¿Cómo es que tú?

Capítulo 26

-Hola Vero, llegue un poco tarde, disculpa.
-no te preocupes, yo apenas llegue hace 3 minutos, más o menos.
-si me preocupo...un poco pero sí.
-bueno, antes de empezar a contarte todo, debo de advertirte que mi mamá no sabe nada de esta reunión entre nosotras.
-¿Por qué no le dijiste?
-mira que si te queda el papel de madrastra...lo hice porque sé que les será difícil verse y más porque mi mamá ya le conto a mi papá que... tienes otra novia.
-¿Qué hizo que?, ¿Ricardo ya lo sabe?
-sí, ayer hablaron y admitió lo que sea que ustedes tienen, pero le dijo que ustedes ya no se veían, que ya no hay nada entre ustedes.
-¿el se quedo tranquilo con esa explicación?
-si, pero hay otro detalle, no se divorciaran hasta después de la boda de mi hermana.
-¿Qué?
-eso mismo.
-es malo, pero no tan malo lo que está pasando, ahora sí, no sé qué pasara.
-ok, en tres meses pueden pasar muchas cosas, pero... no sabes si serán buenas...
-o malas.

Aunque Carolina apenas comenzaba a conocer a Verónica, sabe que está tratando de buscar una solución a todo lo que ha estado pasando. Aunque, ni siquiera Luz tenía idea de cómo encontrar una solución, de hecho, a cualquier persona que le preguntaran, le seria algo imposible encontrar respuestas.

-creo tener una idea
-¿Cuál es tu idea Vero?
-mi hermana y su prometido darán una fiesta, una vez al mes hasta el día de su boda
-¿despedida de solteros?
-no, de hecho, es más como buscar una excusa para festejar desde antes... el punto es que irán familia y amigos, obviamente mi mamá ira, tu puedes ir con Leonor y así mi papá te vera un poco alejada de mamá y yo puedo encontrar la forma, lugar y hora perfecta para que se vean por lo menos unos minutos.
-puede funcionar, pero tengo una duda, ¿Cuál seria el pretexto para que yo este en esa fiesta?
-¿estas en la misma universidad que yo, no es Así?
-sí, así es.
-bueno, te conocí un día en la cafetería y nos caímos bien, así que te invite a la fiesta y mirarte ahí con Leonor para despistar.
-mucho mejor la idea.
-así, todos estaríamos contentos.
-¿es serio no te provoca algo mi "lo que sea" con tu mamá?
-sabes, desde hace años no la veía sonreír así, yo ya sabía un poco de la historia de ellos, pero no pensé que de verdad, ella no se sentía tan feliz como aparentaba.
-a veces las cosas no son como las vemos.
-eso es cierto, pero lo que se, que si es como lo veo, es que mi mamá encontró una persona con la cual sentirse feliz, gracias por sentir lo que sientes por mi mamá.
-la quiero mucho, y trato de entender siempre su posición, se que ha sido fácil nada, pero quiero esta ahí, apoyarla en lo que me pida.
-deberías de pedirle ser tu novia.

¡¿Carolina había escuchado bien?! Verónica, la misma chica que tiene sentada frente a ella y que es hija de Luz, le había dicho que le propusiera a Luz una relación, eso era lo que menos se esperaba ¿Cómo Verónica le daría un consejo así?

-oh!, Lo siento, no pensé lo que dije, pasa seguido.
-tengo el mismo defecto/virtud.
-es muy padre tener una madrastra como tú, aunque aun no te conozco lo suficiente.
-eso es único que nos está fallando.

El pensamiento en voz alta de Verónica, hizo que Carolina se quedara pensando en si era una buena idea o no hacerlo. Algo en ella le decía que era muy buena idea hacerlo, pero había algo que hacia que se detuviera al por lo menos pensarlo.

Esa noche, Carolina no pudo dormir por pensar en lo dicho por Verónica, aunque la posibilidad de que fuera solo una tontería lo que dijo, si lo dijo tan natural, no podría ser una broma.