250 Km Charles Leclerc y Tu

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Charles abre la puerta de su habitación y caigo en cuenta que este es su lugar privado. Aún tiene algunas luces apagadas, entra después de mi y deja sus llaves en una mesita.

Las paredes tiene un color crema y tiene  algunas pinturas en la pared.

-¿Quieres algo de tomar?

-No

-¿Tienes tus preguntas listas?

Asiento, rebusco en mi libreta y encuentro las preguntas para Charles. El deja algunas luces apagadas.

Toma asiento a mi lado y coloca su brazo en el sillón.

Me doy cuenta de la horrible pregunta que le voy a hacer

-¿Alguna palabra para describir a Dafne Dubois?

La pregunta lo deja perplejo, se rasca la barbilla.

-Amorosa - dice

Trago grueso

-Es bellísima... - se detiene y me mira - No quiero hablar de ella

Asiento, las siguientes pregunta es todo sobre su carrera como piloto, la influencia de otros pilotos y su carrera desde muy pequeño.

Pasan al menos 30 minutos cuando le hago la última pregunta

-Sería genial - dice-Ganar en Mónaco aquí en casa.

Cuando sonríe lo hace de oreja a oreja. Quisiera conseder ese deseo.

-Charles eres muy buen en esto-dejo mi libreta a un lado - Quisiera que ganarás tu

-¿Y Carlos también?

Asiento, se acerca un poco más a mi.

-Estabas muy cerca de Carlos - dice

-No es asunto tuyo, esta soltero

Su labios forma una línea recta

-¿Por qué Ferrari?

-¿Por qué?

-Si

-Me emocionada la idea de conocerte y escribir sobre ti. También sobre Carlos

Sonríe, sus dientes son lindos y sus ojos brillan en medio de las luz cálida.

-Perdón por decir sobre tus tontas preguntas, en realidad desde que te conocí fue muy especial

-Lo sé - lo miro - Entiendo la presión sobre tu novia

-No quiero pensar en ello ahora

-Esta bien Charles - digo mirando mi reloj, Carlos

-De seguro quieres ir a comer con Carlos

No, quiero quedarme aquí para hablar contigo toda la noche.

¿Acabo de decir eso?

Charles nota que ya casi estamos demasiado cerca que nuestros hombros se empiezana rozar. Nuestras miradas se encuentra, sus ojos claros se encuentran con los míos, su mano se dirije a mí cabello y lo acaricia.

Trago fuerte y siento como mi pecho empieza acelerarse.

-Me gusta tu cabello

Dios mio quiero decir algo, pero sus dedos se pocen en mis labios. Abro un poco los labios. Se que estamos  aún más cerca porque puedo sentir como si respiración esta a centímetros de mi.

Sus ojos vagan por mi cuerpo.

-Charles

Alzó mi mano para alcanzar su mejilla y aunque estoy temblando, mis dedos rozan su piel y me quedo enamorada de lo suave que es. Lo fina que es su nariz.