Extra V. Sueño de inventario

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Lan WangJi cerró su paraguas mientras se abría paso por la entrada de la cafetería donde trabajaba. Colocó el paraguas sobre la base, evitando con ello causar un desastre con los restos de rocío impregnado. Las lluvias del exterior anunciaban la llegada de la primavera y se mantuvieron intensas en los últimos días. Lan WangJi disfrutaba la sensación fría y refrescante en la piel, pero hubo ocasiones donde la humedad se le pegó a la piel y le hizo sentir incómoda. Reajustó su bolso para evitar que se cayese del hombro y caminó en línea recta.

Notó las luces artificiales encendidas en la trastienda. Lan WangJi se vio satisfecha por la limpieza del área y lo despejado que parecía el pasillo una vez que las cajas de mercancía habían salido del camino. Lan WangJi palpó el bolsillo de su abrigo para asegurarse de que no se había perdido sus par de guantes. Guardó los mismos al interior de su bolso y se giró hacia el tablero de corcho para mirar el horario de la semana y los roles asignados para ese día.

Llamaron a la puerta, sacudiendo brevemente a Lan WangJi. Dio un respingo frente a la sorpresa y a escasos centímetros apareció el rostro de Wei WuXian con su particular sonrisa. Lan WangJi imitó y su corazón se tranquilizó. Wei WuXian vestía el uniforme a jugo sin delantal. La camisa blanca se dobló en las mangas y los pantalones negros se ajustaron a sus curvas pero sin dejar las lineas rectas en un estilo más sobrio y menos osado.

"Hola, Lan Zhan", llamó. La curva en sus labios apenas desapareció. Su cabello parecía desordenado y con un secado irregular. Tal vez, se mojó de camino al café y adquirió aquella forma atípica. Esta misma enrolló un par de jis para mantener el moño bajo en orden y Lan WangJi se hipnotizó con la esencia picante y el perfume que evocó a la dulzura de los lotos.

"¿Wei Ying... se mojó de camino aquí?" preguntó, señalando con una uña pintada. "Tu cabello..."

"Oh, caminé hasta aquí". Añadió. Se encogió de hombros. "Pasó un automóvil, así que sostuve el paraguas de lado para que no me salpicará, pero estaba debajo de una esquina de un edificio donde el agua estaba saliendo, así que me empapé". Lan WangJi se estremeció un poco. "Lo secaría con las toallas de papel, pero la última vez tuve pelusa en el cabello todo el día".

Lan WangJi sintió el incontenible instinto protector brotar en ella, se deshizo de su gabardina y la dobló sobre el codo. "¿Es así?, podría llevar a Wei Ying a casa a la hora de la salida".

"¡Gracias!", Wei WuXian dijo. Sus brazos se posaron en la cadera alta y Lan WangJi reaccionó. "Te recompensaré. Te llevaré a un lugar lindo".

Nie Huaisang salió de su oficina, y Lan WangJi se apartó como si la piel le quemase. Wei WuXian parpadeó con sorpresa. Confundida ante el rechazo. Huaisang apenas dio un segundo pensamiento a ambas mujeres. Sin embargo, cuando sus ojos se encontraron con los de Wei WuXian este entrecerró su mirada y vio con sospecha a su mejor amiga. Finalmente dejó ir el asunto. Lan WangJi huyó al frente y se dedicó a atender la barra.

"Hey, Lan WangJi", llamó Luo Qingyang. Tomó algunas de las notas de Mo XuanYu y comenzó a preparar las órdenes antes de que WangJi se hiciese con su propia voz. Tras pocos instantes ella se pronunció y dijo: "Un té de burbujas con sabor a especias".

Lan WangJi tomó la bebida y leyó el número de la mesa. Caminó entre los pasillos y lo llevó al sitio asignado con una sonrisa corta y servicial.

El resto del día transcurrió en la misma rutina repetitiva que acostumbraba en días de lluvia y bajas temperaturas. Los clientes corrieron de aquí a allá y encontraron un refugio en el café para pasar el mal tiempo. Lan WangJi sirvió orden tras orden hasta que el flujo de clientes aminoró. Huaisang se despidió con gran fanfarria y se montó en su auto para concluir sus obras de arte pendientes. Se había anunciado una exhibición para la primavera, pero aún faltaban piezas por terminar de pulir.

Todo lo bueno en la vida me lleva a tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora