5. Intriga

1K 131 11
                                    

—Buenos días —saludó neutral —¿Preguntas sobre qué?

—Es sobre el caso de desaparicion del joven Lee Felix.

—Bien, pasemos a mi oficina entonces.

Cuando ambos estuvieron cómodamente sentados en la oficina de Hyunjin y con indicaciones de no ser interrumpidos, fue cuando el detective empezó su trabajo.

—Como sabrá el pasado miércoles el joven Felix fue visto por última vez cuando laboraba en este hospital bajo su cargo. Después de que termino su turno no se volvió a saber nada de él.

—Algo vi de eso hoy en las noticias cuando desperte. —Se recargó en el respaldo de la silla.

—¿Hasta hoy vio la noticia? —El detective alzó una ceja, incrédulo.

—Si, hasta hoy supe que desapareció oficialmente —Hyunjin alzo los hombros.

—¿Y qué estuvo haciendo todo esté fin de semana? —El detective anotaba algunas cosas en una pequeña libreta que portaba —. Intente contactarlo, pero me fue imposible, no atendía el celular.

—El fin de semana es mi tiempo de descanso, me mantengo desconectado del mundo.

—¿Y sus pacientes? ¿Qué pasa si se presenta alguna emergencia?

—Mire detective me esforcé mucho por tener este puesto en el área privada para así no estarme preocupando por ese tipo de situaciones —Inclinó su cuerpo sobre el escritorio apoyando sus codos en él —. Además de que el personal sabe perfectamente que apagó el celular desde el viernes en la noche cuando salgo de aquí y lo vuelvo a encender hasta los lunes por la mañana. Tener este trabajo es muy estresante y aprovecho al máximo los privilegios que todos estos años de sacrificio me han brindado, como lo es el tener mi fin de semana libre.

—¿Y no le preocupaba ni un poco en que no había tenido noticias de su residente?

—La verdad no —Se encogió de hombros —. Fuera de este hospital Felix no es mi responsabilidad. Además de que no somos cercanos, no tenemos más de dos meses de conocernos y solo nos tratábamos por cosas profesionales.

—El novio de la víctima afirma lo contrario —Hojeó unas cuantas páginas para atrás en su libreta hasta que encontró el testimonio de Jeongin —. Él afirma que usted tenía un interés poco ético hacia su novio, nos contó que creía que usted lo acosaba durante el trabajo.

—Jeongin siempre estuvo celoso de mí, me creía una amenaza para su relación y se hacía cuentos en la cabeza para apaciguar sus propias culpas —dijo después de soltar una pequeña risa burlona.

—¿Culpas? ¿A qué se refiere?

—¿A oído decir que el león cree que todos son de su condición? —Junto el entrecejo —. Pues Jeongin seguramente creía que Felix podría engañarlo ya que él hacía lo mismo.

—¿El joven Jeongin engañaba a su novio?

—Si no me cree puede preguntarle a cualquiera, es un secreto a voces.

—¿Entonces usted afirma que Jeongin solo se hacía ideas sobre su supuesto interés en Felix?

—Si, así es.

—¿Esta seguro que no tenía ningún interés extra profesional con el susodicho?

—¿Me está acusando de algo acaso? —Levantó una ceja —. Si es así permítame llamar a mi abogado.

—No se ponga a la defensiva, solo estoy tratando de reunir pistas para dar con el paradero del joven Lee.

—Pues comigo no resolverá nada —Volvió a recargarse en su silla —. No tuve nada que ver con eso. Yo aún estaba trabajando cuando él se fue. De hecho —Sacó su celular —. Puede checarlo aquí —Le pasó el aparato con el chat de Felix abierto —. Ahí están los mensajes que envíe ese día donde le encargaba que hiciera unas cosas antes de irse y dónde él me avisó que había terminado y se iba a casa —El detective leía, dándose cuenta de que era verdad —. Después dejó de responder.

PerdiciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora