Capítulo 8: Modelar de madrugada y besos de buena suerte.
El corazón me late deprisa en el pecho y me sudan las manos. Mi respiración es agitada y siento que la ansiedad se apodera de cada centímetro de mi cuerpo.
Ahora me preguntan: "¿Vas a tirar el penalti? ¿O es una final de campeonato?". Ni lo uno ni lo otro. Es diez veces más difícil: voy a desfilar.
Sí, yo, Louis Tomlinson, futbolista, estoy a punto de desfilar con un conjunto cuyo nombre ni siquiera sé pronunciar y sin haber pisado nunca una pasarela.
¿Qué podría salir mal? Para ser sincero: todo.
Cuando dije que siempre hay una solución, no me imaginaba que Harry me miraría y me diría: "¡Vas a ponerte en los zapatos del otro modelo!". Qué sencillo. Una gran idea.
Pero contrasta con la parte de que nunca he hecho una pasarela y no tengo ni idea de cómo hacerlo.
Y ni siquiera me dio tiempo a decir que eso no iba a pasar porque pronto ya traían el look con el que voy a abrir el desfile: pantalón negro y blusa negra transparente con unos diamantes aportando un extra de encanto y brillo al look. Y por si los diamantes no fueran suficientes, llevo un collar que eclipsa cualquier otro brillo.
Estoy sentado en una silla frente a un enorme espejo mientras Mila me aplica rubor y algo más que no tengo ni idea de qué es. Veo a Harry a través del espejo y, a pesar de todo el nerviosismo y la ansiedad, sonrío en su dirección y él me devuelve una sonrisa con hoyuelos.
-Déjame terminar aquí, Mia. Gracias. - Harry sonríe, toma la brocha del rubor y me lo aplica en la mejilla. -- ¿Cómo te encuentras?
Me pregunta Harry por lo que sería la décima vez en poco tiempo. Siempre se asegura de que estoy bien.
-- Nervioso. - Respondo lo mismo que antes y respiro hondo.
-- Es más fácil que jugar a la pelota. - Intenta tranquilizarme.
-- Estás mintiendo. - acuso y Harry se ríe.
-- No miento - me asegura, dejando el cepillo y apoyándose en el espejo frente a mí. -- Mira, respira hondo, mantén la postura, mira al frente y desfila.
-- Haces que parezca fácil. - digo cerrando los ojos e intentando relajarme.
-- ¿Quieres rendirte? - pregunta Harry en voz baja, mordiéndose el labio con aprensión. -- Si quieres, está bien. No pasa nada. Encontraré otra manera.
-- Eh, Harry - me levanto de la silla y me acerco a él, sujetándole la cara entre las manos. -- No me voy a rendir. He dado mi palabra y lo haré por ti. Haría cualquier cosa por ayudarte.
Harry sonríe. El corazón se me para unos segundos y siento un pequeño escalofrío en el estómago. Siempre es así. Harry sonríe y me siento en el paraíso.
Sé que el paraíso es hermoso porque Harry existe.
Y hay algo en Harry que hace que no quiera quitarle los ojos de encima. Algo como... ya ves; ojos verdes, verdes, tan verdes como las primaveras. Labios rojos y tan... besables. Me pregunto a qué saben. Una sonrisa encantadora y unos hoyuelos profundos que me dan ganas de meterle el dedo. Y un aura... un aura apasionada. Tan hermosa y sencilla. Por no hablar de su amabilidad y elegancia. Imposible no sentirse encantado por él.
-- Gracias, Louis. Me estás salvando la vida. No puedo agradecértelo lo suficiente. - Dice Harry, despeinándome el flequillo.
-- No tienes que agradecérmelo. Siempre estaré aquí para ayudarte, pase lo que pase, incluso modelando en mi tiempo libre. - Suelto una risita, haciendo que Harry se ría también.
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like it's a game - larry (traducción)
FanfictionA pesar de odiar el fútbol, Harry decide llevar a su hijo Ciel a ver un partido del equipo de su corazón, pero por un accidente pierde a su hijo en medio de la multitud. Desesperado, sale en busca del pequeño, sólo que no esperaba encontrarlo en bra...