𝐑𝐨𝐜𝐤𝐞𝐭 𝐐𝐮𝐞𝐞𝐧 𝐥𝐥 ~ 𝘌𝘥𝘥𝘪𝘦 𝘔𝘶𝘯𝘴𝘰𝘯

[15] Discordia 1.0

★ ⋆ Billy ⋆  ★

Ella me fascinó.

Ella se convirtió en una clase de obsesión, de esas que no te dejan dormir por las noches hasta que finalmente las obtienes. 

Estoy seguro que ella será mía.

Va a ser mía.

Es que ni siquiera me considero el villano.
O eso quiero hacerle creer a la chica que conocí en la playa.

Me interesó su manera de preocuparse, de proteger, de amar y cuidar. Como solía hacerlo mi madre conmigo cuando era pequeño.

¿Por qué no encontré a alguien así antes?

___ ___, era el prototipo de chica perfecta para mi. Era hermosa, amable, sentimental y muy fácil de manipular.

A diferencia de las perras que me he follado a lo largo de la adolescencia y adultez. Esta esta chica me costará un solo obstáculo llamado: Eddie Munson. El bastardo de su novio.

Es que ni siquiera llevan meses saliendo, como para endulzarla con mis cumplidos.

Lo he intentado y siempre termina justificando a su novio, o se pone a la defensiva, eso es un puto dolor de cabeza. Si tan solo conociera mi verdadera cara, no querría tenerme cerca de su vida.

O lo hacía, porque mi plan salió tan perfecto como lo imaginé, esta tarde que la invité a salir.

La verdad todo ocurrió tan sencillo. Salí del trabajo y me dirigí hacia uno de los moteles donde me suelo reunir con las mujeres que van a la playa a verme. Ni siquiera disimulan sus ganas de follarme. Esta noche, Stella, una profesora de química sería la afortunada de recibirme en su interior.

El semáforo cambió a rojo, en eso aproveché a observar el panorama de mi alrededor. ¿Y que sucedió? el bastardo estaba acompañado de otra chica que no era ____, al parecer ella lo perseguía por toda la calle. Eddie se giró y señaló al restaurante que estaba a escasos pasos de él. Entonces pensé en dos cosas.

Uno, Su novia debería estar en su casa.
Dos, la invitaré a ese lugar con el pretexto de seguir conociéndonos. Aunque odio las hamburguesas, y toda la comida que tenga que ver con la grasa.

Pero mentir una vez en la vida, no está nada mal.

—Lo siento, Stella, tendrás que follarte al recepcionista porque no llegaré a nuestra cita —encendí la radio comenzando a golpear el volante, mientras cambiaba de ruta a su domicilio.

Llegué, ella se impresionó al verme, la invité a salir y se opuso un par de veces pero al final la convencí.

Cuando llegamos busqué a su novio con la mirada, hasta encontrarlo en una de las mesas contrarias, firmando autógrafos sobre las playeras de unos niños pequeños. ____, se quedó en una especie de trance pero rápido la hice volver a la realidad.

¿Qué sucede contigo, encanto?, ¿hay algo que me estés ocultando?

Entonces le dije que fuera a buscar lugar, ella asintió y como buena chica obediente se retiró. Disimuladamente miré a Munson por el rabillo del ojo, los mocosos se habían retirado felices junto con sus padres, la chica que lo acompañaba aprovechó para levantarse del mueble y avanzar en dirección del baño.

Y como si el corazón de ambos, hablaran; antes de que ____ llegara a la última mesa, Munson se levantó del asiento para dirigirse hacia ella como un puto imán.

¿En qué momento la vio?

—Imbécil —susurró al pasarme por un lado. Lo tenía de espaldas, podía empujarlo y patearle el cráneo hasta matarlo. Como si pisara un coco con el pie.

Anteriormente había investigado sobre él, principalmente de los escándalos que estaba metido. Era una persona con ataques de ira, imposibles de controlar al momento. Sonreí con maldad al tener en mente mi siguiente paso.

Si, bueno, tampoco es que yo sea un chico paciente. Solo que esta vez sería la excepción, probablemente me costarán dientes, costillas rotas y sangre.

Pasó lo que tenía que pasar, mi teatro salió mucho mejor de lo esperado. La perra hizo muy bien de besar a Munson en la mejilla, ____ quería llorar y yo disfrutaba la escena, aunque me hacían falta unas buenas palomitas y un icee de cereza. Mi favorito.

Cuando ____ abandonó el lugar, Eddie empujó a Chiara para salir tras ella. Y como yo no estaba dispuesto a permitir eso, intervine.

—Será mejor que la dejes en paz —lo tomé del cuello de la chaqueta—. ¿No la escuchaste, idiota?, ella no te necesita.

—Aleja tus sucias manos de mi —las apartó con desprecio encajándome las uñas sobre la piel.

—Eddie no vayas, primero intenta remediar las cosas con tus fanáticos, no los decepciones —dijo la chica con acento extranjero—. Siguen grabándote.

—No quiero volver a perderla, Chiara. Si es posible renunciaré al contrato, así me multen con millones de dólares. La amo, es mi todo, es mi niña... —el maldito estaba dispuesto a perder la fama y trabajo por amor. Realmente la amaba, y me hervía la sangre de confirmarlo con mis propios ojos.

—Si no los pagas irás a prisión y será peor para ti —hice un conteo con los dedos—. Te costarán muchos años, tal vez cuando salgas ____ esté felizmente casada —presioné su hombro—. Las personas se cansan de esperar, y ella es una de ellas. Será mejor que la dejes tranquila, al rato se le pasará... o tal vez no —solté una carcajada retirándome del lugar.

Salí y busqué a ____ con la mirada, efectivamente seguía ahí. La nombre, no respondió, corrí hacia ella y me acerqué.

Había dicho que solo mentiría una vez, pero esta era la tercera. Probablemente la última de la noche.
¿Pensó que su novio iría tras ella? ja, no se equivocaba, pero yo lo evité y me llevé la mayor parte de los créditos.

La llevé a su casa, le ofrecí estancia en la mía y se negó. Esta chica era mucho más difícil que la tabla del siete.

Me retiré silbando con total felicidad, pues me confirmó que seguiríamos siendo buenos amigos. No quería perder mi amistad, y yo no quería perderla a ella.

⚃ ⚃ ⚃

Hola chicas✨. No se que decir... mejor me escondo entre las líneas para que no me fusilen como a Enjolras. 🏃🏻‍♀️