho que me excitas – Susurró entre besos – Quiero tenerte toda para mí... – Jadeó apretando sus pechos, bajó ese negligé que la tentaba día con día, empezó a chuparlos y lamerlos, mientras escuchaba los suspiros de placer de su novia – Quiero hacerte el amor, mi Nat – Los dejó rojos, continuó tocándolos resbalando sus pezones entre sus manos con la lubricación de su saliva, subió la boca a la de su novia y empezó a besarla de nuevo, sabía que Natasha estaba sobre su límite – Te amo – Afirmó entre besos bajando su mano a la ropa interior de la rubia, sintió su centro húmedo, sonrió acariciándolo con cuidado