Cada vez más cerca del final 😭
⊹⊹Un gran, oscuro y frío abismo los espera.
Un escalofríos los recorre de pies a cabeza cuando ven una puerta desgastada rechinando y semi abierta frente a ellos. No era lo que esperaban ver a decir verdad.
Acababan de entrar a una puerta, cayeron y luego otra puerta más aparecía.
Leonardo toma sus espadas, sus hermanos lo imitan con sus propias armas y, con mucha cautela, caminan hacia la puerta, lo único visible que tenían en ese lugar.
—¿Qué pasa si no la encontramos? – Pregunta Miguel Ángel con mucho miedo, realmente aterrado, no solo con estar en ese horrible lugar que, tristemente, era la mente de T/N. Si no por el miedo a fallar en esa misión.
Leonardo hace una mueca. Incluso Raphael quiso decirle que nunca pregunte eso, que jamás se le ocurra volver a decirlo, sin embargo, sabe que es imposible, porque ahora caminaban en un pasillo oscuro sin entender hacia donde iban, solo sabían a dónde querían llegar y a dónde querían volver.
Un suave tintineo hace que se detengan.
Donatello toma su bō con fuerza antes de pensar en girarlo. Todo por si alguien lo tomara de sorpresa. Aunque fuera la mente de su amiga.
Una tenue luz en medio de aquel oscuro lugar.
Otro tintineo sonó antes de que pudieran ver en donde estaban.
Un inmenso cuarto lleno de escaleras que iban a todas partes. Era incluso más aterrador que la habitación de la que cayeron.
Las paredes estaban llenas de palabras escritas de manera irregular.
"Estúpida"
"Imbécil"
"Idiota"
Palabras que se volvían más fuertes de leer.
"Te odio"
"Nadie te quiere"
"Deberías morir"
¿Donde estaban realmente?
Otro tintineo suena.
Un suave sollozo logran escuchar, quién sabe de donde. Parecía difuso y resonaba por cada pared de aquel extraño y desolado lugar.
Leonardo comenzó a caminar, sintiendose extrañamente en alerta. Aún así, no se detuvo a pensar en que alguien podría estar siguiéndolos, él miraba las paredes rasgadas y llenas de palabras que realmente no podía pensar que ella las pensaba día a día.
Si tuviera que decir algo de T/N, es que para él, ella era una chica alegre. El recuerdo de su risa le decían eso.
Sin embargo...
—Chicos... – La voz de Abril interrumpió sus propios pensamientos. Podían verla a través de una imágen que colgaba de aquella sucia pared. —Una de estas puertas es la que los llevará a T/N. Deben apurarse, no sabemos que sucede si se quedan mucho tiempo allí. –
Leonardo asintió, volviendo a respirar con calma. No era tiempo de ponerse reflexivo, mucho menos de cuestionar el como ella se sentía y se veía a si misma. Debían encontrarla. Debían llevarla a casa.
—Estén atentos y revisen cada puerta. – Dió la orden, caminando con rapidez a una de ellas, no encontró nada interesante al abrirla, más oscuridad y un extraño ruido que venía de ella.
Se sentía extraño revisar todo.
Miguel Ángel abrió otra puerta, mirando hacia dentro, escuchó sollozos.
De repente, como un espejismo, se mostraba una extraña situación. En donde alguien le gritaba a T/N. Eran palabras hirientes.
Raphael cerró con fuerza la puerta. Sintiendo su corazón golepear en su pecho. Recordando con amargura lo que ocurrió aquella noche antes de que ella desapareciera.
—Este lugar... – Donatello miraba todo con asombro y con tristeza. —Creo que es algo parecido a sus miedos... –
—¿De qué hablas? – Preguntó Leonardo.
—Situaciones que la dejaron marcada... Cómo... Ya sabes... – No quiso decir más, pero todos comprendieron a lo que se refería.
Un sonido hizo erizar la piel de las tortugas. Rugidos, sollozos, quién sabe. Era horrible, escalofriante.
—¿Dijiste miedos y esas cosas? – Preguntó Leonardo una vez más.
—Traumas, temores, miedo, tristeza... Creo que este lugar es eso. – Respondió.
Se giraron con lentitud, viendo como por una de las escaleras se acercaba una extraña sombra. Era inmensa y el terror que sintieron al verlo los impulsó a correr.
—¡¿Qué es esa cosa?! –
—¡No lo sé! Solo corran, no se detengan. –
Parecía que les pisaban los talones.
No encontraban la puerta correcta y lo peor es que esa cosa los seguía, los acechaba mientras el sonido que emitía les hacía saber que ya casi estaba ahí.
—¡Abril! – Gritó Miguel Ángel asustado.
—¡Corran! ¡Que no los atrape! –
Seguían corriendo, intentando alejarlo. Realmente no se les pasó por la mente hacerle daño. Era parte de ella, quién sabe si pasaba algo peor.
—¡Solo quiero a T/N! – Gritó Miguel Ángel desesperado.
Y otra puerta frente a ellos apareció.
Esta vez bajo sus pies.
Esta era la puerta correcta.
ESTÁS LEYENDO
MISSING -TMNT Y Tú-
FanfictionT/N ha desaparecido. Nadie sabe en donde se encuentra, ni ella misma lo sabe. Lo único que se aferra a que jamás se pierda su memoria, son cuatro chicos. Cuatro chicos tortugas. Una búsqueda para encontrarla mientras ella busca una manera de ser...