Sanha no soltaba a Gyuri, SoonYoung no dejaba respirar a ChaeMin de tantos besos, Hara inmutable ante el amor, Cheol seguía comiendo y Minghào seguía empujando la pared con su espalda.
—Chicos —le dijo Minghào a la pareja que parecía prepararse para ver quién devora a quien—, si quieren hacerlo, les presto mi habitación.
—Solo debías decir que nos calmemos —responde el hombre mientras peina a su novia.
—Hombre —dijo Sanha—, estás muy amargado últimamente.
—No te metas en lo que no te incumbe.
—¡Ok! —se levantó, llamando la atención de Gyuri—. Al menos dime que me prestarás tu habitación.
—¿Traes condones? Los míos se han acabado.
—¿Sanha? —preguntó Gyuri con miedo.
—No, no haremos eso. —levantó a Gyuri del asiento y la abrazó—. Quiero echarme una siesta, y creo que Gyuri también.
—¿Yo?
—Te veo muy agotada. —le da un beso en la frente—. ¿Quieres? Te voy a dar las mejores almohadas.
Viendo que nada se lo impedía, y que realmente no tendría manera de intentar hacerlo en una casa ajena y sin protección, añadiendo el sueño que se duplica, accedió.
—¿Por qué a nosotros no nos advertiste sobre los condones? —regañó SoonYoung.
—¿Crees que se ven priorizando un condón ante sus evidentes ganas? Tampoco deben disimular que no pueden aguantar mucho tiempo.
—¡Oye! —ofendida se levantó ChaeMin—. ¿Cuál es tu problema? Últimamente te has comportado descortés.
—Sí, como ustedes digan —responde desinteresado y se dirige a la cocina.
—SoonYoung, no voy a soportarlo más. Tal vez en casa de SeokMin le dejé pasar su mal humor, pero ahora no lo toleraré.
—ChaeMin, oye —igual se levantó—, descuida. Minghào no es una mala persona y lo sabes. Solo debe estar estresado.
—¿Por qué hizo una fiesta? Si tan estresado está, lo lógico es no hacerla. —agarró su chaqueta del perchero y se la puso—. ¿Vamos a mi casa? Tal vez estén mis padres y tengamos una cena con ellos, en vez de soportar más insolencias.
—Déjame hablar con él y le diré, ¿está bien?
Y con un beso de consolación en sus labios, SoonYoung va a la cocina con claros fines de solo avisar su ida, mas no a pelear.
...
SeungKwan le escribió a Cheol que había un tráfico agobiante, aunque ya tenían las cosas en la camioneta de MinGyu y que no demorarían mucho en llegar, si es que la creciente tormenta de nieve se compadece de la gente. Ese rato fueron diez minutos, e imaginen estar diez minutos en la sala, a solas con tu ex pareja, que tampoco tenía mucho que hacer para centrarse en eso y no en que estaba con su ex pareja en el mismo lugar.
Para cambiar de ánimo, Cheol se levanta para ir a la cocina y beber un poco de agua. No era muy fanático del agua, pero hidratar su cerebro podría servir de algo.
—Puedes pedir permiso antes de abrir la nevera —aconsejó Minghào.
—Oh, me olvidé de que estabas acá. —la cerró con su botella de agua en mano.
—No me sorprende. —se dirigió a uno de los muebles y sacó una bolsa llena de Doritos picantes.
—¿Por qué hiciste una fiesta si no pareces estar bien para mantenerla?
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Miaw! Mío • JunCheol
FanficLa adolescencia, puerta y portal a la vida adulta de cualquier chico coreano en pleno 2015 parece ser la misma para todos, donde escuchar a los grupos de moda y salir para estudiar o disfrutar del centro comercial es el panorama central. Pero no sie...