⚝ las horas apremian

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No sabían cómo pero llevaban toda la noche ahí, la alarma del teléfono de Jungkook sonó anunciando que "era hora de despertarse para trabajar" mientras ellos ya llevaban toda la noche revisando la actividad de ese extraño lugar donde se había detenido el camión, con lo que vieron se dieron cuenta de la cantidad de gente que entraba y salía durante la noche, la cámara no era la mejor así que no se podían apreciar detalles, el hombre que se había quedado con ellos revisando las cámaras les había tomado la dirección del sitio, cuando llegó la hora de irse en la mañana Jungkook tuvo que levantar a Namjoon que se había terminado quedando dormido en su silla y comenzó a pedir perdón.

-No importa, sé que estabas sembrando el jardín la noche anterior, no te preocupes- Namjoon asintió bostezando y estirándose para quitar su pereza.

-Hyung, ¿y qué vamos a hacer?- Jungkook tomó su celular y colocó la dirección del papel que le había dado Jaebum.

-Pues primero, esperar que Jaebum nos lleve a su casa y recuperar mi auto, después ir a buscar ese dichoso lugar ese- Jungkook miró al hombre que hablaba en el despacho del lugar que volvió donde ellos.

-Saben que eso no es lo ideal, pero si algo pasa siempre pueden llamarnos- Los dos alfas asintieron y volvieron al auto.

-Hyung ¿Tienes turno?- Jungkook le preguntó al alfa mayor que conducía.

-Si, a mediodía- Jungkook se sintió mal por haber quitado las horas de sueño del mayor.

-Perdón por esto, pero de verdad no sabemos que más hacer- El hombre sonrió y levantó sus hombros.

-Sabes que esto es nada en comparación de que ayudaste a la persona más importante para mí, Jungkook.

🐺

Ellos ya con el auto decidieron darse un paso rápido por la casa para tomar un baño. No hallaron los dos omegas en la casa y al llamar al Omega de Namjoon les avisó que habían decidido ir a la universidad juntos.

Ya así al fin emprendieron camino hasta el sitio, el lobo de plata tenía un nudo de nervios en su interior, el líder podía percibirlo en su olor y en su cara.

Al llegar al sitio dejaron el auto un par de cuadras atrás para comenzar a caminar buscando la puerta que se veía a través de las grabaciones de la cámara, estaba cerrada, era grande, de un color grisáceo opaco, al frente había una pequeña sastrería abierta, ambos entraron y se encontraron con un anciano beta que los atendió con una sonrisa.

-Buenos días, caballero- Ambos alfas hicieron una reverencia y el señor se levantó para acercarse al mostrador.

-Que lindo día hace, jóvenes. ¿Qué desean? - Ambos se miraron y asintieron sin tener que decir nada.

-Podemos preguntarle algo...- Jungkook habló.

-Por supuesto- El señor abrió pasó a la pequeña zona donde se tomaban medidas y les dió asiento. Era un buen lugar, se veían varios trabajos a medio hacer, retazos de tela y un olor a incienso llenaba el lugar.

-Bueno, nosotros tenemos un pequeño clan y se nos secuestraron a nuestro alfa más jóven- Jungkook buscaba las palabras- Bueno, solo somos tres, pero él es el menor... El punto es, hay grabaciones que nos dan a entender que puede que nuestro compañero está en ese depósito del frente. ¿Sabe usted algo del lugar? - El beta miró a las afueras de la tienda y les volvió su vista.

-Según yo sé, eso es una bodega de materiales de construcción. La verdad no recuerdo la última vez que la ví abierta, y yo no vivo por acá, jóvenes- Ambos se desanimaron.

-Bueno, quizás lo explica. Ayer miramos las cámaras de vigilancia de la policía y se ve que hay más actividad en la noche más bien tarde y en las madrugadas- Jungkook rascó su barbilla.

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