III. Capitulo 16

394 18 0
                                    

-Charles Leclerc y ________ han sido vistos nuevamente -dice Sofía-. Charles Leclerc y la jefa de comunicaciones de Mercedes en posible romance nuevamente.

-Sofi -digo mirando mi tablet-. Para.

-Es que la prensa ya está hablando -dice-. Deben hacerlo oficial.

-Bueno, si gana hoy -digo-. Recuerda que soy de Mercedes.

Ella sonríe.

-Aún falta para la carrera. ¿Vamos a ver a Arthur?

Charles sonríe detrás de la puerta al escuchar a Sofía.

-No puede estar aquí -dice-. Es el motorhome de Ferrari.

-Y yo busco a mi novia.

Sofía rueda los ojos y se levanta.

-Vigilaré afuera.

Asiento. Con una amplia sonrisa, Charles se acerca a mí y me da un beso en los labios.

-¿Me deseas suerte?

Asiento sonriendo, me acaricia la mejilla y me observa detenidamente.

-Solo quiero regresar a Mónaco para ver a nuestro bebé -dice-. Pasar un tiempo juntos.

-Así será -lo beso-. Suerte mi amor.

Sonríe y me da un abrazo. Sofía se asoma.

-Es mejor que se apuren.

Sonrío y Charles sale de la oficina. Sofía hace un puchero al sentarse.

-Al principio creía que era Carlos -dice-. Pero ustedes dos son muy tiernos juntos.

-Ya ves que sí -digo-. Ven vamos a trabajar.

Antes de la carrera, me dirijo al centro de operación para hablar con Carlos. Al verme, sonríe.

-Faltaba verte para poder salir -dice-. ¿Estás bien?

Asiento.

-¿Podemos hablar después de la carrera?

-Claro -dice-. Nos vemos más tarde.

Me siento al lado de Toto mientras los coches se van alineando.

-Estás tenso -digo-. Pareces un robot.

-Como tú -dice-. Tenemos que hablar sobre Ferrari.

-¿Qué cosa?

Se gira para verme.

-¿Piensas que no se que nos dejarás después del patrón?

Susie me mira.

-Toto, lo podemos hablar después.

Me coloco los audífonos y mientras la carrera empieza, todo transcurre normal, aunque Toto maldice otra vez. Charles lleva el mejor tiempo y mejor ritmo, pero Carlos le va pisando los talones; en algunas ocasiones se igualan, pero Charles vuelve a tomar posición.

-Es muy bueno Charles -dice Toto-. Lástima que sea de Ferrari.

Sonrío y yo sonrío, pero la sonrisa nos dura poco cuando escuchamos por la radio y las pantallas cómo Carlos choca el monoplaza de Charles haciéndolo girar varias veces y estrellándose contra los bordes. El monoplaza de Carlos da vueltas y se detiene. Me llevo las manos a la cabeza.

-Charles -mi voz es ronca.

Carlos vuelve a la pista, me quito los audífonos.

-Charles -lo llaman por la radio.

Mi corazón empieza a latir fuerte, tan fuerte que siento que he dejado de respirar. Me llevo las manos a la boca y mis lágrimas empiezan a caer.

-No responde.

250 Km Charles Leclerc y TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora