La visita a la clínica fue una de las cosas más difíciles para Amity, más que todo porque Luz se quedó dormida y aplastó su brazo lastimado, por ende, amaneció con un leve dolor en sus heridas. Amity faltó a clases para acompañar a su novia a la cita que tenían programa con la doctora Odalia.
Aún estaban en la sala de espera, sentados al lado del otro mientras veían a los doctores pasar con sus miradas fijas al frente. El olor era una fatídica combinación entre alcohol, medicina, suero y producto de limpieza. Algo que llegaba a las fosas nasales de la pelimorada y le hacía sentir náuseas.
—¿Falta mucho? —preguntó por enésima vez la morena.
Amity rueda los ojos.
—De seguro la doctora está ocupada con otro paciente, no te desesperes tanto.
—Tengo hambre y quiero irme a casa.
—¿Quieres que vaya a la cafetería de al lado y te compre algo de comer? —sugirió.
Luz decide mirarlo, en aquellos ojos amarillos como el sol, esbozó una sonrisa y tomo su mano para besar sus nudillos.
—No, pringada. Estoy bien así, prefiero comer contigo.
Amity tiñe sus mejillas de rojo ante el apodo, ya no se le hacía incómodo, mucho menos molesto, ya formaba parte de su forma de ser. La manera en como Luz la vio e identificó, y estaba bien así.
Unos segundos después se escucha la puerta del consultorio abrirse, Amity mira hacia el frente visualizando a la doctora Odalia. Una mujer con su hija salía, dándole las gracias por sus atenciones, sus ojos azules observan a las dos chicas sentados en espera.
—Lamento hacerlas esperar, pueden pasar.
Amity se levantó junto a Luz y entraron al consultorio de la mujer peliverde, ambas tomaron asiento en frente del escritorio.
—Me alegra ver qué estás mejor, Luz. —habla la mujer. Tus heridas de la cabeza parecen sanarse rápido.
—Algo así, Amity las sana siempre. —dice con sinceridad, sonrojando a la pelimorada.
—Eso es bueno, está dando excelentes frutos.
—Doctora, hemos pedido la cita porque hay un viaje mañana viernes en la escuela, la participación suma puntos para los que tienen baja nota, y bueno... Luz las tiene muy bajas, entonces, me preguntaba si estaba en condiciones de viajar. —cuestiona la pelimorada.
La doctora se cruza de brazos mirando a Luz y examinando su fuerza corporal.
—Tendría que revisarla antes, sígueme. —se coloca de pie para buscar sus cosas, Luz hace lo mismo para acercarse a la camilla y sentarse en la orilla.
Amity se mantuvo en su lugar observando a su novia.
—Quítate las vendas. —le ordenó.
Luz hizo caso y quitó las vendas de su brazo, la doctora examinó sus heridas con calma, viendo la profundidad de algunas y el proceso de cicatrización de otras.
—¿Intentaste quitar las ronchas? —interpeló de pronto.
Luz asintió—Si... me picaba y era muy molesto.
—Gran error, no puedes quitarlas, vas a dejarte una herida abierta y puede llegar a infectarse. —explicó— También veo que algunos puntos se han abierto, ¿Estuviste haciendo fuerza?
Luz alzó sus cejas y miro de reojo a Amity, la pelimorada desvió su mirada sintiéndose avergonzada.
La doctora pareció darse cuenta ya que enseguida carraspeó.
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Blue And Grey 🌂𐨿ᜒᐝ lumity
Fanfiction✎ › " Amity era el tono azul que pintaba el mundo oscuro de Luz, y Luz, era el tono gris que nadie apreciaba. Pero a los ojos de Amity, fue el color más hermoso que vio. Una chica incomprendida con mala fama. Una chica que sufría por ser quién era...