Of Secrets and Love - Kookgi/Yoonkook

Capítulo 22

Ambos en ropa cómoda de cama estaban en la habitación del Rey pues su cama era más grande y su habitación mas privada. Jungkook recibía el masaje prometido y se dio cuenta que la posición si que había lastimado su espalda, pero cuando estaban en ello no le dolía nada, todo era muy excitante.

El Rey masajeaba su espalda usando aceites con un aroma agradable y suave, era relajante. A pesar de que el Rey trataba de no ser nada erótico, Jungkook sentía un hormigueo recorrer su cuerpo y comenzaba donde sea que Yoongi pusiera sus manos. Pero era natural y eso mismo lo relajaba hasta cierto punto.

—¿Jungkook?

—¿uh?

—¿a ti qué te gusta?

Jungkook abrió los ojos, se quedó pensando por un momento sin intentar levantarse pues Yoongi en ese momento masajeaba sus hombros.

—me gusta probar comidas exóticas cuando viajo, me gusta montar a caballo y hacer sonrojar a las personas, sobre todo si tienen piel pálida como tú. Y también disfruto de hacer enojar a las autoridades.

—No, ¿en serio? ¿El príncipe Jungkook rebelde? No lo creo—Yoongi fue sarcástico entre risas

—también me gustas mucho tú Yoongi, al inicio me atrajo tu apariencia como es normal, nunca creí que me corresponderías, aunque verte sonrojar me daba alientos. Después me cautivó tu fuerza y autoridad, exudas poder y hace que la gente te respete. Y ese misterio, me intrigas, sé que tienes muchos secretos aún Yoongi, quiero saberlos todos, los secretos son muy pesados, cargaré ese peso contigo. Te ayudaré, ya no estás solo.

—¿tú tienes muchos secretos?

—si, pero no tantos como tú.

—¿quieres decirme un secreto?

—el decir que prefiero a los hombres no contaría ¿cierto? —Ambos rieron ante lo obvio— bien, mmm... una vez visité a un "brujo" en Kurongi buscando una poción mágica para sanar las heridas más rápido. Empezaba a entrenar y odiaba que mis heridas me retrasaran días de entrenamiento, así que fui.

—¿un brujo? ¿Le creíste?

—era muy joven, y obviamente me estafó, pero me dio de regalo una poción mágica para durar horas en el sexo. Esa sí que sirvió, aunque sospecho que era algún estimulante o algo así. No magia.

—¿puedes viajar así de fácil a Kurongi?

—mi padre y el Rey de Kurongi tienen una relación voluble, pero son más amistosos entre ellos que contigo. En ese entonces la relación estaba bien y podía entrar a su país sin problemas. Ahora que el Rey se enteró de la alianza de Nukdae con Jeoung no creo que pueda poner un pie por allá.

—dame algo más jugoso, yo te dije el secreto de los diamantes morados, dame un secreto equivalente.

—me lo dijiste porque crees que morirás en el enfrentamiento, no porque querías.

—aún así te lo dije—el tono juguetón del Rey lo hizo ver más joven y Jungkook recordó que el Rey en realidad sí era joven, obligado a actuar diferente pero joven aún así.

—bien, no sé si sea equivalente, pero esto no lo sabe nadie más que Taehyung: No quiero ser Rey, eso lo saben muchos, pero la razón casi nadie.

—¿cual es la razón? —con sus dedos aceitosos Yoongi terminó el masaje en su espalda baja y lo tomó de la cintura para girarlo, al fin se miraban frente a frente.