Capítulo 29

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Al adentrarnos al salón donde se llevaría acabo el evento. Por lo que Tyler me dijo habría pocas personas pero eso no le quitaba el lujo.... Demaciado para mi gusto.

-Tyler, amigo mío- dijo un sujeto que al parecer tenía la misma edad de Tyler-

-Hola Fred- se abrazaron de una forma masculina y después le tendió una copa- pero que gran reunión

-Si, supongo que si- sonrió- y veo que no estas mal acompañado

-Si, ella es Katherine Pierce, mi esposa

-Un gusto conocerte- le tendió mi mano y el gustoso la tomo-

-Créeme que el gusto es mío, por fin alguien logró domar a el señor Tyler Smith

Sonreí forzosamente y ellos junto a otros hombres comenzaron a hablar de cosas que no entendía.

Todo a mi alrededor era una gran farsa las mujeres que hablaban en grupo seguramente criticaban a todos a su alrededor, los hombres peleaban por hacerse ver los más poderosos. ¿Que vida es esta?

No quiero vivir así el resto de mi vida , quiero divertirme como solía hacerlo, sin ataduras a una persona que no quiero que se me acerqué o inclusive temerle.

-¿Te parece bien Katherine?

-¿perdón?

-Al parecer alguien está muy distraída

-Eso puedo notar- Tyler aclaró su garganta- regresamos en un momento- tomo mi mano y nos dirigimos a un lugar alejado- que se supone que haces

-¿Que se supongo que hago?- reí con ironía, esta vez no me quedaría callada- intento sobrellevar toda esta mierda de vida eso es lo que hago

-Podrías tratar de sonreír al menos una vez , lo único que quieres hacer es hacerme ver mal- se notaba como sus ojos tomaban diversas tonalidades debido a la ira- no quieres verme realmente molesto- tomo mi rostro entre sus manos con el intento de que lo viera a los ojos- y cuando te hablé mirame a los ojos

Me solté apoyándome en la mesa que estaba a un lado de mi. Y me fui directo al baño. Al llegar estaba un grupo de mujeres que me miraban mal.

-¿Como una chiquilla como tu se ganó a Smith?

-De seguro anduvo de fácil con el

-Las únicas zorras aqui son ustedes, mejor dejen de hablar si no tienen la certeza de lo que pasa en mi vida

Me miraron sorprendidas pero se fueron. No sabía de donde saque el coraje de hablarle así a ellas y mucho menos a Tyler, pero se sentía bien.

Cuando lo hice sentí ese alivio, un poco de felicidad, me sentía bien conmigo misma y de nuevo había regresado mi esperanza. Una lágrima callo por mi mejilla pero no era por tristeza, si no por felicidad de el valor que tome.

Me volví a mirar en el espejo ahora con una sonrisa ligera, aún faltaba mucho por recuperar pero este había sido un gran paso para mi pese a lo que Tyler hiciera. Salí del baño para encontrar a Tyler pero me quede un tanto impactada al ver de nuevo a Ian.

Recordé la noche en que lo último que pensé fueron en las hermosas tonalidades azules. Estaba segura de que el no me había visto pero de todos modos no esperaba que me recordará. Seguí caminado intentando sacar ideas incoherentes sobre el pero la imagen que tenía en frente me hizo regresar a la realidad.

Tyler estaba coqueteando con una chica, no estaba celosa pero me irritaba la idea que, después de humillarme ahora esta encima de esa chica. Lo mire con incredulidad, el aún no se había dado cuenta sobre mi presencia.

-Veo que las esquinas están cerradas esta noche, si no estuvieras lanzandote sobre alguien más- enarque mi ceja dejando a la chica desconcertada por la manera sutil de llamarla puta-

-Oh dios lo siento mucho de verdad- el tomo mi brazo con bastante fuerza, seguro esto dejaría marca-

Salimos de el pequeño salón para así dirigirnos a la parte trasera de la casa.

-EN QUE ESTABAS PENSANDO

-DE VERDAD ME ESTAS DICIENDO ESTO, DESPUÉS DE EL INFIERNO QUE HE VIVIDO CONTIGO AHORA VAS Y LE COQUETEAS A CUALQUIERA

-Oh vamos ni hablas encerio ¿un infierno?- río de una manera extraña- te enseñaré lo que es...

-Oh no ahí va otra amenaza- fruncio el ceño- oh por dios me ibas a amenazar de nuevo pero sabes que estoy harta. Harta de ti, de la estúpida rutina, de no tener a nadie gracias a ti, de estar sola, de llorar por cosas que no debo, de temerte y sobre todo de lo cobarde que fui al no decirte todo esto desde el principio

-Estas celosa

-¿Que?

-Es eso verdad, te molestaste al verme con esa chica

-Estas demente, no escuchaste lo que te acabo de decir

-Cariño yo se que tu me amas sólo es la ira que tienes pero tranquila, te perdonó

-TU me perdonas, esto debe ser un chiste y no, yo no te amo es más eres la persona que más odio en todo el mundo- me miro a los ojos y podía notarse lo dolido que estaba ante mis palabras, como si estas fueran dagas-

-No es así, NO ES CIERTO... Dime que no es cierto

-Mierda Tyler, siempre haces esto gritas, pones tu cara de víctima y crees que todos caerán pero yo ya no. Ya no me vas a engañar como acustubraste ahora todo va a ser diferente

-Muy diferente- dijo con un tono frío- si tu no me amas voy a hacer que los hagas por las buenas o por las malas

-Tu de verdad no te cansas de esas absurdas amenazas, lo que te convierte en un puto cobarde no es pa...- me callé en cuanto su mano se estampó contra mi mejilla me ardía y casi podría apostar que había quedado marca-

-SOLO CÁLLATE- se acercó a mi para así empujarme-

-¡Hey! Cual es tu jodido problema- se escuchó una voz detras de mi- te crees muy hombre como para golpear a una mujer- la voz de el sujeto se escuchaba cada vez más cerca

-Tu no te metas imbécil, este es un asunto entre mi esposa y yo

Por su vestimenta supe que era un hombre el cual en cuanto llegó golpeo a Tyler cerca de su mandíbula, obviamente el no se esperaba eso ya que se tambaleo un poco. Intentó golpearlo pero el lo golpeó en el estómago de manera que Tyler cayó al piso de forma brusca.

-¿Estas bien?- dirigí mi vista hacia el y me encontré con la mirada impactada de Ian-

-Yo... Si gra-gracias- asintió mientras veía a Tyler quejándose por el dolor-

-No creo que sea buena idea que te vayas con el, puedo llevarte a algún lugar si quieres- asenti antes de siquiera arrepentirme y lo seguí-

Su moto estaba cerca de ahí, el me ayudó a subir pero era un tanto incómodo por el vestido largo que llevaba. Encendió la moto y de inmediato rodee su torso con mis brazos, estaba lista para cambiar mi vida.

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