setenta y uno: ✓

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Era un nublado, pero amoroso día de Agosto del 2020, a nada del cumpleaños de Cheol, pero qué importaba cuando sus dos amigos están realizando sus votos matrimoniales frente a una llena asistencia de familiares y amigos. Hace seis meses que MinGyu le pidió matrimonio a Yuri, luego de siete años de relación y sin ningún obstáculo. Ambos ya tenían ahorros suficientes, un trabajo de repuesto y terminando con éxito sus estudios. Además, estaban empezando a pagar su primera casa.

SoonYoung y ChaeMin también expresaban sus deseos de llegar al altar algún día. Por otro lado, SeungKwan, quien había debutado recientemente en un afamado musical y un popular mini drama de catorce capítulos, vivía una tierna vida de enamorado con Gyuri. Este había regresado hace un año, aunque se las pudo arreglar para juntarse con su amada cerca de los sets de grabación. Y, para bien, hizo pública su relación antes de debutar, por lo que todo su éxito estaría intacto.

Para nuevas buenas, Minghào y Hara habían empezado a salir hace unos pocos meses e iban sin tropiezos, en el sentido de competencia y gasto de energía. De hecho, fue por ella que Minghào dejó un poco eso de tener sexo con tu novia a la semana y vivir con ella como matrimonio. Fue más responsable y consecuente con sus actos, tanto que decidió empezar a asistir a templos espirituales con ella; a ese nivel de cambio.

SeokMin no se encontraba por viaje de negocios, debido a que fue ascendido en su trabajo a administrador de su área y tiene que hacer diversas diligencias, pero su tarjeta de felicitaciones fue entregada por un cartero a la entrada de la iglesia.

Al fondo de todos, uno en cada fila de bancas, Cheol y Junhui, de vez en cuando se miraban, llenando su cuerpo del nupcial espíritu de un matrimonio que terminaba sus dichos para dar inicio a los anillos y al beso que cierra el compromiso para hacerlo un hecho: ¡MinGyu y Yuri ya son marido y mujer! Y fueron más de uno o dos besos. Ninguno quería separarse, aún con los aplausos y la reverberación de estos.

Con unas sonrisas tan amarteladas por quién las genera, salen sosteniendo el brazo del otro, pétalos sobre ellos y los abrazos de cada uno de sus amigos. SoonYoung fue el llorón de la celebración, quien no podía creer que sus mejores amigos ya estaban casados.

Saliendo del templo, con un gran auto esperando por ellos, todos fueron invitados a una gran cena de celebración para culminar la velada, antes de que la pareja recién casada tuviera su espacio único e irrepetible en su luna de miel. En propias palabras de MinGyu, no lo volvieron a repetir desde que lo tuvieron en casa de SeokMin, por culpa de no poder reservarse. Pero el tiempo borró algunas cosas que podrían revivir con éxito y legitimidad.

—¿De qué sexo será su primer hijo? —preguntó Gyuri al resto, a las afueras del templo.

—Será niño —afirmó ChaeMin.

—Yo igual lo creo —dijo Cheol.

—¿Por qué no una niña? —preguntó SeungKwan—. A mí me gustaría una niña, y creo que a MinGyu también.

—Creo que te has quedado con tu papel en "¡No soy su padre!".

—¿El mismo que me hizo ganar tres premios? Sí, ese mismo.

—Hablando de eso... —les dijo Minghào, apuntando a un grupo de personas escondidas cerca de la fila de autos, en su mayoría mujeres con libretas en sus manos—. Estoy seguro de que te buscan.

—¿Cómo puede ser así? —sorprendido dijo SoonYoung—. Si es así, ¿cómo pueden saber en dónde estás?

—¿Crees eso poco? —casi ofuscada, preguntó Gyuri—. Una vez, cuando SeungKwan y yo fuimos a comer, unos niños se acercaron por un autógrafo y una foto. Como mi amor es tan generoso, en especial con los niños, lo hizo sin problemas y hasta dejó que le apretaran sus cachetes que con tanto amor masajeó.

Miaw! Mío • JunCheolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora