Me Enamoré De Un Criminal.- Yoongi & TN. (SEGUNDA TEMPORADA)

•CAPITULO 31•

> NARRA YOONGI

Arregle mi corbata, Alan seguía hablando de las terapias y el doctor. Parecía estar realmente preocupado sobre mi estado de salud, aunque no hubiera vuelto a enloquecer desde que por fin era libre, y estaba con TN.

Hubo un largo silencio y lo vi mirando hacia la ventana.

- No puedo creer que estoy aquí.- Dije en voz baja.

- Y estoy orgulloso de que lo estés.- Respondió.
Sonreí y me vi al espejo.

- Mira mi corbata no esta tan mal ¿verdad?, Nunca había atado una antes.- Murmuré. Alan volteó a verme.

- ¿Cómo la ataste entonces?.- Pregunto dudoso.

- Uhhmmm...

Sonaría muy infantil si le digo que lo aprendí viendo un programa de televisión, cuando en una escena un hombre se hizo el nudo, y está vez solo lo replique.

- Intuición.- Dije con una voz claramente burlesca.

Lentamente se acercó a mi y suspiró.

- Yoongi... te he acompañado desde hace tiempo, desde un punto en tu vida donde las cosas se escapaban de tus propias manos.- Murmuró y puso sus manos sobre mis hombros.- Y no sabes lo orgulloso que estoy de poder verte esperarla en el altar. Y me siento seguro al decir que te he visto luchar por tu felicidad.- Dijo con un hilo de voz.

Pude ver en sus sabios ojos lagrimas escondidas entre sus pupilas, sentí un nudo en mis garganta y bajé la mirada, dándome cuentas el gran significado que había detrás de esas palabras.
No era muy fanático de los momentos cursis, pero sabía que este momento lo recordaría toda mi vida, sabía que lo decía de corazón y realmente estaba agradecido.

- Todo te lo debo a ti... Gracias.- lo abracé.

- Pero ten en cuenta que yo solo te guíe por el buen camino, tu lo atravesaste solo.- Dio una palmada en mi espalda.

enseguida se alejó un poco limpiando sus mejillas con la palma de su mano.

- Esperaré afuera, antes de que me arrepienta de ser el testigo de esta boda.- Dijo rápidamente.

Asentí feliz y lo vi salir cerrando la puerta por detrás, me quedé ahí de pie, me acerqué a la ventana y miré el mar, lentamente cerré mis ojos Tenía que olvidarme del pasado, debía hacerlo, por TN y por nuestro futuro. tenía que perdonar.
Nunca había hecho esto... Miré hacia el suelo.
Necesitaba la ayuda de alguien mas grande.

- Tú me has ayudado mas de una vez...- Dije en voz alta.- Si es que aún soy digno de tu ayuda, házlo... Ayúdame.

Era la primera vez que pedía ayuda de Dios con fé. La necesitaba. Debía aprender a amarlo.
Limpie mis lágrimas con mis manos y puse ambas sobre mi rostro.

Alguien tocó la puerta haciendo que me asustara.

- Es momento de salir Yoongi, tú prometida está en camino.- Escuché la voz de Alan afuera.

Camine hacia la puerta, sabiendo lo que estaba dejando, y lo que me esperaba.

> NARRA TN

Pronto sentí que nos detuvimos, miré hacia afuera al gran hotel, mis amigos salieron del auto y solo así pude observar mucho mejor como iban vestidos, un traje gris con corbata negra, se notaba que se habían esmerado en arreglarse, ellos se adelantaron para entrar antes que nosotros. El resto de los invitados ya estaban dentro, o eso suponía.

- Espero que recuerdes esto justo como yo.- Dijo mi mamá al oído. Reí nerviosa mientras mi papá abría la puerta del auto.

- Ahhh... Aquí está mi princesa.- tomó mi mano y esperó a que saliera. Le sonrió a mi mamá y la ayudó a salir también.- Y aquí está mi reina.

Mi madre sonrió y lo abrazó. Sabía que mi mamá intentaba ser fuerte pero más lágrimas eran algo visibles, aunque trataba de ocultarlas con su sonrisa.
El fotógrafo llegó a tomarme fotografías, los flashes estaban por doquier. Mi mamá se acercó y besó mi mejilla, más flashes.

