NACIÓN Z [EDITADO]

036

CLARÍS

Mi madre se encontraba de nuevo en el sofá. —mi pequeña Clarís.

—Mamá— susurré —esto me supera.

—Lo sé, cariño. Pero tienes que seguir adelante. Debes ayudarlos— tomó mi mejilla y me dio una sonrisa.

—Ya no puedo— las lágrimas comenzaron a inundarme —Estoy a mi límite, mi cuerpo ya no puede con más . Muero lentamente, mamá— me acerqué a ella y le di un abrazo —Quiero rendirme.

—No debes. Brian te quiere muerta, recuérdalo.

—Entonces ¿cómo hago esto? Ya no encuentro la manera de seguir adelante.

—Toma mis fuerzas— sonrió —Te las daré para que continúes adelante. No puedes morir hasta que él muera— me dio un abrazo y se acercó a mi oído —Recuerda, no permitas que se apodere del mundo— susurró.

Lentamente despertaba. El sonido de las aves y pequeños susurros llegaban a mis oídos. Mi cabeza dolía y cuando abrí los ojos la oscuridad los invadió por un par de segundos. Los cerré y volví a abrir y entonces la luz llegó.

Trate de ponerme de pie, pero mis fuerzas no me lo permitieron.

—Ya despertó— oí una voz masculina, después giré mi cabeza y vi a Alan corriendo hacia mi.

—Mi amor— me dio una sonrisa —Que bueno que despertaste— se sentó en la silla que se encontraba junto a la cama y me tomó la mano.

—¿Qué pasó con Brian?— pregunté.

—El se fue, pero se llevó a Ron y dejó a su ejército al mando. Afortunadamente logramos vencerlos— respondió Alan.

—¿Dónde están mis hijos?— pregunté.

—Ellos están a salvo, pero no se encuentran aquí en este momento— respondió Erick, caminando hacia mi.

—¿Dónde están?

—Salieron de Pandora— dijo él.

—¿Cómo?— pregunté —¿Eso es estar a salvo para ti?— lo mire molesta y luego mire a mi esposo —¿Y tú los dejaste irse así como así?

—Ellos se fueron antes de que yo pudiera detenerlos.

—Debo ir a buscarlos ahora mismo— trate de levantarme, pero Alan me detuvo.

—No arriesgues tu salud de ese modo, nuestros hijos son lo suficientemente fuertes como para defenderse solos. No creo que nada malo les suceda.

—Pero…

—Confía en ellos— me dio una sonrisa y tomó mi mano.

—Bueno— sonreí también y volví a acomodarme en la cama. —¿Por qué Brian se llevó a Ron?

—No lo se. Él simplemente se fue con unos cuantos hombres de su ejército.

—Ya veo— susurré —Maldito hombre, ¿logró obtener la sangre de Alan?

—Me temo que si— respondió Erick.

—Mierda. Tengo que contarles algo— los mire a ambos.

—¿Qué cosa es?

—Siempre estuvimos encerrados aquí. Este es el llamado antiguo mundo y los infectados y nosotros hemos estado dentro del antiguo mundo. Brian me lo confesó, dijo que gobernaría el nuevo mundo junto a mi, crearía a su propio ejército y luego invadiría el nuevo mundo, el cual está libre de infectados. Esos son sus verdaderos planes.

—¿Qué?— el rostro de Erick se palideció —¿Cómo es eso? El mundo entero quedó contagiado— se acercó a mi —Lo sabias y no dijiste nada.

—El gobierno logró detener el contagio. Y lo olvide, mi mente estaba dañada gracias al disparo que recibí cuando morí la primera vez, por eso te lo digo ahora que lo recordé.

—Ya no importa— susurró y se giró. Después abrió la puerta de la habitación —Iré a ver a mi hija— susurró y salió.

(…)

Al anochecer, él volvió a venir y pocos minutos después mis hijos llegaron también. Alan abrió la puerta de la habitación y permaneció un par de segundos parando ahí , después corrió hasta mi y se aventó a abrazarme —Me alegra verte bien— susurró.

Ben también corrió a mi y los abracé a ambos —mis hijos— dije yo.

—Me preocupe cuando tus heridas no sanaban bien— susurro Ben —No vuelvas a preocuparnos así.

—No lo haré, lo juro— susurré y deposite un beso en sus frentes —Mi familia está de nuevo unida y no permitiré que Brian nos separe de nuevo.

—Sobre eso— Alan se separó de mí y se mostró serio —Brian planea invadir el nuevo mundo— dijo mirándome  —¿Tu lo sabías?— preguntó.

—Si, pero no lo recordaba— susurré.
—Tenemos que impedir que cumpla su objetivo. Salvaremos a los del nuevo mundo.

—¿Por qué lo haríamos?— cuestionó Erick —Ellos sabían sobre nuestra existencia y ¿Qué hicieron al respecto? Solo nos encerraron en este lugar.

—Ahora que sabemos que el nuevo mundo existe, podremos salir de este lugar e ir ahí— dijo Ben —¿No quieres que tu hija viva en un mundo normal?

—No se trata de eso. Brian es poderoso ¿Qué no viste lo que le hizo a Pandora? Nunca nadie había hecho algo igual.

—¿Olvidas que nosotros somos más fuertes que él?— pregunté —Los cinco experimentos que él creó, están aquí. Todos tienen odio hacia él, todos vamos a ayudarlos a vencerlos.

—Entonces, creemos un plan— sonrió —Llamaré a Jun para que organice a su ejército— Erick volvió a salir de la habitación y no regresó hasta después de alrededor diez minutos.

—Entonces ¿Enfrentaremos a Brian así como así? Conoces su fuerza y estoy seguro que ahora está creando a su ejército de experimentos— cuestionó mi hijo Alan.
—Lo se, también conozco nuestra debilidad. La forma de matarnos.

—¿Qué?

—La única forma de acabar con nuestras células madre es incendiarlas, ellas perderán la capacidad de regeneración cuando se exponen al fuego.

—¿Brian lo sabe?

—No— sonreí de medio lado —El cree que su creación es invencible, pero no lo es. Toda fortaleza tiene una debilidad.

—¿Qué haremos entonces?— preguntó Ben.

—Emboscarlos— los miré —Cuando Brian llegue aquí creerá que su plan funciona correctamente. Su ejército convertido comenzara a movilizarse dentro y en poco tiempo todos sus hombres ya estarán contagiados con el virus. Nos pondrá como señuelo para entrar al nuevo mundo y comenzará su plan de apoderamiento. Si logra hacerlo, tendremos que decirle adiós al mundo.

—Entonces ¿cómo lo vencemos?— preguntó Erick entrando a la habitación junto a Jun.

—La lluvia de flechas con fuego, eso matara a sus hombres. Primero evacuaremos a los pobladores, hacia el muro. El número uno y cinco irán con ellos para protegerlos. Mientras que el dos, tres y cuatro se quedarán conmigo. Brian creerá que he muerto y todo le será fácil, cuando el baje la guardia lo emboscaré y lo mataré.

—Pero él tiene a su marioneta— dijo él —Es poderoso, incluso más que tú.

—Bueno, eso es lo que él cree— sonreí —Es lo que les hice creer. Mi nuevo cuerpo, es poderoso, pero eso no lo saben ellos.

—Bueno, te creeré, solo no arriesgues tu vida.

—No lo haré, tú confía en mi— di una sonrisa y en seguida todos comenzamos a planear la forma más fácil de vencer a Brian y su ejército.