Ese día era como casi todos los demás: clases, entrenamiento y recoger y limpiar todo.
Ese día estaba limpiando junto con otros, pero estaba más cerca de Yamamoto, recordó lo que le dijo Kuroo: 'Se más amigable'. Le costaba, en especial con una persona que es todo lo contrario a él.
-Quizás sea bueno que te relajaras un poco más- dijo Kenma (en esos momentos no era rubio, sino castaño) intentando a su forma ser amigable.
- ¿Para ser igual que tú? No, yo sí me esfuerzo ¿Cómo me relajaría? Sólo me faltan agallas- citó firmemente, dándole la espalda a Kenma. Eso molestó a Kenma.
-Tendrías que fijarte en lo que hiciste mal, en vez de pensar en las "agallas"- su cara era seria y tenía el ceño fruncido.
Empezaron a discutir un poco, pero fue aumentando, hasta que Yamamoto lo agarró del cuello de la camisa del castaño y lo sacudía como quería. Desde ya eso estaba molestando más a Kenma de lo que ya estaba, por la terquedad del otro.
-¡Mira si eres tan estúpido como para pensar en que todo se soluciona con agallas, ¿Qué esperabas que te dijera? que lo hiciste bien?! ¡No me hagas reír!- gritaba ya completamente molesto el pequeño.
El otro lo zarandeó más y lo tiró al piso, logrando que cayera de costado. De alguna forma eso enfureció por colmpleto a Kenma, quien se paró de golpe y fue directo a atacarlo.
-¡¿Qué sentido tiene intentar algo en lo que ni siquiera eres bueno? ¡¿O intentar ayudar sin darte cuenta de que arruinas todo?! ¡¿Tú crees que aportas algo? Pues eres más idiota de lo que pensaba!- Sentenció mientras lo estropeaba al otro como si de un muñeco se tratase.
Hasta que vio que el otro no se movía, así que se alejó unos pasos atrás, sólo para ver que el otro tenía su cara en shok y vio que sus ojos se cristalizaban.
-Sabía que eras reservado... pero, no pensé que ibas a ser tan poca persona...- escupió, dio media vuelta y se fue del lugar, dejando a Kenma en medio de la cancha siendo observado por todos.
-¿Kenma, qué pasó?- preguntó Kuroo que acababa de llegar luego de haber sido llamado por un profesor, y sólo vio que todo el equipo miraba al castaño que sólo miraba sus manos temblorosas al igual que su mirada, no pudo evitar acercarse y preocuparse por tal -Gatito...- se acercó más sin prever la reacción del otro.
Kenma apartó la mano de Kuroo, que iba directo a su hombro para hacerle reaccionar. Luego de hacer eso estaba decidido a irse de allí, lejos de todo y todas las miradas, lejos de pensar qué pasaba por la mente de todos luego de ver todo lo que había hecho y dicho.
-Ken, estas...- fue interrumpido.
-¡Sólo CALLATE!- soltó, volteando a ver a su próximo capitán. No tardó en darse cuenta de lo que había dicho y a quién.
Su reacción fue retroceder con cara de confundido y salir corriendo, ya habían terminado así que no había problema.
Sin saber cómo, pero, al estar en su casa llegó directo a su cuarto, a quitarse toda la ropa, sentía que lo estaba ahogando. Al estar sólo con su polera y ropa interior intentó calmar su respiración que desde hace mucho rato ya estaba irregular y alterada.
"Soy como mi madre..." era un pensamiento que lo llevaba carcomiendo desde lo que le había dicho Yamamoto.
Se estaba odiando, acababa de ser literalmente como era su madre con él.
Él ni siquiera pensaba realmente todo lo que había dicho, de hecho, veía a Yamamoto como rival por lo bueno que era.
Y tuvo su primer ataque de ira, empezó a golpear su cabeza contra su puerta, empezó suave y terminó siendo cada vez más fuerte, fueron cinco golpes seguidos, hasta que se paró y comenzó a tirar todo, gritando cuanto se odiaba o la mierda de persona que era...
Realmente no era su primer ataque, tuvo uno cuando era pequeño, pero no recordaba ese, ni tampoco era algo que vaya a recordar ya que no era importante en el momento.
Pero esa vez, al no saber qué era lo que sentía, su forma de reaccionar era llorando, con tan sólo siete años, estaba en la mesa comiendo su almuerzo, una comida que no le gustaba para nada y había tenido un mal día en su escuela entonces la acumulación de cosas le abrumaron.
Hasta que sintió un golpe en su mejilla que le hizo caer de su asiento, aturdido por tal golpe bastante fuerte giró para ver a su madre, que lo agarró del brazo y le obligó a volver a sentarse bien.
Él la miraba con miedo y asustado por tal acto, agarrándose la zona que ya estaba un poco roja.
-Mira, te vas a callar y te comes esto, porque me parto el lomo haciendo todo por ti, para que vengas a joderme más el día. Te lo comes o te lo voy a embutir. No te vas de aquí hasta que lo termines- Agarró una cucharada de la comida y se la metió en su boca a la fuerza, haciendo que éste casi se atragantara.
Pasó horas ahí sentado mientras su madre hablaba por teléfono a su lado por algo de su trabajo, no se atrevió a levantarse ni decir nada hasta que terminó su asquerosa comida llena de lágrimas.
Con el tiempo aprendió a no mostrar cuando estaba molesto o a esquivar los problemas, para no tener ese tipo de comportamientos, porque quien sabe qué era capaz de hacerle su madre.
Siempre intenta pensar en los momentos felices que tuvo con ella, pero son completamente opacados por todo lo que le hizo sufrir, así que aprendió a no quererla y sólo aguantarla porque era su madre y era menor de edad...
Triste pero me gusta jdsfjhsdjh voy a ir perfeccionando algunas cosas uwu espero les guste.
ESTÁS LEYENDO
Alone again... [Kenma Kozume]
FanfictionKenma comienza a experimentar con drogas para escapar de sus problemas familiares y académicos. Al principio, solo consume ocasionalmente, pero rápidamente se encuentra atrapado en un ciclo destructivo de adicción. Su vida comienza a desmoronarse: d...