Capitulo 24:

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Al despertar me sorprendí al encontrarme con unos brazos que rodeaban mi cuerpo y esa mira sobre mi mientras dormia.
Podía reconocer a la perfección quién era, era Oscar y eso me hacia sentir tan bien, no sabía lo que me ocurría con el era tan diferente cuando estaba con él que incluso podía ser solo yo misma, podía tontearle y hablarle como bebé como también podía ponerme celosa y hacer berrinches sin preocuparme que pensara que soy tan infantil.
Le sonreí y el hizo lo mismo para luego acercarse a mi y darme un besito xhiquito en mis labios.
-Buenos días mi vida.
-Buenos días dormilona.
-¿Como amanesiste? Mi vida.
-De maravilla a tu lado, ¿y tu princesa?
-Mejor que nunca mi amor.
Esta vez fui yo la que me acerque a el para darle un beso en los labios nose porque pero me fasinaba que me besara así me hacía perderme en un laberinto del que yo no quería salir jamás.
Al separarnos nos abrazamos hundiendonos en nuestros brazos quedandonos así un bueno rato sentía que mi corazón latía demasiado no hacía falta qu hablaramos para sentirme comoda me bastaba con estar con el así juntos, abrazos, sintiendo su aroma y su piel, nose como fue que se quedo dormido pero era como ver a un angelito en mis brazos descansar mientras el dormia yo acariciaba su carita y le daba besos sin dejar de verlo nose cuanto tiempo estuve biendolo hasta que desperto tallando sus ojitos hermosos.
-Mi dormiloncito -me acerque y le di un beso de piquito en sus labios- ¿que quieres que te haga de desayunar?
-Lo que sea amor.
-¿Seguro?
-Si amor.
-Esta bien voy a hacer el desayuno no tardo mi vida.
Me di un beso en su frente y me levante, vi como se volvio a acomodar dormido en la cama, sali y me dirigi a la cocina mientras buscaba que hacer para desayunar.
Despues de un rato de estar preparando el desayuno sentí Oscar me abrazo por detras y me dio un beso en el cuello.
-Huele delisioso amor.
-¿Si? Amor
-Claro amor.
-Yo pensaba llevarte el desayuno a la cama mi vida.
-No es necesario amor.
-Claro que sí yo quería llevartelo, es la primera vez que te quedas a dormir conmigo y quería tratarme muy bien.
-Lo haces mi amor, no es necesario que hagas eso.
-Por cierto amor ¿no crees que te regañen?
-No amor.
-¿Seguro? Amor.
-Si bebé.
Termine el desayuno mientras el me daba pequeños besos en el cuello eso me hacía sentir muchas cosquillas.
-Amor espera me dan cosquillas...
No me hizo caso y siguio dandome besos hata que dio risa y me separe repentinamente.
-En verdad me dan cosquillas -me puso su carita triste a la que nunca le puedo decir que no y me volvi a acercar a el- pero no me molesta que lo hagas amor, ¿vamos a desayunar?
-Vamos amor.
-Si mi vida.
Tome los platos que tenían el desayuno y los puse en el comedor me sente en el lugar que siempre ocupara y el se sento a mi lado le sonrei y comenzamos a comer lento.
Después de comer volvimos a mi recamara y nos volvimos a recostar mientras nos besabamos y acariciabamos lento mientras los besos desendia más y más hasta que los dos nos quedamos sin oxigeno y nos separamos para respirar cuando como me veía a los ojos, sus ojos mostraban sinceridad y cariño así que tenía que armarme de un valor inpresionante para poder decirle lo que quería, no quería seguir ocultandoselo y devía de saberlo...
-¿Amor...?
-Dime mi vida.
-¿Me quieres?
-Claro que no -me quede callada y desvie la mirada cuando sentí como mis ojos se llenaron de lagrimas pero no deje escapar ni una sola lagrima- no te quiero porque te amo mi vida -me abrazo y sentí un gran alivio ante sus palabras que ahora si sabía y estaba segura que tení que saberlo-.
-¿A pesar de todo?
-De T-O-D-O -senti como recalcaba cada letra de "T-O-D-O"- ¿pasa algo?
-Hay algo de lo que tengo que hablarte.
-Dime mi vida.
-Es algo muy serio...
-Me estas preocupando.
-No, no, no tranquilo.
-Entonces ya dime.
-Lo que pasa es que...
Dude mucho en desircelo pero sentía su mirada tan adentrada en la mía que en ese momento me arrepenti de querer decirle...
-Me estoy poniendo nervioso.
-Esta bien, solo espero que lo que estoy apunto de decirte no cambie nada entre nosotros.
-Mi vida claro que no te amo, nada nos va a separar pero por favor ya dime.
-Esque s...
Sentí como se formo un nudo en mi gargante y me quede sin hablar cuando comence a llorar tan triste porque quizas y eso arruinaría todo entre nosotros no sabía si en verdad quería decirselo ya...

HundidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora