like it's a game - larry (traducción)

I

Capítulo 1: El Principito.

Suena el timbre de la puerta. Ya sabemos quién es, así que dejo que Ciel corra a abrir la puerta, encontrándome con Niall y Mila, mis mejores amigos, compañeros y padrinos de Ciel. Habíamos quedado para ir juntos al partido, así que estaba esperando a que llegaran.

Niall y Mila son una pareja, la más guapa que he visto nunca. - Siempre están en casa para ponerse al día, lo que significa cotillear. Son mis mejores amigos, así que siempre estamos juntos, ya sea colándonos en el baile del colegio cuando éramos adolescentes, curando un corazón roto, peleándonos por tonterías o disfrutando de una ajetreada noche de fiesta. El amor y la compañía que nos tenemos es lo más bonito.

Niall y Mila fueron los primeros en saber que iba a ser madre. Puedes imaginarte lo felices que estaban. Ciel no podría tener mejores padrinos. Cuando se reúnen los cuatro, montan el mayor lío de la casa y no tardo en estar junto a ellos, rodeado de un mar de risas y bromas.

-- ¡Tío, Niall! ¡Tía, Milla! - exclama emocionado Ciel, saltando sobre sus brazos.

-- ¡Te hemos traído un regalo, principito! - dice Mila, entregándole un paquete a Ciel, que sostiene el regalo, sonriendo emocionado.

-- ¿Qué es esto? - pregunta.

-- ¡Ábrelo y lo sabrás! Estamos seguros de que te encantará. - dice Niall, dejándolo en el suelo.

Ciel se apresura a abrir el regalo, rasgando el envoltorio para sacar una camiseta del Paris Saint Germain, con el número 28 escrito en la espalda junto con 'Ciel Styles'.

-- ¡Wow, eso es genial! - exclama Ciel sonriendo completamente feliz, con los ojos brillantes y todo. -- ¡Mira, mamá, qué bonito!

Viene corriendo a enseñármelo.

-- ¡Muy bonito, corazón mío! - Sonrío cariñosamente. -- Dale las gracias a tus tíos y ve a ponértelo para que mamá vea cómo te queda.

-- ¡Gracias, tíos! Son increíbles. - Exclama y corre al dormitorio.

-- Nunca se cansan de mimarlo, ¿verdad? - pregunto divertido y ellos se encogen de hombros.

-- Queremos lo mejor para él, y verlo feliz no tiene precio. - Dice Mila con una sonrisa. Niall y yo estamos de acuerdo.

-- Bueno, ¿están emocionados por el partido de hoy? - Niall pregunta y yo suelto un suspiro.

-- Para ser honesto... Ni un poquito, pero que no hago por Ciel. - Dramatizo y ellos comienzan a reír. -- ¡Hablo en serio!

-- No dramatices, Harry. Los partidos de fútbol son pura emoción. - Dice Mila, tratando de hacerme cambiar de opinión.

-- No veo cuál. - Sigo a la defensiva y ella pone los ojos en blanco. -- ¿Qué gracia tiene correr detrás de un balón? Y te diré una cosa.

-- Oh, está a punto de empezar. - Niall me interrumpe riendo. Resoplo y me cruzo de brazos.

-- ¡Vamos, Harry! ¿Vas a decir que no te gusta ver a esos hombres en forma, calientes, sudorosos y tatuados corriendo detrás de una pelota? - Mila se burla, sonriendo, y yo hago una mueca.

-- ¡Qué horror! Odio el fútbol. Fin de la discusión. - Me tapo la nariz, haciendo teatro. Se miran y empiezan a reírse. ¡Ríanse de mí! -- Dios mío, eres terrible. Mejórate, por favor.

-- ¿Te imaginas ser el "marido trofeo" de un futbolista buenorro y sano? - Niall bromea y yo me río.

-- ¡Nunca! ¿Has oído bien? - Niego inmediatamente, haciendo una mueca. Dios mío, qué pesadilla. -- Toco madera. - Toco madera tres veces. -- Creía que eran mis amigos... Nunca les había visto desearme tanto mal.