Capítulo treinta y siete

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Richard.
25 de diciembre, 2023.

Observo a Jenna desde una de las sillas que hay en el mini estudio que le hice en la casa, ella se encuentra delante de un lienzo y trato de averiguar que es lo que esta pintando. Tuve la idea de comprarle varios lienzos para que no estuviera tan aburrida mientras guarda reposo, pero también estamos manejando las cosas de la nueva casa desde acá.

—¿Crees que esta quedando bien? —pregunta desde de casi no hablar.

Me levanto para caminar hacia ella y poder ver lo que ha dibujado en estas dos horas que llevamos aquí.

—Amor, aquí el que menos sabe de arte soy yo—analizo el lienzo—Pero de una opinión cero profesional me gusta. Esos trazos amarillos con morado que usaste para el cielo me gustan, también la ligereza en la que dibujaste a las dos personas de la mano.

—Siento que le falta algo más, pero no se que—veo que se va a llevar su mano llena de pintura a la cara.

—Ten cuidado, tus manos están llenas de pintura.

Sonríe y se da la vuelta, la ayudo a levantarse para estar casi cara a cara. Sus brazos rodean lo más que pueden mi cintura y reposa su cabeza en mi pecho, dejo un beso en su cabeza y la escucho suspirar.

—No quiero alistarme—la escucho quejarse—Me quiero quedar durmiendo.

—Le prometiste a Lizzie que iríamos, tenemos que ponernos en marcha porque se nos hace tarde.

Suspira y se aleja de mí, se hace un lado para salir de la habitación y dirigirse a nuestra habitación. Tampoco es que a mí de gracia salir ahora mismo, esta haciendo un poco más de frio y Jenna no ha querido salir estos días.

Camino para seguirla e irme yo también a alistarme, cuando llego al cuarto la encuentro tirando los pocos vestidos que puede usar en la cama. Me recuesto en el marco de la puerta y la observo durante unos minutos antes de intervenir.

—Amor, ya habías elegido el vestido esta mañana—la detengo por el brazo—Lo dejaste en el baño para que fuera más fácil y rápido.

—Cierto, tomare una ducha rápido para que me ayudes con el cierre del vestido—me da un pequeño beso—Tu camisa esta en la cama, creo que no se arrugo con mis vestidos, déjate un botón suelto te veras más guapo así.

—Lo que ordene mi mujer.

Sonríe y camina hacia el baño mientras que yo trato de recoger las cosas que ella dejo en la cama, observo la camisa que me voy a poner y esta impecable. Escucho el sonido de la ducha caer y para darle un poco de espacio me ducho en la habitación de invitados.

Cuando estoy complemente seco me empiezo a vestir, visto una camisa blanca lisa de vestir junto a un saco y pantalones negros y si que le hago caso a Jenna de dejarme un botón suelto. Camino hacia nuestra habitación y cuando entro encuentro a Jenna saliendo también del baño, se vuelve pidiéndome ayuda con el cierre del vestido.

—Te ves hermosa—dejo un beso en su nuca—La mujer más hermosa que han visto mis ojos.

Se da la vuelta y me observa de arriba a abajo y sonríe.

—Tu también te ves guapísimo, cariño—pone una de sus manos en mi pecho, la mano que tiene el anillo de compromiso—Creo que muchas mujeres podrían envidiarme por lo guapo que eres.

Agarro esa misma mano y deposito un pequeño beso en el dedo en donde tiene el anillo, hemos hablado un poco sobre el compromiso y ambos estamos de acuerdo en que sea un compromiso largo, tal vez nos casaremos cuando nuestros bebés tengan uno o dos años.

Destinos Cruzados - [BORRADOR] ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora