Amity mantenía sus ojos semi abiertos junto a sus dos pequeñas manos empuñadas sobre el pecho de su novia, la respiración cortada y el pecho subiendo y bajando con rapidez. Los largos dedos de Luz se mantenían sobre sus muslos blancos, acariciando cada marca que el menor mantenía como un recordatorio de su agonía.
Y se preguntarán, ¿Cómo terminaron de esta forma en un viaje escolar?
Pues, para nadie era un secreto que Luz, a pesar de tener su aura fría y aquel semblante serio todo el tiempo, en secreto adoraba y eran fan del cuerpo de su novia. Cada parte de Amity era como un pedazo de cristal para la castaña, tan hermosa, tan etérea y tan sublime. Incluso las marcas de guerra que la pelimorada puede tener, cada cicatriz desapareciendo en sus muñecas.
Luz seguía viéndola como alguien preciosa. Alguien que lograba encender cada luz apagada en su interior, era ese cielo azul que había pintado su mundo gris.
—L-Luz... —la suave voz de Amity gimiendo el nombre de su novia, hizo a la pelimorada tensar todos sus músculos, incluso los más lastimados.
Su brazo bueno rodeó la cadera de Amity haciendo inclinar un poco su cuerpo hacia el suyo donde estaba montado. Sus labios con los de la pelimorada se unieron en un fogoso beso, al mismo tiempo que las caderas de Luz se alzaban para introducirse en lo más profundo.
Amity rompió el beso para jadear, sus piernas estaban temblando cuando Luz entro en lo más profundo de ella. Se abrazó de su cuello soltando pequeñas lágrimas de placer, Luz volvió a inclinar sus caderas más profundo, la pelimorada grito intentando que su voz saliera poco audible.
—N-no.... puedo —susurro en su cuello, jadeando ante cada penetración profunda que le daba.
Eran las 3 de la mañana, posiblemente todos dormían en el hotel, quizás otros hacían las mismas cosas, o tal vez eran ellas las únicos amándose en la isla tropical.
—Nena. —musita la pelimorada besando su hombro.
Amity abre su boca para gemir cuando la morena dio una fuerte estocada. Amity arqueo su espalda dejando salir toda la excitación que tenía acumulada, Luz acarició su espalda húmeda para poder venirse dentro.
Los espasmos en su cuerpo fueron suficientes para saber que había dejado salir absolutamente todo de ella. Los latidos desenfrenados de su corazón poco a poco volvieron a su ritmo normal, Amity aún se mantenía sobre su cuerpo, exhausto y con una sensación llena en su interior.
Luz lo recostó a su lado para limpiar su vientre y apartar el cabello mojado de su frente.
La pelimorada la miró con un semblante agotado y satisfecho, el rostro de alguien que había sido muy bien atendida. Ambos se miraron fijamente, sintiendo la misma paz y sensación recíproca de cariño.
—¿No te duele tu brazo? —Le pregunta en un tono pacífico el más bajo.
—No utilice mucha fuerza, así que puedo decir que estoy bien.
Amity abulta sus labios, posando su mano sobre el pecho de Luz para rodear su cuello.
—Luz, quiero hacerte una pregunta sobre algo.
—Dime.
La pelimorada muerde su labio indecisa si decir aquello o no, ya que posiblemente su novia se moleste o piense mal de ella.
—Olvídalo, no importa.
Luz arruga su entrecejo—¿Qué es?
—No tiene importancia.
—Amity, solo dime, sea lo que sea no me voy a enojar.
Amity jugo un poco con los aretes en la oreja de Luz, cuestionándose mejor la pregunta que daría a continuación. La mirada tranquila de la castaña le demostraba de alguna manera que quizás no sea tan malo hablar de ello.
ESTÁS LEYENDO
Blue And Grey 🌂𐨿ᜒᐝ lumity
Fanfic✎ › " Amity era el tono azul que pintaba el mundo oscuro de Luz, y Luz, era el tono gris que nadie apreciaba. Pero a los ojos de Amity, fue el color más hermoso que vio. Una chica incomprendida con mala fama. Una chica que sufría por ser quién era...