Esa tarde mi madre me llevó al médico para averiguar algo sobre mi insomnio, pero el doctor me dijo que pasaría solo y que teníamos nada por que preocuparnos. A mi madre le alivió eso, pero aún por si acaso, el doctor me recomendó unas pastillas para dormir, con la instrucción de no usarlas hasta que fuera absolutamente necesario. Y por fortuna no lo fue, ya que a excepción de esa noche, pude dormir bien el resto de la semana. Pero algo ocurrió ese sábado, específicamente a la hora de dormir.
Dieron las diez de la noche y ya tenía que irme a dormir, baje a la cocina y me serví la cena, termine en cuestión de minutos así que le di las buenas noches a mi mamá y me fui a acostar, una vez acostado el sueño comenzó a invadir mi cuerpo, poco a poco quedaba inconsciente asta que finalmente me dormí.
Tras dormirme no tarde en comenzar a soñar, y todo debido a las grandes y pesadas anécdotas de la semana, pero admito que incluso para ese día aún no olvidaba el asunto con Christian, tanto así que en lo que restó de la semana no le pude ver a la cara.
Tarde un poco en conciliar el sueño, pero cuando lo hice comencé a soñar casi de inmediato, o eso creo.
Tome conciencia en casa de Christian, era de día y la luz del sol entraba por la ventana directamente, fue en ese momento que note que me encontraba en un sueño. Me pasee por la casa mientras el silencio era el único presente, pero no fue hasta que pasaba por la cocina que escuché un ruido al otro lado de la casa, y en lo que pareció un parpadeo, ya me encontraba ahí, justo en el momento para presenciar la escena que para mí y Chris fue el momento más incómodo de nuestras vidas.
Más que un sueño, me encontraba en un paseo por mis recuerdos, y tener que ver aquella escena en tercera persona de cuando Christian y yo estábamos en el suelo me puso la piel de gallina. Era incómodo tener que ver eso, así que me di la vuelta y traté de irme, pero cuando volteé la escena se repetía del otro lado. No importaba a dónde volteara, esa escena me perseguía.
Mientras la escena se desarrollaba alrededor de mi, los sentimientos que pasaron por mi en ese momento volvían a invadir mi cuerpo en el sueño. De repente, la escena comenzó a ir más lento, y esto pasó más y más rápido hasta que finalmente el mundo se detuvo.
Y de forma tan inesperada como pasó lo anterior, la habitación comenzó a perder su color. Esta situación se puede comparar con la película del mago de Oz, justo en el momento en que la película cambia de blanco y negros a color, solo que en el sueño fue al contrario.
Fue cuestión de tiempo para que todo se volviera blanco y negro. Pero no terminó ahí, el color continúo desapareciendo hasta que llegó el punto en que todo parecía tener el diseño de una caricatura antigua, donde lo único que separaba las cosas era su contorno marcado con negro.
El mundo se había convertido en un dibujo y lo único que quedó a color fuimos Christian y yo. La otra versión de mi ya había salido corriendo por la puerta, y a diferencia de la vida real, Christian no lo persiguió, en lugar de eso se quedó el parado, viéndolo fijamente.
Chris comenzó a acercarse a mi, lentamente, yo quería salir corriendo, pero me resultaba imposible, quise gritar, pero tampoco pude, lo único que podía sentir era el fuerte y rápido latido de mi corazón.
En cuestión de segundos tuve a Christian en frente de mi, yo no podía moverme, pero no tuve que hacerlo. Christian me rodeó con sus brazos, y luego de darme un fuerte abrazo comenzó a acercar su rostro al mío. Yo cerré los ojos esperando que no lo hiciera, pero eso no importó, en un instante los labios de Christian y los pios comenzaron a tocarse.
Yo permanecí con los ojos cerrados, pero podía sentir todo. Christian me daba pequeños besos en la boca, lentos pero seguros, pero fue hasta el noveno beso que mi incomodidad comenzó a desaparecer. Mi cuerpo se volvía poco a poco más ligero, la sensación que dejaban sus labios húmedos contra los míos se comenzó a volver cómoda, y al pasar de los segundos mi cuerpo comenzó a aceptar esa comodidad, y en el décimo tercer beso mi cuerpo cedió.

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AMOR AUTISTA
RomansaUn joven con problemas para demostrar sus sentimientos descubre que es el amor platónico de su amigo de la infancia. El empieza a sentir algo por el igualmente, pero debido a su estado mental, ni siquiera se da cuenta.