Capítulo 28

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-¿Tengo que ir?... Bien... Si esta bien- terminó la llamada- mierda, me necesitan en Washington

-Y cuando te vas

-Pasado mañana... Joder ella se quedará sola y es lo que no quiero

-Lo se- Ivonne suspiro pesadamente- si no tuviera clases no me iría pero mierda...

-Tranquila- se acercó a ella y la abrazó, no decía nada pero yo sabia que estaba llorando- mandare a alguien para que la cuide

-Si pero... De verdad me gustaría que se fuera de aqui

-Yo también...

Estábamos en el comedor, ya comía poco pero lo hacía y para ellos era un gran avance; me sentía bien con ellos dos a mi lado y ahora tenían que irse. En cuanto a Tyler ha estado tranquilo, sólo llega habla conmigo pero yo no le tomo mucha importancia.

-¿Ya no quieres comer?- negué con la cabeza- cariño de verdad no quiero que te quedes con el pero no puedo llevarte hasta que estés mejor

La vi por unos cuantos segundos, su cabello rubio estaba atado en un moño desordenado, sus ojos estaban rojos por haber llorado anteriormente se percibían algunas ojeras y sus labios estaban pálidos, habían perdido su color rosado.

-No... No te preocupes- dije en tono bajo pero lo suficiente para que ella me escuchara-

-Joder ya, ya hablaste eso es bueno- sonrió- ven, vamos afuera no quiero que estemos aqui todo el día

Sonreí un poco pero aún estaba algo deprimida por que se irían.

******

-Eso fue todo... ¿Que tal tu día cariño?- lo miré por un momento y de nuevo dirigí mi mirada a el lindo paisaje que había- Kathe... Háblame

Como siempre me no le hable, iban dos meses de lo ocurrido pero no le hablaba a el.

-Ah hoy nos invitaron a una gran reunión, habrá muchas personas importantes es hora de que conozcan a mi hermosa esposa- entró a nuestra habitación dejándome sola en el balcón por sólo in momento- mira, te compre un vestido

El vestido como era de esperarse era largo, tenía una sola manga del lado izquierdo con algunas piedras de adorno, no era escotado en la parte de la cintura tenía un tipo cinturón que, al igual que la manga tenía piedras en forma de flor y la falta caía de manera elegante y hermosa.

-Alguien vendrá a maquillarte y peinarte- suspire-

Sabía que nada cambiaría, si me fuera con Ivonne o con Christopher todo sería igual, sus absurdas disculpas, chantajes todo. Una pequeña parte de mi gritaba que no tenía que rendirme, pero ya no servía de nada me había resignado.

Me levanté dejándolo sólo entre al baño no sin antes ponerle seguro a la puerta. Al salir me encontré con dos personas, por su aspecto supe que eran travestis y de inmediato supuse que eran las personas que había mencionado Tyler.

-Vaya, Smith tenía razón eres una preciosidad de chica

-Que no te de pena cariño, yo soy Cristal y ella Wanda pero puedes llamarnos Cristy y Wandy- sonrió pero después fruncio su ceño y tomo mi mano- ¿tienes algo cariño?

-¿Disculpa?

-Linda a nosotras no nos puedes engañar, sabemos que tienes algo. No somos nadie para entrometernos, sin embargo...

-Deja el drama atrás Cristy- revoleo los ojos-

-A lo que me refiero es que toda persona tiene derecho a ser feliz- me sentaron en la silla en frente del gran espejo- mira esa cara

-Oh Cristy- golpeó su hombro de manera juguetona-

-Tonta, no me refería a eso- sonreí ligeramente- mira linda esa carita que tienes no refleja felicidad, una mujer casada tiene ese lindo brillo en los ojos y tu no te vez feliz

-Su-supongo que no he tenido motivos para estarlo

-Ahora mi pregunta es ¿Que haces aqui?

-Preciosa se ve que eres una chica fuerte, segura, alegre. Pero te has descuidado, quiero decir que no haces nada para ser feliz de la manera en que lo mereces; no voy a preguntar cual es tu problema no soy nadie para saberlo.

-Pero tienes que recordar que todas nosotras merecemos ser felices, alguien más podría decirte que necesitas a tu esposo para hacerte saber que eres hermosa, pero no es así tu tienes que recordarte cada día cada hora y cada minuto que eres una mujer que merece ser amada pero no por alguien más, si no por ti misma- las lágrimas comenzaron a caer-

-Oh linda, no llores- me abrazaron- ahora no quiero ver más lloriqueos, quiero ver a una Katherine alegre y segura porque te lo mereces

-Gracias yo... Ni siquiera se como lo hicieron

-La vida ni nos ha tratado tan bien pero gracias a esta loca- señaló a Cristal- he aprendido que tu felicidad depende de ti. Habeces hay que ser egoístas por nuestro bien.

-Nosotras no hicimos nada, simplemente di mi opinión bo me gusta ver a nadie triste

-De todos modos gracias por compartir esto conmigo

-No digas más que voy a llorar

Después de esa charla supe que tenían razón, merecía ser feliz, no temerle a nadie. Ser amada por mi misma y no compadecerme porque yo era dueña de mi destino, no quería esto, quería ser alguien normal estudiando o trabajando.

Muchos podrían decir que el dinero lo es todo pero no es así, estas vacío. Eso es lo que no quiero, podré tener una casa de revista, autos, dinero pero eso no me sirve de nada. Ahora recuerdo lo que era tener una iniciativa, saber lo que quieres y llevarlo acabo por tu bien.

Algo dentro de mi había despertado otra vez y eso era la esperanza de ser feliz porque así lo quiero. No deseo estar atada a una persona que ni siquiera me hace sentir bien. El amor es diferente, podrían decir que sin esa persona morirían o que su mundo ya no tiene sentido pero lo que no entienden es que esos individuos no sólo te hacen sonreír o repartirte besos, ellos te hacen sentir bien contigo mismo.

Yo quería tener de nuevo esa confianza, seguridad y sobre todo amor hacia mi misma. Es por eso que ahora me ezforsare para llegar a tan anhelada alegría.

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