Capítulo XXXII

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—     ¿Podemos hablar un momento? — Pregunto muy serio

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— ¿Podemos hablar un momento? — Pregunto muy serio.

— ¿Ocurre algo? — Pregunta mi madre enarcando una ceja, sé que no le ha gustado nada ese tono y me regaña con la mirada.

— No, nada. Es que acabo de recordar que tenemos que entregar un trabajo y me gustaría repasarlo con mi profe — respondo con una sonrisa.

— Me gusta veros estudiar juntos — dice suavizando el gesto — no os molesto entonces.

Cojo a Luna de la mano mientras sonrío a mi madre y la llevo escaleras arriba. Intento no ser demasiado brusco pero ahora mismo estoy muy cabreado. ¿Qué cojones hace preguntando por Eliana? ¿No ha causado ya suficiente daño? Cierro la puerta de mi habitación y respiro hondo antes de darme la vuelta.

— Antes de que digas nada — comienza Luna — esto tiene una explicación.

— Espero que sea buena — digo en tono duro.

Luna me mira confusa y poco a poco empieza a arrugar la frente, se está cabreando.

— Derek, sé que quieres protegerme pero estás sacando las cosas de contexto.

— Exacto, quiero protegerte, entonces...

— Entonces deja que me explique.

Ambos nos retamos con la mirada y al final respiro hondo y me muerdo el labio. Estoy siendo un completo idiota. Luna es inteligente, seguro que tiene una buena razón para estar preguntando por esa mujer. Antes de que podamos hablar la puerta de mi habitación se abre.

— Vengo a preguntar por ese supuesto trabajo que tenemos que entregar — dice Katy acelerada pero se calla al palpar la tensión del ambiente. — Vale, ese trabajo, es el que hemos entregado hace unos días, ¿verdad? — Ambos asentimos y Katy respira aliviada. — Menos mal. ¿Qué está pasando?

— He pillado a Luna preguntado a mamá sobre Eliana — explico rápidamente.

— Y eso te ha enfadado.

— Mucho — respondemos Luna y yo a la vez y nos miramos. No puedo evitar sonreír un poco. Hago un gesto con la mano para animarla a hablar.

— Sé que pensáis que me he vuelto completamente loca, pero tengo una buena explicación. He encontrado la forma de averiguar la verdad — ambos la miramos nerviosos — voy a pedir mi partida de nacimiento y , para ello — dice sacando un cuaderno de su mochila — necesitaba ciertos datos que no tenía.

— ¿Cuáles te faltaban? — Pregunta Katy.

— El hospital donde nací, que me lo dijo Tom ayer.

— ¿Cómo lo conseguiste? — Pregunto sorprendido.

— Sinceramente, aún no me lo creo, fue todo de rebote. Hablando sobre las universidades y sobre las prácticas que quiere hacer Anna en el hospital. Tom me dijo que ahí habíamos nacido los tres. Y por último me faltaba el nombre y apellido de mi madre.

Love Descubre quién eres (Love #2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora