Dead Language | Wandanat

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Citius altius fortius

Habían ido el fin de semana a un hotel todo incluido, a la ciudad, querían disfrutar antes de la graduación de Wanda, ya que después del verano tal vez no tengan tiempo para hacer algo así, era especial lo que vivían, Natasha se dejó convencer, pues nunca habían podido salir de casa como una pareja normal, ese pequeño viaje les daría la oportunidad.

Habían pasado un día extraordinario, no preocupándose en si podían o no estar juntas, tomadas de la mano, darse besos o actuar como una pareja, era realmente increíble, a la noche optaron por una cita en un restaurante del hotel, estaban en unos vestidos preciosos de noche, fue una cena estupenda, se terminaron una botella de vino y subieron a su habitación, entre risas y besos.

Las manos de Wanda no paraban de acariciar el cuerpo de su novia, pasaba las uñas por sus muslos mientras la besaba y mantenía cerca, bajó la boca a su cuello chupándolo y mordiéndolo, sentía las manos de Natasha apropiarse de su cuerpo.

– Nat, mi alma... – Suspiró la castaña en su cuello subiendo sus besos a su boca – Estoy intentando controlarme, pero me tocas de una manera en la que... mmmm... – Mordió su labio inferior sintiendo como Natasha la atrajo de las caderas con fuerza a ella

– Bella, estoy lista – Susurró en su oído – Totalmente lista para ti, quiero que me hagas el amor esta noche, Wanda, lo necesito... te necesito...

– Nat... – Besó su mejilla dejando los labios ahí – No tenemos que apresurarlo, yo puedo esperar

– Pero yo no y quiero tener mi primera vez contigo, todo contigo – Jadeó

– ¿De verdad? – La tomó de las mejillas acunando su rostro

– Compré este vestido para que tú me lo quites... – Susurró viéndola a los ojos

Wanda sonrió ligeramente acercándose más a ella – Okay, lo haremos a tu modo, pero Nat... si quieres parar o algo no te gusta o lo que sea, nos detendremos ¿Sí? No tengas miedo o vergüenza de decirme nada

– Confío en ti, sé que no me estás quitando nada y que puedo decirte lo que sea... así que... hazme el amor, Wanda Maximoff – Decía con la mirada oscurecida

La castaña no respondió nada sólo besó sus labios, y acarició sus brazos con una sonrisa, nunca había visto desnuda totalmente a Natasha, ni viceversa, así que estaba nerviosa, era cierto que tenía más experiencia, pero eso no quitaba que era su primera vez con su primera novia, también era nuevo para ella, pero quería proporcionarle calma y seguridad.

Las manos de Natasha recorrieron la figura de su novia enfundada en ese vestido rojo que resaltaba cada parte de su cuerpo, subió las manos a su espalda en busca del cierre y para darle más confianza de que en verdad quería hacer el amor con ella lo deslizó hacia abajo sintiendo su cálida piel, mientras sus bocas no paraban los besos, sintió la sonrisa de Wanda encima de sus labios, ella tomó el labio inferior de la castaña entre los suyos retomando el beso sintiendo como la tela caía al piso, acarició lo que podía con sus nudillos delicadamente, se sentía nerviosa, pero segura de lo que pasaría.

Wanda sonrió al tomar la cremallera del vestido de su novia, se deshizo de el como ella quiso, cayó y caminó con Natasha entre besos a la cama, la recostó poniéndose encima suyo, la tomó de la cintura subiéndola hacia la cabecera, bajó sus besos a su cuello, acarició sus muslos poniéndose en medio de sus piernas, se alejó un poco para quitarse el brasier y estar en igualdad de condiciones, Natasha vio sus pechos ser liberados, con los ojos pidió permiso para poder tomar una con la boca, Wanda aceptó mordiendo su labio inferior sintiendo como empezaba a chuparla mientras la veía a los ojos, tocaba su otro pecho con tanta delicadeza, dejó sus senos rojizos después de unos minutos.