Emperatriz - Bellow Diamond

Capítulo 18

the emperor's knight

Sintió el tiempo pasar con rapidez, como si las horas fueran minutos y las semanas solo fueran días, todo había pasado tan rápido que con suerte había podido reaccionar.

Caminó a través del enorme y extenso pasillo del palacio real, los metales de su uniforme sonaban con cada uno de los pasos que daba.

Respiró hondo una vez que se detuvo en frente de una enorme puerta de madera, habían guardias escoltando la entrada de la habitación, siendo uno de ellos quien la anunció antes de tener permiso de entrar.

Al adentrarse a la habitación observó el elegante y costoso decorado de la oficina de su majestad, observó cómo el emperador se levantaba de su asiento y la recibía con una sonrisa.

— Mi emperador.— nombró la rubia, reverenciando al hombre mayor.

— Caballero Diamond.— respondió con calma, ensanchando su sonrisa —. Te estaba esperando.

Janet sonrió a medias inclinando la cabeza, llevó sus manos a su espalda, tomando sus propias manos.

— Me gustaría saber cómo van los preparativos de la próxima invasión.— quiso saber, invitando a la rubia a tomar asiento —. No puedo creer que en los últimos meses tomaste el poder de casi todas las provincias que ese ejército de fenómenos nos robaron, no me dejas más que complacido y claro que tomé la mejor decisión en nombrarte.— mencionó el emperador.

La rubia rió suavemente, mirando de reojo al hombre mayor, llevó una de sus manos a su bolsillo, activando su diamante, cual brilló antes de mostrar diversos tableros mágicos, uno de ellos era más grande que los otros, cual expandió horizontalmente, mostrando una perfecto diseño del imperio, junto a las provincias robadas y las provincias que fueron recuperadas.

Volvió su mirada ámbar hacia el emperador.

— Aquí están los movimientos activos del ejército en las provincias que fueron recientemente recuperadas, su majestad.— comentó la caballero, mostrando en la pantalla mágica como se dibujaban los avances de la reconquista de las tierras del imperio —. En las próximas horas se harán movimientos de tropas para la siguiente etapa, por ende se iniciará otra jornada de reclutamiento, si usted está de acuerdo, por su puesto, mi emperador.—  explicó la mujer de cabello rubio.

La caballero estaba tan sumergida en su explicación de su liderazgo militar que no había notado que el emperador ni siquiera estaba viendo las pantallas.

— ¿Necesita que le explique algo en específico, su majestad? — frunció el entrecejo.

— Oh, te ofrezco una sincera disculpa.— sonrió el varón, apartando la mirada —. Lo que pasa es que no estoy acostumbrado a escuchar hablar a una mujer de esta forma.— comenzó —. Lo haces tan bien y tan natural que me has dejado impresionado.— continuó.

Janet frunció los labios, en un vago intento de regalarle una sonrisa al emperador.

— Muchas gracias, mi emperador.— inclinó la cabeza —. Como la primer mujer con el cargo de caballero y comandante en este imperio, me halagan mucho sus palabras, su majestad.

— Continúa, por favor.— extendió su mano, haciendo un ligero movimiento con ella en señal de que la caballero continuará con su explicación.

— Si, su majestad.— volvió la atención de sus ojos ámbar hacia las pantallas.

La caballero Janet continuó con su explicación sobre lo que había estado planeando para proseguir en la recuperación de las provincias y luego en las nuevas conquistas para el imperio.