Capítulo 53

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Varias lunas habían pasado desde entonces y las cosas habían estado en parte bien y en parte tensas. La Reina cedió ante su hijo y legitimó a los bastardos de Lord Borros Baratheon, nombrando a Theron como Señor de Bastión de Tormentas y dejando que Brandon se uniera a la Citadel en Antigua donde sería entrenado para convertirse en Maestre, ya que había rechazado completamente llevar el apellido de Lord Borros. Y aunque Theron también había mostrado sus dudas, Jacaerys le hizo saber que si quería estar con Helaena debía tomar la posición de un Lord.

Quizás lo más fácil fue convencer al matrimonio. Ninguno de los dos quería hablar con el otro, no se dirigían ni siquiera la mirada. Y aunque a Aegon le dolía saber que su familia ya se había destruido para siempre, sabia que la solución que Jace había encontrado era la más sana para ellos y para sus hijos. Sin embargo, no había hablado con ellos, ni siquiera con Jaehaera quien era ajena a toda la situación y de vez en cuando iba a dejarle flores a su habitación cuando él no estaba.

Por su parte Helaena estaba más tranquila, y había logrado conversar con Jaehaerys mencionándole que lo amaba mucho, que él nunca hubiera sido la razón de alguna pena para ella sólo de felicidad.

- ¿Entonces... por qué dijiste eso? - le preguntó aguantando sus ganas de llorar.

- Hay cosas que ahora no puedes entender, mi niño - le dijo acariciando su cabello - Tu padre y yo no nos amamos de manera romántica, no queremos estar juntos, pero eso no quita que te amo a ti y a tu hermana, y estoy segura que tu padre también los ama mucho.

Jaehaerys no estaba tan seguro de eso, pero odiaba ver a su madre con los ojos tristes, y siempre tuvo miedo de que su tristeza se volviera tan grande que ella cortara sus muñecas de nuevo como aquel día en que la encontró sangrando en su habitación. Ver a su madre casi morir, había sido lo más doloroso para ese niño. Así que simplemente asintió con la cabeza.

Pero cuando su madre se puso se pie, indicándole que ya podía volver a sus actividades, Jaehaerys recordó las palabras de su abuela. Haz todo lo necesario para quedarte aquí, no me puedes dejar sola, mi niño.

Alicent Hightower no estaba nada feliz con la rápida anulación del matrimonio de sus hijos, pues eso ponía en duda la honradez de su hija, y quizás más importante que eso, la validez se Jaehaerys como un Targaryen. Sin embargo, había decidido guardar silencio ante eso y mover mejor sus piezas en ese juego. Necesitaba a ese niño con ella, y no podía dejar que se lo llevaran.

- Tendrás que vivir con ese hombre que arruinó a tu familia - le había dicho - y quizás no vuelvas a ver a Reid.

Eso parecía haber llamado la atención de Jaehaerys quien la miró asustado.

- Pero... mamá dijo que podría venir se visita - le susurró.

- Pero cuando vuelvas seguramente Reid ya ni estará acá. Jacaerys y Daena tendrán un bebé propio ¿por qué se quedarían con él?

Entonces el miedo había invadido sus pensamientos. No solo lo enviarían lejos se su hogar y su familia, no solo tendría que vivir con ese hombre que había arruinado su familia, sino que quizás nunca volvería a ver a Reid. Quizás, si él se quedaba en Desembarco del Rey podría hablar con el príncipe Jacaerys y pedirle que conservara a Reid.

- Madre - dijo antes de salir de la habitación. Helaena lo miró. - Yo no... Yo no quiero irme a Bastión de Tormentas - susurró.

Helaena lo observó confundida.

- Quiero quedarme acá, con mi abuela - dijo por lo bajo.

- Los niños deben estar con sus madres, mi niño. Visitarás a tu abuela y a tu padre de vez en cuando - le dijo poniéndose a su altura.

Dutty | Jacaerys Velaryon Donde viven las historias. Descúbrelo ahora