Caminamos por la recepción del hotel bajo las miradas enternecedoras de la gente al verme, lo cual me hizo sentir mucho más nerviosa, nos adentramos a los pasillos hasta llegar finalmente a la puerta donde sería la boda, un bello jardín había sido el lugar elegido para este día.

- Estoy tan feliz de verte feliz cariño...- Habló mi papá mirándome fijamente a los ojos.

- Gracias papá, por cierto te has vuelto un cursi.- Contesté bromeando. Me sonrió.

- Espero que no tropieces, será tu culpa si caemos los dos.- Susurro mi papá bromeando. Lo que me hizo recordar que soy algo torpe.

- Gracias por recordármelo.

Entonces mi papá me ofreció su brazo y entrelacé el mío para caminar, giré mi mirada a mi mamá que estaba a mi lado derecho.

- Quiero que sepas que te amamos y siempre lo haremos.- Me dijo al oído, besé su mejilla y me tomé de su mano también.

Había decidido entrar con ambos hasta el altar.
Apreté mi ramo sintiéndome muy nerviosa nuevamente, Este era el momento. El momento en el que tenía que evitar a toda costa el tropezar y llegar con Yoongi victoriosamente.
Mis oidos comenzaron a silenciar todo y mi interior quería volar en pedazos.
Escuché la música de adentro empezar a sonar, no pude evitar sentir mariposas.

- Querida no me aprietes tan fuerte.- Me dijo mi padre.

Me di cuenta que estaba apretando su brazo realmente fuerte.
Para mí asombro el fotógrafo me sorprendió una vez más con el flash de la cámara.
Las puertas se abrieron a mi parecer con una lentitud tortuosa.
Camine lentamente del brazo de mis padres y salimos. La gente estaba de pie, algunos con camaras que destellaban tanto que sentí caminar en camara lenta. filas de sillas alineadas, el altar era de color blanco, pero lo que se robaba la atención era la gran cantidad de flores que adornaban el lugar, con un magnífico tono rosa pastel, era sencillo pero elegante.
Las palmeras crujían levemente dando un toque especial.

Los ojos de todos los invitados se posaron en mi mientras caminaba sobre la alfombra de mi futuro.
Podía ver ligeramente el mar.

Sentía miedo de ver a Yoongi tal vez esa era la razón de por que no lo había mirado aún, tenía miedo de verlo, no sabía porque.
Mi nerviosismo estaba comiéndome por completo, no podía soportarlo más, estaba portándome infantil.. mi mirada viajaba hacia todos los invitados... Todos menos él...

Me armé de valor y por fin después de unos eternos segundos miré hacia donde estaba Yoongi, vi sus hermosos ojos observarme fijamente.
Sentí que no podía respirar cuando llegué con él.

Ahí estaba mi Yoongi esperando mi mano. Aquél que conocí desde que era tan joven, aquél que conocía mis miedos, que conocía mis sentimientos por dentro y por fuera. No pude mirar otra cosa más que sus ojos y su imagen se hacia cada vez más cerca . ví como sus ojos parpadearon, combinaban tanto con el lugar. Entonces estuvimos cara a cara, sus dulces ojos me dedicaron esa mirada que solo el sabía hacer.
Mi padre le entrego mi mano a Yoongi para después dar una pequeña palmada en su hombro, con una gran sonrisa en su rostro, mi mamá lo abrazo delicadamente, para después darle mi otra mano, la cuál Yoongi tomó delicadamente. Mis padres se alejaron del altar para tomar sus lugares.
Yoongi cruzo su brazo con el mío mientras sonreía levemente.
Sentí los bordes de mis labios curvarse en respuesta.

Podía quedarme así para siempre pero recorde que estaba en mi boda.

Yoongi me llevó lentamente frente al sacerdote, ambos estábamos de pie y el sacerdote comenzó a hablar. Escuché su gentil voz en un murmullo, tenía que mantener mi mirada enfrente, aunque moría de ganas de ver a mi esposo a mi lado.

Me di cuenta de que él también me miraba de reojo.
Entonces el tiempo pasó más rápido, sentí que tomaban fotografías por doquier.
La gente hacia comentarios.
Pero todo lo que me importaba ahora estaba a un lado mío...

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