II. Capitulo 12

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Toto y Susie conversan conmigo. Susie ha hablado con Toto y está molesto.

-Mira, una verdadera opción que te puedo ofrecer -dice Toto-. Es ponerte en Brackley por un tiempo, al menos hasta la próxima temporada.

-Sí, pero eso implicaría dejar a la prensa -digo-. No, mi reputación con Ferrari y ahora esto.

-Tiene razón -dice Susie-. Podría dar de que hablar

Toto me mira.

- ¿Ya has hablado con Ferrari?

-Sí, pero no de esto

-Y no lo harás -dice Toto-. Maldito Ferrari, es rápido la verdad

-Toto -dice Susie-. ¿Qué podemos hacer?

-Podemos traer a Leclerc a Mercedes en lugar de Carlos -dice Toto-. Es cruel, pero sería una salida rápida.

- ¿Es posible? -pregunto-. ¿Toto?

-Sí, podemos negociar con Charles, pero solo si él acepta.

-Pero es Ferrari -digo-. No va a aceptar.

-Si no acepta -dice Toto-, es porque no te ama y dos por...

-Toto -Susie lo regaña-. No hables así.

Será un escándalo -dice Susie-. Se lo propusimos a Carlos.

Me siento un poco culpable de hacerle esto a Carlos, pero es una salida rápida como dice Toto. Una opción para salir rápido de un problema que parece no tener salida. Me despido de Toto y Susie, y una sonrisa se dibuja en mi cara, a pesar de que Charles y yo no habíamos hablado en todo el día. Siento que existe una posibilidad. Faltaba la respuesta de Charles.

El sábado por la mañana, estoy peinándome el cabello cuando alguien toca mi puerta. Una chica del servicio me entrega unas flores.

- ¿Usted es la señorita Leclerc?

- ¿Perdón?

-Son de parte del señor Leclerc -dice-. Su novio.

Ella sonríe divertida, tomo las flores y ella se retira. Llevo las flores a mi mesita de noche y leo la carta.

"Se que quizás te he fallado muchas veces, pero es cierto que te amo. No la volveré a ver más en el Paddock".

Sonrío, esas son buenas noticias. Sacudo la cabeza divertida y unos minutos después Charles está detrás de la puerta.

- ¿Me dejas pasar? -pregunta-. Te he estado extrañando mucho.

Asiento, se acerca a mí y me envuelve en un abrazo. Charles toma mi rostro con sus manos.

-No me dejes nunca más -dice-. Y perdóname por permitir cosas que te hacían sentir incómoda.

-Charles, no quiero volver a ver eso de nuevo.

Asiente y me da besos por todos lados de la cara.

-Toto me habló -dice.

Trago grueso, al verme asustada, sonríe.

- ¿Le has dado tú la idea?

-Fue idea de él -dice-. ¿Qué dices?

-Es posible -me acaricia la mejilla-. Pero uno de mis sueños era crecer con Ferrari.

- ¿Eso qué significa?

Me mira y me atrae hacia él.

-Que haré lo que sea para que estemos bien -dice-. También he conseguido una reunión con un patrocinador y con la directiva.

250 Km Charles Leclerc y TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora