C A P I T U L O 25

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Volvii💋



————

Emma

—Qué? - relamio sus labios, con una sonrisa burlona y sus mejillas se tornaron rojizas.

—Nada - negué con la cabeza apretando mis labios.

—Lista? - me tomó de ambas manos.

—Pará qué? - lo mire sin entender.

Él todo los ojos - Para el lugar.

—Sorprendeme - sonreí.

Me devolvió el gesto y plantó un beso rápido sobre mi frente, para después tomarme de la mano y arrastrarme con él.

El lugar estaba rodeado de naturaleza, todo era árboles y pequeños arbustos.

—Solía venir a este lugar hace más de dos años, cuando venía con mi familia de vacaciones.

Ya habíamos llegado al ligar.

Era una montaña, obviamente a lo alto donde podías observar toda Qatar. Las luces de los edificios, casas, tiendas, etc, resaltaban a la perfección todo haciendo la vista más hermosa que haya visto.

Sonríe ante eso, observando todo tratando de guardar esta imagen en mi mente.

Pedri se posó a mi lado, se apego un poco más a mi y coloco un mano sobre mi cintura.

Un escalofrío recorrió en todo lo cuerpo al sentir su tacto.

—Es hermosa - dije aun con mi mirada en la vista que nos ofrecía la noche, estando a esta altura de la montaña.

—Lo es - sentí como me miró de reojo y después volvió a fijar su vista hacia el frente -, y la vista también.

Entendí su referencia y lo mire sonriendo burlona.

El al escuchar le risita que solté, me miró sonriendo de lado y su mano viajo hasta mis hombros, enroscandome  con su brazo.

Nos quedamos unos segundos así.

—Y esa cabaña? - mire hacia un costado.

—Esta abandonada desde hace tiempo - imitó mi accionar.

—Lugar alejado de la ciudad, bosque, montaña y cabaña abandonada - lo mire divertida -, crimen perfecto para un secuestro.

El solo esbozo una sonrisa

—Porque no respondías mis mensajes? - solté de repente y sentí un choque de tensión.

Error.

Porque lo tuve que preguntar en este momento?

—Te voy a ser sincero - trago saliva y lo mire de reojo -, no me sentía muy bien por perder el partido, fue un golpe muy duro para mi y para todos los jugadores. Me sentí tan insuficiente por no poder esforzarme más - habló por lo bajo y soltó un suspiro con pesadez.

—Y lo dejaste todo en la cancha, no te sientas insuficiente por haber perdido - lo mire fijo - El que hayas perdido no significa que seas malo en lo que haces, solo mirate - esboce una sonrisa de lado -, quien juega un mundial a sus venite años?, quien juega en el Barça a tu edad?, el club es muy aforundo de tenerte. Así que no digas que eres insuficiente o malo en lo que haces - acaricie sus mejillas.

El se cruzó de brazos mirándome, sonriendo de lado y se recargo de espaldas sobre el auto.

—Eres increíble, Emma - alzó sus cejas levemente -, no se porque a la única chica que me importa le deje deje de hablar por días, solo por uno sentimiento pasajero. - me tomo de las mejillas y plantó un beso en mi frente.

—Así que hay más? - exlcame divertida.

—Solo tú - asintió y relamio sus labios.

—Tienes pinta de Fuckboy, de esos que llevan a las chichas a lugares "especiales" - hice comillas con mis dedos -, justo como este, alejado de la ciudad - hable burlona.

El negó divertido - Que te puedo decir, me gusta lo exclusivo.

—Y a mi me gustas tú - solté de repente.

—Y tú me encantas. - se acercó a mí hasta cortar la distancia que había entre ambos y junto nuestros labios.

Duramos así por no más de un minuto.

—Qué somos? - dije cerca de sus labios al separarnos, y lo mire fijo.

Fue algo que pensé en mi cabeza y sin querer dije.

Recién nos conociamos hace una semana.

Que pregunta tan estúpida.

—Qué quieres que seamos? - dijo con la respiración algo acelerada, por falta de oxígeno por el beso que nos habiamos dado.

—Amigos? - esboce divertida, muy cerca de sus labios.

—Los amigos se besan? - me miró incrédulo, con una sonrisa burlona.

—Depende de que tipo de amigos - me encogi de hombros y coloque ambos brazos alrededor de su cuello.

—Yo no quiero ser solo tu amigo - me miró fijo con una mirada intensa. Note el brillo en sus ojos marrones, con la poca luz que la noche nos brindaba.

—Así?, qué es lo que quieres? - sonreí con la boca entre abierta, mostrando los dientes.

—Todo contigo - dijo instantáneamente.

Mi corazón comenzó a latir un poco más rápido de lo normal.

Me quedé mirándolo por unos segundos más, sus ojos marrones.

Mierda, mierda.

Porque tenía que ser tan directo este chico?

Me hizo perder la cordura con tan solo dos palabras.









Xxxx

La hermana de Antonela Roccuzzo - Pedri González  💙❤️ (en curso) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora